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Con Emiliano en sus brazos, Anahí lo acercó a su cuerpo, acurrucándolo en sus brazos. Estaba desesperada por hablar con alguien, pero no quería decirlo en voz alta, para que su hijo no recibiera energía negativa.

-¡Mi amor! - le dijo a Emiliano. - ¿Te gustó conocer a toda la familia? Tu padre... Y el "Poncho de Papá". ¡Estoy seguro de que lo llamarás así, igual que Manu! ¡Seremos muy felices, yo, tú, papá Poncho y tus dos hermanitos! Anahí suspiró. -¡Tres! Tres hermanos... Viene otro... Sí, va a ser bueno... Manu y Dani tienen la misma edad y tú estás con tu otro hermano... Es... ¡Va a ser bueno! Suspiró, tratando de encajar las ideas en su lugar.

Al darse cuenta de que su hijo se había quedado dormido en sus brazos, Anahí se levantó con cuidado y lo llevó a dormir en su cuna. Le dio un beso en la frente y volvió a su silla.

No pudo soportarlo más con la ansiedad y decidió llamar a sus amigos, haciendo una videollamada. Dulce fue la primera en responder.

-¡¡Hola!! - dijo Dulce emocionada. -¿Cómo estás?

- ¡Necesito desahogarme contigo! Hizo una mueca de desaliento y Dulce cambió su expresión en el mismo momento.

-¿¿Qué pasó? ¿Está bien Emiliano? ¿Algo contigo y el poncho? ¿¿Qué pasó? —preguntó Dulce preocupada.

—Oh, amigo mío —suspiró—. - Déjame ver si Mai me contesta y hablo contigo...

Maite estaba en un restaurante y la música a todo volumen le impidió atender la llamada. Al ver que se trataba de una videollamada de Anahí, se preocupó y pensó que lo mejor era contestar. Avisó a sus amigos y se dirigió a la zona reservada para fumadores, donde no había tanto ruido y así podía comunicarse más fácilmente con sus amigos.

-¡Hola! - Dijo Maite mientras aparecía en la pantalla. - ¡Perdón por el retraso! ¡Había mucho ruido adentro y decidí venir aquí!

—¿Pero puedes hablar ahora? —preguntó Anahí. - Si no puedes, te llamaré más tarde.

-¡Hablar! ¡Puedo escucharlo aquí mismo! —replicó Maite—.

"Chicas, necesito desahogarme con algo..." suspiró. - No te lo vas a creer: ¡Diana está embarazada!

Inmediatamente los dos se sobresaltaron cuando escucharon la noticia.

-¿¿¿Embarazada??? Maite repitió la palabra con incredulidad.

-¡Dios mío! ¿Ahora mismo? —preguntó Dulce.

-¡Eso es todo! ¡Y aparentemente Poncho lo sabe desde hace mucho tiempo! ¡El problema es que no me lo dijo! Me enteré por Dani de que vino a visitarnos hoy y terminó soltándose.

- ¡Oh, cualquiera! - dijo Dulce queriendo ayudar a su amiga. - Sé lo difícil que es esto porque me asusté mucho cuando Muriel le planteó esta posibilidad a Christopher.

"¡Fuiste la primera persona en la que pensé, Dul! - dijo Anahí. - Me acordé de todo lo que te dije y de que me dijiste que no podías comparar las situaciones porque era diferente, mientras yo insistía en que era lo mismo. ¡Realmente no lo es! Tengo que admitir que...

—Sí... —Dulce esbozó una débil sonrisa—. - ¡No es porque nos tome por sorpresa!

- ¿Pero ya está confirmado? —preguntó Maite.

- ¡Porque Muriel era toda una mentira! - Agregó Dulce.

-¡Eso creo! - dijo Anahí sin mucho ánimo. - Todavía no he hablado bien con Poncho. No quería hablar de eso delante de los niños. ¡Fue a tomarlos y luego regresa aquí!

el milagro el reencuentroWhere stories live. Discover now