𝐴𝒎𝐨𝑟 𝑹𝐨𝑗𝑜//Heejake

𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 𝑽𝒆𝒊𝒏𝒕𝒊𝒖𝒏𝒐

Existía una tradición que dictaba que, cada vez que un nuevo rey era coronado, debía hacer lo que se le conocía como "la vuelta". Esto consistía en, básicamente, recorrer el país entero, como si fuera una gira únicamente para presentar al nuevo rey de la nación.

Nunca antes se ha cancelado tal celebración y, mucho menos ahora, cuando había que mantener algunas tradiciones en medio de toda la locura.

Y, precisamente de eso Seulgi quería hablar.

Observando a su hijo sentado frente a ella con la mirada gacha, Seulgi repiquetea sonoramente sus afiladas uñas contra el cristal de la mesa.

-Sé que aún no pasamos el duelo como normalmente se debería por respeto, pero mientras más rápido cumplamos con las actividades pendientes,más fácil será distraer al pueblo.

Heeseung solo podía asentir, perdido en el rubro de sus pensamientos, sintiéndose indiferente ante todo.

-Con la convocatoria de los demás líderes, tendremos que iniciar todo al inicio del mes entrante, fin de año se acerca y no hay nada que le guste más al pueblo que los fuegos artificiales y cualquier distracción absurda. Eso haremos-Sigue hablando la mujer.

Heeseung se remueve incómodo y se gana la atención de su madre.

-¿Sucede algo?-Cuestiona la mayor mirándole por encima de sus anteojos.Heeseung le mira por unos cortos segundos y no tarda en negar-Hay algo que me estás ocultando Heeseung.

Las alarmas de su cabeza se encienden y está alerta, se recompone rápidamente y habla- ¿A qué te refieres madre?

-Has estado actuando muy extraño últimamente.

Heeseung exhala-Simplemente, creo que todo está pasando muy rápido, no tengo tiempo ni para respirar.

-Lamento que sea así-Consuela Seulgi mientras le toma del torso de la mano- Pero ya es tu momento Heeseung, es hora de que le demuestres a todos quien lleva la corona puesta, no olvides que allá afuera hay gente que planea sobotearte.

Heeseung está de acuerdo con ella, no hay dudas de que hay mucha gente allá afuera esperando a que cometa el más mínimo error para señalarlo y estar en su contra. Ahora más que nunca debe estar alerta, y si es posible, a la defensiva, sumándole los ataques de los revolucionistas, estar a salvo es un reto.

Heeseung está a punto de levantarse, cuando escucha la voz de su madre nuevamente, retumbar contra las paredes.

- Sé tu secreto, no hace falta que mientas.

Se tensa y la mira, vuelve a caer en la silla con una incógnita enorme sobre su rostro. Frunce las cejas mostrando su confusión.

-Ese chico que tanto ocultas de mí -Explica la mujer, con una sonrisa ladeada. Deja los papeles que tanto hurgaba a un lado y cruza sus brazos sobre la mesa- No hace falta que me ocultes nada, tengo ojos por todas partes.

Heeseung no se aterra, y de cierta forma, tampoco se sorprende. En algún momento, eso pasaría.

-¿Quién es? -Interroga Seulgi.

-Es mi pareja, espero estés conforme con eso-Informa Lee, decidido y recto. Confía en la mujer que tiene al frente.

Seulgi ríe irónica y niega - Eres mi hijo ¿Cuando planeas presentarmelo?

Heeseung siente destellos plateados colorear sus mejillas, siempre estuvo agradecido con la sinceridad que Seulgi le ofrecía, tan seria y directa, es fácil hablar con ella.

-Antes de eso, debes saber algo-Se endereza en un silla, de repente sintiéndola incómoda, y aclara su garganta- No es uno de nosotros.

El rostro de Seulgi se pinta en confusión, pero rápidamente cambia su expresión y arquea sus cejas-¿A qué te refieres exactamente?