CAPÍTULO 111 AL 120

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CAPÍTULO 111: REUNIÓN CON LOS NOBLES


Cuando Alessandro despertó, se encontró solo, Abril se había levantado en algún momento sin que él se diera cuenta.

Él la buscó con la mirada en la habitación, ella estaba en el balcón recibiendo los primeros rayos del sol, su cabello rojizo se ondeaba con la brisa, ella se veía hermosa, él se quedó mirándola fijamente y por un momento sintió como si la fuera a perder, como si ella fuera a salir volando por el balcón dejándolo atrás y eso lo aterro.

Abril volvió a la habitación y al ver que ya se había despertado lo saludo.

_Buenos días Lessan.

_Buenos días, Aby, ¿Cómo te encuentras?

_Estoy bien, solo necesitaba tener una buena noche de sueño, estoy con todas las energías renovadas.

_ ¿Has soñado esta noche con tu madre?

Abril sabía que cada vez que ella le contaba a Alessandro que había soñado con su madre muerta, él se preocupaba, él no quería mentirle sin embargo pensó que eso sería lo mejor, de lo contrario él no iba a dejar de preocuparse.

_No, ella no siempre me visita en sueño, a veces pasan días sin que aparezca.

Alessandro se levantó de la cama, se le acercó, le quitó una pequeña hoja del cabello que había ido volando hasta ella, él se la mostró y le dijo.

_ ¿Hace mucho que estas despiertan?

_No, hace poco desperté, vi que el sol estaba saliendo y quise ver el amanecer.

_ ¿Por qué no me despertaste?

_Porque parecías cansado, sé que tienes mucho trabajo que hacer, así que no quise interrumpir tu preciado sueño.

_Antes solía dormir muy poco, para mis tres horas de sueño es suficiente.

_Claro que no, tres horas está lejos de ser suficiente, si yo solo durmiera tres horas acabaría enfermando, por eso tu no lo hagas, no quiero verte enfermo.

_No te preocupes por eso, tu esposo está lleno de vida, no me enfermare.

Abril se sentó en el borde de la cama y le dijo.

_Aun así no lo hagas, no soportaría perderte.

Alessandro acarició la mejilla de Abril, le dio un beso en la frente y le dijo.

_Eso no pasara, yo siempre estaré a tu lado.

Alessandro se quedó un rato con Abril, después tuvo que levantarse de la cama aun cuando lo único que quería era abrazar a Abril y quedarse así con ella durante toda la vida, pero él sabía que eso era imposible, como rey tenía muchas obligaciones que debía cumplir y ese día en especial no podía quedarse con Abril y escaparse de su trabajo, ya que tenía una reunión con los nobles, ese día estaría anunciando que pronto se estaría realizando el nombramiento de Cassian como duque.

Alessandro sabía que eso causaría molestia entre los nobles, sin embargo, Cassian parecía haber tomado una decisión y él quería respetarla. Sobre todo, porque eso sería de gran ayuda, la guerra iniciaría en cualquier momento y lo que menos necesitaba el reino en ese momento era una guerra interna, que él reino empezará a fragmentarse, ellos debían de estar unidos para poder enfrentar lo que les vendría.

Él sabía que con Cassian recuperado de su lesión, muchos nobles que habían creado fracciones antes de la guerra volverían a levantarse ya que había muchos nobles que sentían odio por él, por no ser un títere que se dejara mangonear por ellos. Lo que ellos no sabían era que su hermano era aún peor que él, Cassian nunca se doblegaba ante nadie.

Alessandro abrazo a Abril con fuerza, ella le dio pequeños golpecitos en el brazo para llamar su atención.

_Lessan, no tan fuerte, no puedo respirar.

_Lo siento, me deje llevar.


CAPÍTULO 112: MALOS RECUERDOS


Abril sentía a Alessandro muy ansioso, como si algo le preocupara, ella le preguntó.

_Te siento muy ansioso, ¿Te pasa algo?

_No, nada.

_ ¿Seguro?

_Solo no quiero dejarte, quiero estar a tu lado, siempre que estoy lejos de ti me siento ansioso.

_Yo estaré bien, no tienes que estar ansioso. Alessandro le acaricio la mejilla y le dijo.

_Eso ya lo sé, pero es algo que no puedo evitar. Alguien tocó la puerta, era el asistente de Alessandro.

_Su majestad, hay muchas cosas para hoy. Alessandro suspiro y dijo.

_Enseguida iré.

Él le dio un beso en la mejilla a Abril y le dijo.

_El deber me llama, debo irme.

_ ¿Comerás conmigo?

_No creo que sea posible, pero lo intentare.

_Te estaré esperando.

Alessandro se cambió y después salió, su asistente estaba junto a la puerta esperándolo, él hizo una reverencia y lo saludo.

_Buenos días su majestad, lamento venir tan temprano, pero hay muchas cosas para el día de hoy, documentos que necesitan su aprobación y la reunión con los nobles.

_Ya lo sé, hoy tengo que reunirme con esa bandada de cuervos. Alessandro comenzó a caminar, Gabriel caminó unos cuantos pasos detrás de él y le dijo.

_No debería de expresarse de esa manera de los nobles su majestad, ellos se ofenderían si llegaran a escucharlo.

_Pero si es la verdad, ellos son como los cuervos en la espera de devorar mi carne en el primer descuido, quiero que hables con el templo, quiero que la ceremonia de juramentación se haga lo más pronto posible y asegúrate de encontrar un profesor de baile para mi esposa.

_ ¿Un profesor de baile?

_Espera, una profesora sería mejor, creo que lady Elizabeth seria perfecta para hacerlo, pide a uno de los sirvientes que la haga venir.

_Su majestad, ¿Acaso piensa llevar a la princesa al baile?

_Así es, ella será presentada formalmente como mi esposa y mi reina.

Gabriel se quedó muy sorprendido ante las palabras del rey, ya que hacía solo unos meses atrás él había mostrado desprecio e indiferencia hacia la princesa.

Alessandro siguió caminando mientras hablaba.

_También quiero que empieces a organizar todo para que mi esposa sea coronada como mi reina.

Gabriel volvió a detenerse y preguntó.

_ ¿Qué?, ¿Coronar a la princesa como reina?

_Si, ¿Tienes algún problema con eso?

_No, pero, no creo que eso le guste a los nobles.

_Eso no me importa, Abril es mi esposa y por lo tanto mi reina, sus opiniones me tienen sin cuidado.

Alessandro continuó caminando, Gabriel tuvo que aligerar el paso para poder alcanzar al rey.

_Su majestad, está completamente seguro de lo que está diciendo.

_Si, ¿A caso tú también estas en contra de que mi esposa tome su lugar en el trono junto a mí?

_Por supuesto que no, pero no estoy seguro de que ella esté preparada para ser reina, hasta el momento ella nunca se ha involucrado en nada, cuando se convierta en reina ella deberá empezar a formar parte de los círculos sociales y deberá tomar sus obligaciones como reina.

_No te preocupes por eso, cuando ese momento llegue ella lo estará.

Gabriel al ver la confianza que el rey mostraba en la princesa, no pudo decir nada más.

_También quiero que organices una reunión para esta semana con los generales.

_La guerra es inminente, ¿No?

_ Este no es el mejor lugar para hablar de eso, hay muchos oídos y ojos que nos ven.

_Lo siento su majestad, he sido imprudente.

_ Elige mejor el lugar en el que haces preguntas delicadas la próxima vez.

_Así lo haré su majestad.

Después de que Alessandro se marchara Abril mandó llamar a las sirvientas, después del desayuno ellas prepararon su baño. Al terminar mientras Abril estaba sentada frente al tocador y peinaban su cabello una de las sirvientas le preguntó.

_Hoy hace un día precioso, no le gustaría a su majestad dar un paseo por el jardín.

Aunque aquella sirvienta no se lo hubiera sugerido eso era precisamente lo que ella había planeado hacer, pero al escuchar la sugerencia de aquella sirvienta no pudo evitar recordar que la primera vez que una de las sirvientas le había sugerido dar un paseo por el jardín, ella aún tenía algunas marcas en su cuerpo por las espinas que se habían clavado en su cuerpo aquel día.

Abril se estremeció.

_ ¿Pasa algo su majestad?

_No, solo recordé algo desagradable.

_No hay nada mejor que el aire fresco para despejar la mente.

_Supongo que tienes razón.

Después de que aquella sirvienta terminara de peinarla Abril le pidió que fuera a buscar algo de comer para Koda, cuando ella se fue, Abril escribió una nota, salió de la habitación, en el pasillo había otra sirvienta, ella le entregó la nota y le dijo.

_ ¿Puedes entregarle esto al guardia Noa por favor?

_Por supuesto su majestad.

Abril volvió a la habitación, la otra sirvienta que la había, estado atendiendo regresó con la comida de Koda, después de que él comiera, se dirigieron al jardín.

Mientras paseaban por el jardín aquella sirvienta insistió para ir al jardín de las rosas, Abril tenía malos recuerdos sobre ese lugar, ella no quería ir, pero aquella sirvienta no paró de insistir hasta que la hizo ir, cuando llegó al jardín de las rosas de entre los rosales salió una mujer rubia, Abril solo la había visto una vez, pero la reconoció enseguida era Victoria Vampel, la mujer que había sido la ex prometida de Alessandro.

Abril miró a aquella sirvienta que lo había llevado hasta ahí, ella esquivó su mirada. Abril no quería estar ahí, ella retrocedió, pero Victoria le dijo.

_Detenla.

Aquella sirvienta agarró a Abril impidiéndole marcharse.

_ ¿A dónde crees que vas?

_No tengo nada que ver contigo, dile que me suelte.

_Claro que tengo asuntos que atender conmigo.

Victoria se acercó a Abril, con el abanico que llevaba le levantó el rostro y le dijo.

_Al parecer es verdad que has empezado a ganar el favor de su majestad.

_Si no me dejas ir te meterás en problemas.

_ Alessandro siempre me pondrá por encima de ti, no pienses que por unos días de amabilidad que Alessandro te mostro eres importante para él, él y yo estuvimos prometidos durante años, nuestros lazos son más fuertes de los que nunca tendrá contigo.

_Tú no sabes nada de mi relación con Lessan.

_Lessan, acaso intentas parecer cercana a él al llamarle por su apodo.

Puedes pensar lo que quieras.


CAPÍTULO 113: ELLA ES LA REINA


Desde que era una niña Victoria escuchó repetidas veces que ella sería la reina de Cosset, que no habría nadie por encima de ella y ella lo creyó. Pero un día una carta llegó a su padre, él se había puesto furioso, había destrozado toda la habitación para desahogar su ira.

Cuando Victoria entró a su despacho y vio todo destrozado le preguntó.

_Padre, ¿Qué ha pasado?

Alfonso le tiró la carta, Victoria al ver que aquella carta tenía el sello real la recogió del suelo y al leer su contenido se sintió igual de furiosa y humillada que su padre, era una carta rompiendo el compromiso que había entre ella y Alessandro.

_ ¿Qué significa esto padre?

_Tu compromiso con el rey ha sido roto.

_ ¿Qué?, pero si se suponía que mi boda sería dentro de unos meses, yo iba a ser la reina, padre tienes que hacer algo, mi matrimonio no puede ser cancelado.

_ ¿Y qué quieres que haga?, esa carta ha venido del palacio real, la ha enviado el rey, no hay nada que yo pueda hacer.

_ ¿Pero por qué ha cancelado el compromiso?

_No lo sé.

Alfonso tomó a victoria por los hombros y comenzó a zarandearla.

_ ¿Qué hiciste para ofender a su majestad?, ¿Qué hiciste para que él quisiera romper el compromiso?

_Yo no he hecho nada padre, te lo juro. Alfonso tiró a Victoria al suelo y le dijo.

_Maldita sea, ¿entonces por qué razón su majestad ha cancelado el compromiso?

_No lo sé.

_Vete, hay muchas cosas en las que tengo que pensar.

Ese día todos los sueños y todos sus planes fueron destrozados. Ella sintió que su vida perdía sentido. Victoria estuvo yendo al palacio cada día intentando hablar con Alessandro, pero él no la recibió.

Unos meses después recibió Victoria se enteró del matrimonio de Alessandro con la princesa del reino de Laios. Ella estuvo presente durante la boda y al verla el odio, por haberle arrebatado todo lo que debía ser suyo.

Aunque habían pasado varios años desde que Alessandro se había casado, pero él nunca la había reconocido como su esposa, ya que después de varios años ellos aún no tenían hijos y tampoco como reina ya que seguía sin ser coronada como tal, eso lleno de esperanzas a Victoria, aún tenía la oportunidad de volverse reina y que sus hijos fueran los únicos herederos al trono.

Pero desde hacía unos meses los espías que Victoria, que tenía en el palacio le habían dicho que la actitud del rey hacia la princesa había cambiado, que su relación había empezado a mejorar y eso preocupo a Victoria ya que, aunque su padre estaba presionando al rey para que la tomara a ella como esposa, si la relación entre la princesa y el rey se volvía mejor corría el riesgo de que el rey no aceptara tomar una segunda esposa.

Cuando la princesa había sido atacada por una de las sirvientas y la había herido de gravedad, Victoria deseo con todas sus fuerzas que muriera, pero su deseo no se cumplió y cuando la princesa se había recuperado muchas de las sirvientas habían sido reemplazadas del palacio y de las espías que tenía solo había quedado una, la sirvienta que había llevado a Abril hasta ese jardín para que se encontrara con ella.

Victoria se preguntó si la princesa estaba embarazada, si se debía a ese el cambio del rey hacia ella, Victoria le tocó el vientre con el abanico y le preguntó.

_ ¿Acaso tu confianza viene de algún hijo?

Abril estaba molesta por la actitud de Victoria, odio que ella intentara tratarla como alguien sin valor. Abril la empujo, Victoria se enfadó y levanto su mano para darle una cachetada.

_Cómo te atreves a tocarme maldita desgraciada, escoria del reino de Laios.

Abril cerró sus ojos esperando recibir el golpe, sin embargo, alguien detuvo la mano de Victoria, era Noah, había llegado justo a tiempo, Abril se alegró de haberle enviado esa carta antes de seguir a esa sirvienta, ella había desconfiado de ella debido a su insistencia para que ella saliera al jardín y no se había equivocado, las intenciones de aquella sirvienta no era buena.

_No se atreva a tocar a la princesa lady Victoria.

_Suéltame imbécil.

Noah soltó la mano de Victoria y al ver que aquella sirvienta estaba reteniendo a Abril le dijo.

_Cómo te atreves a tratar de esa manera a su majestad, tanto te estorba la cabeza en tu cuello.

Aquella sirvienta soltó a Abril y retrocedió con temor ante la intensa mirada de aquel caballero.

Noah le preguntó a Abril.

_Su majestad, ¿se encuentra bien?

_Estoy bien.

Noah se dirigió a Victoria.

_No se cuales hayan sido las intenciones de lady Victoria al hacer que esta sirvienta trajera a su majestad la reina hasta este lugar tan apartado.

Victoria al escuchar que Noah había llamado a Abril , su majestad, la reina. Se río a carcajadas y le dijo.

_La reina, esta mujer no es y nunca será la reina, no digas estupideces.

_Ella es la esposa de su majestad el rey y es solo cuestión de tiempo que sea coronada como la reina, yo en su lugar cuidaría mis palabras de lo contrario dudo que goce de una buena y larga vida en el futuro.

_Me estás amenazando?

_No, solo le estoy dando un consejo.


CAPÍTULO 114: ELLA ES LA HIJA DEL ENEMIGO


Victoria se puso furiosa al escuchar las claras amenazas de aquel guardia y le dijo.

_Yo conozco a Alessandro desde hace mucho tiempo, en verdad piensas que él me castigará, él que estará en problemas eres tu por ser tan insolente conmigo.

_Si ese es el caso aceptaré las consecuencias. Abril se interpuso entre Victoria y Noah, ella dijo.

_Noah no es grosero, eres tú la que ha venido al palacio engañando y manipulando a los sirvientes para que me traigan hasta aquí.

Abril se armó de valor y le dijo.

_En este lugar tu solo eres una invitada no deseada, no sé cuáles eran realmente tus intenciones al hacerme venir hasta aquí, pero déjame decirte esto, recuerda cuál es tu lugar, yo soy la esposa de Alessandro y aunque en el pasado tu fuiste su prometida, eso ya no tiene valor en la actualidad.

Abril dio media vuelta y le dijo a Noah.

_Vámonos Noah.

Victoria estaba tan molesta por las palabras de la princesa que rompió el abanico que tenía en las manos y susurro con odio.

_Haré que pagues por esta humillación maldita perra.

Después de que Abril desapareciera entre los rosales Victoria dio media vuelta para irse, la sirvienta que había llevado hasta ahí a Abril se le acerco, se aferró a la falda de su vestido.

_Lady Victoria, ¿Qué va a hacer de mí?

_Has lo que quieras, eso a mí no me importa.

_Pero estaré en problemas cuando el rey se entere de lo que he hecho.

Victoria aparto la mano de aquella sirvienta de un manotazo y respondió.

_Ese no es mi problema.

Cuando estuvieron lejos de aquel jardín Noah volvió a preguntarle a Abril.

_Su majestad, se encuentra bien.

_Si, gracias por haber venido a salvarme,

_No, discúlpeme por no haberme llegado antes.

_Llegaste justo a tiempo.

_Hizo bien al mandarme esa nota, aunque quizás no debió haber seguido a esa sirvienta si desconfiaba de ella.

_No estaba segura de si ella estaba tramando algo o no.

_El palacio había sido limpiado, pero al parecer aún quedaban algunas ratas, pero no se preocupe, me encargare de que esto no vuelva a suceder.

_ ¿Crees que soy ingenua?

_ ¿Disculpe?

_ ¿Crees que soy ingenua por haber confiado en esa sirvienta aun cuando tenía mis dudas?

_Para nada, jamás pensaría eso de su majestad.

Abril toco una rosa blanca, acaricio sus pétalos y le dijo.

_No me gusta esperar lo peor de las personas, sino todo lo contrario, espero lo mejor de ellos, porque se lo que se siente que una persona te juzgue sin siquiera conocerte y no quiero hacer lo mismo.

Noah recordó que la princesa no siempre había sido amada, ella era la hija del enemigo y por lo tanto fue obligada a mantenerse encerrada en una habitación y poco después a vivir alejada de todos en una pequeña cabaña en la parte más alejada del palacio, un lugar en el que fue olvidada por todos, hasta hacia pocos meses.

_Yo en verdad no pienso que su majestad sea ingenua, yo pienso que su majestad es una buena persona.

_Gracias.

Alessandro estaba reunido con los nobles, desde que habían entrado en la habitación ellos no paraban de hacer la misma pregunta una y otra vez.

_ ¿Cuándo tendrá un heredero su majestad?

_Lo tendré cuando sea el momento, ahora hay asuntos más importantes de que hablar.

El duque Alfonso Vampel respondió.

_El tema de un heredero es importante su majestad, no debe restarle importancia a quien será el próximo heredero al trono y como parece ser que será imposible que tenga hijos con la princesa del reino de Laios…

Alessandro no dejo terminar lo que estaba diciendo el duque.

_Duque Vampel, mi esposa ya no es la princesa del reino de Laios, ahora es la reina del reino de Cosset.

El duque se puso en pie, él estaba muy molesto y sorprendido a la vez y dijo.

_ ¿Ella aún no ha sido coronada como reina?

_Y por qué crees que, preparado esta reunión, pronto mi esposa será coronada como mi reina.

_ Ella es la hija del enemigo, como puede darle el reino, haciendo de la reina a esa mujer.

_Es verdad que ella es la hija de mi enemigo, pero ella es mi esposa y espero que se dirija a ella con respeto duque Vampel. Alessandro le lanzo una mirada asesina al duque Vampel como diciendo, cierra la boca si quieres que perder la cabeza.

Alfonso volvió a sentarse y dijo.

_En ningún momento quise ofender a su esposa su majestad, yo solo estoy diciendo lo que es evidente, el asiento de la reina es algo que no se debe tomar a la ligera.

_Y no lo estoy haciendo, ella será coronada como mi reina, porque sé que ella será una excelente reina.

_Todo el reino la odia por ser quien es.

_Pues más les vale que cambien de opinión, ya que no dejare que nadie le falte el respeto a mi esposa.

Las palabras de Alessandro eran firmes, ninguno de los presentes dijo nada más, todos se quedaron en silencio. Alessandro continúo diciendo.

_También los reuní para decirle que mi hermano Cassian tomará el título de duque, la ceremonia para recibir el título será dentro de poco.

Al escuchar que el príncipe Cassian dejaría el palacio para tomar un título nobiliario hizo que todos empezaran a murmurar, Gabriel hizo que se callaran.

_Silencio, su majestad aún no ha dejado de hablar.

Todos volvieron a guardar silencio, Alessandro continúo hablando. Cuando la reunión termino y salieron de la habitación Gabriel dijo.

_No han tomado muy bien la noticia de que su esposa será coronada como reina.

_No me importa sus opiniones, solo espero que sean prudentes con lo que dicen si no quieren que sus cabezas sean separadas de sus cuerpos.


CAPÍTULO 115: NO QUIERO SER COMO MI PADRE


Alessandro se dirigía a su oficina cuando vio a Abril paseando por el jardín en compañía de Noah, no había ninguna sirvienta acompañándola, eso a él le pareció extraño y le dijo a Gabriel.

_Adelántate, yo iré después.

Gabriel al ver a dónde se dirigía el rey dijo para sí mismo.

_Este parece ser otro día en el que tendré que hacerme cargo de todo.

Gabriel sabía que cuando el rey se reunía con su esposa dejaba todo el trabajo atrás, él se perdía durante el resto de la tarde. Eso a Gabriel seguía pareciéndole extraño, le costaba creer que el rey quien cumplía diligentemente todas sus obligaciones dejara todo por ella.

Cuando Alessandro llegó donde estaban Abril y Noah, vio que Abril tenía marcas rojas en sus brazos, como si la hubieran agarrado con mucha fuerza.

_ ¿Qué te ha pasado?, ¿Por qué tienes marcas rojas en tus brazos?

Noah se arrodilló y respondió.

Lo siento su majestad, si hubiera llegado antes ella no hubiera salido lastimada.

Alessandro furioso le preguntó a Abril.

_ ¿Quién se ha atrevido a ponerte la mano encima?

_Cálmate Lessan, estoy bien.

_Noah, ¿Quién ha sido?

_Fue una de las sirvientas, era una espía al servicio de lady Victoria Vampel.

_Envía esa sirvienta al calabozo y prohíbe la entrada de Victoria al palacio, no quiero volver a verla por aquí.

_Si su majestad.

Noah se fue a cumplir las órdenes del rey. Alessandro se acercó a Abril, acarició las marcas rojas que había en su brazo y le preguntó.

_ ¿Te duelen mucho?

_No me duelen, estoy bien.

_Creí que todas las ratas habían sido eliminadas, supongo que aún quedan algunas, deberá hacerse una segunda limpieza.

_Lessan, ¿Qué le pasara a esa sirvienta?

_El pecado de tocar a un miembro de la familia real es la muerte

_Yo no quiero que corra la sangre de nadie por mi culpa, no le hagas daño, solo expulsada del palacio.

_Ese es un castigo demasiado leve, si no quieres que la mate cortaré sus manos por haberse atrevido a tocarte.

_No, no quiero que la lastimes.

_Ella te lastimo primero Aby.

_No lo hagas Lessan, por favor, yo no quiero ser como mi padre, te lo pido, no le hagas daño, el expulsarla del palacio es más que suficiente, yo estoy bien, no es como si me hubiera herido de muerte.

Alessandro sentía que su sangre hervía de la ira, el expulsar a esa sirvienta él lo vio como un castigo demasiado leve, Abril al ver que él no respondía volvió a decirle.

_Prométeme que no le harás daño a esa sirvienta Lessan. Alessandro le acaricio la mejilla y entre dientes le dijo.

_Está bien, lo prometo, no le haré daño, solo la expulsaré del palacio.

_Gracias.

_Esta vez seré clemente porque me lo estas pidiendo, pero no habrá una próxima vez, tú eres muy valiosa para mi Abril, si alguien te lastima no me contendré y haré que desee no haber nacido, sin importar quien sea.

_ El derramamiento de sangre solo trae más sangre, y yo no quiero eso.

_Aunque no te guste, a veces es necesario derramar sangre.

_Mientras pueda evitarlo, prefiero evitarlo.

_Pronto empezaré la guerra, en la guerra el derramamiento es inevitable, aunque me pidas que no participe, que me contenga, no podré hacerlo.

_Lo sé, pero esta vez puedes elegir hacerlo o no, así que no lo hagas.

_De acuerdo.

Alessandro aún tenía mucho trabajo pendiente, pero no quería dejar sola a Abril así que le dijo.

_Tengo que ir a mi oficina a terminar mi trabajo, ¿Quieres acompañarme?

_No quiero ser una molestia.

_Tú nunca lo eres, además hoy hay demasiados nobles en el palacio, me sentiré más tranquilo si estas a mi lado.

_De acuerdo, entonces iré contigo.

Cuando llegaron a la oficina Gabriel se sorprendió ya que no esperaba que el rey regresara tan pronto y aún menos que lo hiciera acompañado, el saludo a la Abril.

_Buenos días su majestad.

_Buenos días.

Alessandro tomó su lugar detrás del escritorio y le dijo a Abril.

_Puedes ponerte cómoda, Gabriel, ¿Cuáles son los asuntos más importantes para hoy?

Gabriel reaccionó, le paso unos documentos y le dijo.

_Debe aprobar los presupuestos para empezar a trabajar en los graneros que usaremos para guardar las provisiones para la… Gabriel se quedó silencio, no sabía si debía decir para qué eran frente a la princesa, Alessandro le dijo.

_Continua.

_Para guardar las provisiones para cuando inicie la guerra.

_Las tierras de la frontera siempre son las más afectadas durante la guerra, cuando la guerra inicie debemos trasladar a esas personas a un lugar seguro, quiero que mi gente sufra lo menos posible durante la guerra.

_Yo también había pensado en eso su majestad, pero aún no he decidido a dónde podríamos trasladarlas.

Alessandro se levantó y fue a ver un gran mapa del reino que había colgado en la pared y dijo.

_Las tierras del marqués Parret están alejadas de la frontera, aunque no demasiado, si los trasladamos a ese lugar estarán seguros durante la guerra.

_Es verdad, esa es una buena idea, pero cree que él acepte acoger a todas esas personas.

_Más le vale que así sea si es que aun quiere conservar su título de marqués.

Alessandro volvió a su asiento detrás del escritorio, firmó los presupuestos después de revisarlo. Gabriel se retiró, cuando lo hizo Abril le dijo.

_Lo siento.

_ ¿Por qué te estás disculpando?

_Yo no soy la única que desea evitar un derramamiento de sangre, tú también lo estás haciendo, tú también quieres proteger a tu gente.

_Se que en ocasiones puedo parecer cruel, pero ese no es el caso, yo solo quiero que mi reino este en paz, pero para lograr esa paz la guerra es inminente.

Abril se acercó a Alessandro y le dijo.

_Tú trabajas mucho por este reino, yo también quisiera hacer lo mismo, ¿Cómo puedo ayudarte?

_Con estar a mi lado es más que suficiente.

_Se que no tengo los conocimientos necesarios para ayudarte, pero aprendo rápido, si me enseñas también podre ser de ayuda, no quiero ser solo una muñeca bonita que decora la habitación, quiero ser tu ayuda y apoyo.

_En verdad quieres ayudarme.

_Si, quiero dejar de ser la princesa inútil que no hace más que dar paseos por el jardín.

Alessandro vio convicción en los ojos de Abril, supo que ella estaba hablando muy enserio, así que accedió a su petición.

_De acuerdo, si eso es lo que deseas le pediré a Gabriel que te enseñe cómo gestionar algunas cosas.

_Aunque no lo parezca soy buena aprendiendo, solo necesitan decirme algo una vez y no lo olvidaré, el maestro que tuve cuando era joven, aunque yo no le agradaba siempre me alababa por eso, aprendí a leer y a escribir a una edad temprana, aunque dejaron de enseñarme cuando cumplí los 6 años cuando se enteraron que no poseía magia.

Alessandro se quedó sorprendido al escuchar lo que Abril le estaba diciendo, aunque la realeza empezaba antes sus estudios normalmente ellos no aprendían leer y a escribir si no hasta la edad de 7 años, él le preguntó.

_Abril, ¿A qué edad aprendiste a leer?

_Creo que fue a los cuatro años.

_En verdad eras muy joven.

_Si, bueno, los herederos al trono del reino de Laios suelen tomar clases a una edad temprana, aunque según mi maestro yo era la primera en aprender a leer y a escribir a una edad tan temprana, mis hermanos, por ejemplo, aprendieron a leer y a escribir a cuando tenían 6 años, ellos me odiaban por haber aprendido antes que ellos, ellos nunca me perdonaron eso.

_Tú casi nunca hablas de tus hermanos, ¿no te llevabas bien con ellos?

_Yo a ellos no les agrado.

Alessandro vio cierta incomodidad en Abril, estaba claro que ella no quería hablar de ellos, así que él decidió no seguir insistiendo más en ese tema.


CAPÍTULO 116: YA NO QUIERO SEGUIR HUYENDO


Maya y Cassian estaban regresando al palacio cuando el carruaje se detuvo de repente, Cassian se bajó del carruaje para ver por qué se habían detenido y le dijo a Maya.

_Quédate en el carruaje, enseguida regreso. Maya no le hizo caso y se bajó del carruaje.

_No pienso quedarme en el carruaje, voy contigo.

_Está bien, pero mantente detrás de mí. Maya se río y le dijo.

_Creo que será mejor que tú te mantengas detrás de mí. Ambos se dirigieron al frente donde estaba el cochero, de pie bloqueando el paso del carruaje había dos hombres encapuchados, inmediatamente Cassian sacó su espada y preguntó.

_ ¿Quiénes son ustedes?, ¿Qué es lo que quieren?

Ambos hombres se quitaron la capucha, era Ethan y otro hombre al cual Cassian no reconoció, lo que si sabía era que ese hombre era un elfo al igual que Ethan por el color de sus ojos. Maya dio un paso adelante al reconocer a Ethan y le dijo.

_ ¿Ethan?, ¿Qué hace aquí?

_Los estábamos buscando, hay algo en lo que necesitamos que nos ayuden.

Cassian se quedó mirando a Maya y le preguntó en voz baja mientras señalaba al compañero de Ethan.

_ ¿Le conoces?

_Si.

Maya se acercó y preguntó.

_ ¿Cómo nos han encontrado?

_Eso no importa.

Maya pensó que su hermano debía de haberle dicho donde se encontraban así que solo preguntó.

_ ¿Qué necesitan?

_Quiero que nos hablen más sobre la oscuridad.

_Creí que habías dicho que esta vez sería nuestra guerra y no la vuestra.

Respondió Cassian un tanto molesto.

_La oscuridad es algo que nos compete a todos, Ethan no debió decir eso.

Respondió Dantriel.

_ ¿Qué es lo que quieres saber?

_Todo lo que sepas sobre la oscuridad.

_De acuerdo, yo responderé a todas sus preguntas, pero a cambio ustedes tendrán que responder a mis preguntas.

Dantriel asintió con la cabeza y respondió.

_Ese me parece un trato justo.

Cuando Gabriel volvió a la oficina del rey, Alessandro le dijo.

_Quiero que le enseñes a mi esposa sobre la contabilidad y cómo manejar el presupuesto del palacio.

_Si, su majestad. Gabriel le dijo a Abril.

_Su majestad vamos a otra habitación, para no interrumpir al rey.

_Por supuesto.

Alessandro le lanzó una mirada asesina a Gabriel como diciendo. Mas te vale cuidar a mi esposa.

Gabriel sintió como si fueran a matarlo, si llegaba a ser imprudente y era grosero con la princesa. Él se dirigió hacia la puerta con la intensa mirada de Alessandro en su espalda y le dijo a Abril.

_Por favor sígame su majestad.

Gabriel llevó a Abril hasta la biblioteca, Abril nunca había ido a esa parte del palacio, se sorprendió mucho al ver tantos libros, la biblioteca era enorme, había altas estanterías llenas de libros, mientras ella veía todo a su alrededor Gabriel le dijo.

_Su majestad empezaremos leyendo algunos libros, luego le enseñaré como debe gestionar los presupuestos y algunos asuntos que suelen ser obligaciones de la reina.

_Muchas gracias.

Gabriel tomó unos cuantos libros de una estantería cercana y se los entregó a Abril. Ella buscó donde sentarse y empezó a leer.

Gabriel se quedó mirando fijamente, eso hizo sentir un poco incómoda a Abril.

_Sir Gabriel, no es necesario que se quede aquí, yo tardaré un rato en leer estos libros, sé que debe de estar ocupado, así que puede retirarse.

_No puedo irme y dejarla sola, su majestad me mataría si lo hago.

_Pero Alessandro necesita que usted esté a su lado, no quiero que esto lo vaya a afectar.

_No se preocupe, no creo que eso vaya a ser un problema, el irme y dejarla aquí sola si sería un problema.

Abril continuó leyendo, ella solo veía detenidamente cada página durante unos minutos y pasaba página, Gabriel creyó que la princesa encontraba aburrido el leer y que por esa razón solo fingía que lo hacía, él había visto a muchas mujeres nobles actuar de esa manera para llamar la atención de los hombres, él le dijo.

_Su majestad si hay algo que no entienda puede preguntármelo y si alguno de estos libros es demasiado difícil puede decírmelo.

_No creo que sean difíciles, de momento voy entendiendo lo que voy leyendo.

_ ¿De verdad?

_Si.

Abril pudo ver la expresión de sorpresa e incredulidad en el rostro de Gabriel, él no le creía, debía pensar que ella solo estaba fingiendo que lo entendía así que le dijo.

_Quizás mi método de estudio sea un poco raro, pero no estoy fingiendo que lo entiendo, en verdad lo hago.

Gabriel se preguntó si la princesa podía leer su mente.

_No he leído su mente sir Gabriel, ha sido por la expresión de su rostro, aunque no lo parezca soy buena leyendo las expresiones de las personas, así lograba evitar los problemas, evitaba que me castigaran.

Gabriel había pensado que la princesa había tenido una vida fácil, pero sus palabras decían que no era así, que su vida había sido más dura de lo que él se imaginaba.

_Lo siento si la he hecho sentir incómoda su majestad.

_No se preocupe sir Gabriel, no me ha hecho sentir incómoda, es solo que quiero que sepa que en verdad me estoy esforzando, quiero ser de ayuda para Alessandro, quiero ser de ayuda para este reino.

_Yo le ayudaré en todo lo que esté en mis manos su majestad.

_Gracias sir Gabriel.

Abril estuvo todo el día en la biblioteca, ella estaba tan absorta leyendo que no se dio cuenta de que el día se estaba acabando hasta que la luz empezó a escasear. Ella cerró el libro y miró el jardín bañado por los últimos rayos del sol hacía solo unos meses a ella le habría parecido un desperdicio el tener que estar estudiando en una habitación en un día tan hermoso, pero eso había cambiado, ella había cambiado.

Ella ya no quería sólo su propio bien y eso era porque ya no estaba sola, era porque había conocido lo que había detrás de los muros del palacio, buenas personas que merecían ser salvadas y protegidas, por primera vez ella sintió que había lugar al cual ella podía llamar hogar.

Abril se había resistido a volver al palacio porque no tenía buenos recuerdos de ese lugar, pero debía dejar todos sus temores atrás, ya no era lo mismo, ella ya no estaba sola, tenía Alessandro y a alguien a quien podía llamar amigo. Ella siempre había escapado de su realidad al aislarse en aquella cabaña, pero en ese momento agradeció ese encuentro con Alessandro en el bosque, agradeció el haber abierto su corazón y así conocer lo que era el amor, la amistad y la felicidad.


CAPÍTULO 117: SUS PALABRAS, SON MIS PALABRAS


Gabriel se había quedado dormido en algún momento, cuando abrió los ojos vio a la princesa junto a la ventana, ella era verdaderamente hermosa, cuando había llegado al palacio ella era una niña, pero con el paso del tiempo se había convertido en una verdadera belleza, pero su belleza no radicaba solo en su apariencia, había algo en ella que atraía a las personas.

Abril dio media vuelta y le dijo.

_Sir Gabriel, quizás debamos continuar mañana, pronto será la hora de la cena.

Gabriel se puso en pie y respondió.

_Por supuesto, discúlpeme, creo que me quede dormido.

_No se preocupe, a mí también me suele pasar lo mismo las tardes de verano, será mejor que se vaya su familia debe de estar esperándolo para la cena también.

Gabriel rara vez salía temprano del palacio, por eso su esposa nunca lo esperaba para la cena, él respondió.

_No suelo llegar temprano a casa, mi esposa no me espera para cenar.

_Con más razón debería volver temprano, es triste tener que cenar sola cada día, aunque su esposa no lo diga, estoy segura que debe esperarlo cada día para cenar.

_No me puedo ir sin el permiso del rey.

_No se preocupe, yo me encargare de decírselo.

_Entonces con su permiso su majestad, nos vemos mañana. Gabriel salió de la biblioteca, en el pasillo se encontró al rey, él le preguntó.

_ ¿Dónde está mi esposa?

_Ella está en la biblioteca.

_Ya veo.

_Su majestad, ella me dijo que podía irme a mi casa.

_Entonces vete, sus palabras son las mías. Gabriel hizo una reverencia y le dijo.

_Gracias su majestad.

_Mañana vuelve temprano.

_Si su majestad.

Alessandro se fue a la biblioteca, Abril seguía leyendo un libro, él puso su mano sobre su hombro y le dijo.

_ ¿Por qué sigues estudiando?, Gabriel ya se ha ido.

_Lo sé, pero quería seguir estudiando un poco más, te dije que me esforzaría.

_No tienes que esforzarte tanto, solo has lo que puedas.

_Por cierto, le dije a sir Gabriel que podía irse, ¿Estas molesto?

_No, debiste de haberlo hecho por una razón, ¿Verdad?

_Solo quise que cenara con su esposa, él insistió en que estaba bien, que ella ya estaba acostumbrada, que ya no lo esperaba para cenar, pero cuando tú no vienes yo me siento sola, ella debe sentirse igual. Alessandro le dio un beso y le dijo.

_Lo siento.

_ ¿Por qué te estas disculpando?

_Por siempre estar ocupado y dejarte sola.

_Se que no siempre puedes estar conmigo, tus cargas con un reino en tus hombros, por eso quiero aprender rápido para ser tu ayuda y aligerar tu peso.

_Ya lo haces, con solo tenerte a mi lado cada noche me ayudas.

_ ¿Cómo?

_No sé si te lo he dicho antes, pero, después de la guerra yo no podía dormir, solo dormía unas cuantas horas y cuando lo hacía me despertaba más cansado que cuando me iba a dormir debido

A las pesadillas, pero desde que dormimos juntos eso se acabó, duermo profundamente y ya no tengo pesadillas, cada mañana al despertarme estoy descansado, desde hace mucho que eres mi ayuda, que aligeras mi carga.

_ ¿De verdad?

_Si Aby, el estar a tu lado hace que me sienta tranquilo y en paz. Abril sonrió ampliamente y le dijo.

_Gracias por decírmelo, me hace feliz saber que soy de ayuda para ti. Alessandro vio que fuera los últimos rayos del sol se estaban escondiendo y le preguntó.

_ ¿Has estado todo el día en aquí?

_Si, ¿Por qué preguntas?

_Quieres dar un paseo por el jardín antes de cenar. Los ojos de Abril se iluminaron y respondió.

_Si, eso me encantaría, Alessandro tomo su mano y la llevo hasta el jardín, mientras paseaban cogidos de la mano Abril le dijo.

_Falta poco para que el verano se termine.

_Así es.

_Lessan, ¿La guerra será durante el invierno?

_ ¿A qué viene esa pregunta?

_Solo me lo preguntaba, dijiste que la guerra iniciaría pronto así que me preguntaba si sería durante el frio invierno.

_Aun no lo se.

_Espero que no sea así, todos los caballeros y soldados sufrirían mucho si fuera en invierno.

_En realidad es lo contrario, creo que ellos prefieren que la guerra inicie en invierno en vez del verano, ellos llevan pesadas armaduras para protegerse durante la batalla, durante el verano las armaduras se calientan y el llevarlas puestas es incómodo, pero durante el invierno no hay ese problema, al contrario les agrada llevarla puesta ya que así están más calentitos, y además al ser invierno los agricultores no tienen que preocuparse por sus cosechas ya que no hay nada en los campos, así no tendría que preocuparme por que se queden atrapados en la batalla.

_Espero que los sellos que tienen sellada mi magia se rompan pronto también, así podre sanar tus heridas y la de los soldados.

_Eso no pasara.

_ ¿Por qué no?

_No dejare que vayas al campo de batalla, jamás lo permitiría, si te llegara pasar algo ahí yo no podría seguir viviendo.

_Yo estaré bien.

Abril miro su mano le dijo.

_Y aunque no te guste la idea te acompañare, porque al igual que tú, yo no podría seguir viviendo si te llegara a perder, porque para mí tu eres mi todo, así que no podrás hacerme a un lado, yo me quedare contigo sin importar lo que nos venga.

Alessandro le dio un suave beso en los labios y le dijo.

_Eres una necia.


CAPÍTULO 118: ALIADOS


Alessandro y Abril se dirigían al comedor para cenar cuando Cassian y Maya llegaron, Abril se alegró de verlos y les dijo.

_ ¿Qué bien que ya están de vuelta?

Alessandro vio a Cassian un poco extraño y le preguntó.

_ ¿Todo bien?

_En realidad no, podemos hablar un momento.

_Por supuesto, vamos a mi oficina. Alessandro miró a Abril y le dijo.

_Si tardamos mucho pueden ir cenando.

_Te esperare, no tengo tanta hambre. Alessandro le dio un beso en la frente y le dijo.

_Intentaré volver pronto.

Al llegar a la oficina Alessandro preguntó.

_ ¿Qué ha pasado?

_Cuando veníamos dos elfos interceptaron nuestro carruaje, uno de ellos era Ethan, el otro era un caballero del reino de los elfos.

_ ¿Qué querían?

_Querían saber sobre la oscuridad, les dije todo lo que sabía, aunque no mencione a Abril en ningún momento.

_ ¿Y qué dijeron?

_Quieren ayudarnos en la guerra.

_ ¿Qué?

_Ethan no parecía muy convencido de ayudarnos, pero el otro elfo, Dantriel, parecía preocupado, dijo que ayudaría a vencer al rey Venobich, que pelearía con nosotros en esta guerra.

_Se que necesitamos toda la ayuda posible, pero no quiero que a un elfo cerca de nosotros, no quiero que vayan a descubrir a Abril.

_Lessan, ellos están aquí.

_ ¿Qué?

_Ellos me siguieron, quieren hablar contigo.

_ ¿Los has traído al palacio?

_Si me hubiera negado, ellos hubieran sospechado que escondíamos algo.

_y por eso los trajiste hasta aquí!

_Ellos habrían venido aun si yo no los hubiera traído y hubiera sido peor, ahora que sabemos que están aquí, solo debemos asegurarnos de que ellos no vean a Abril, Lessan, esta guerra será diferente a todo lo que conocemos, los que han peleado con la oscuridad son los elfos, si ellos están de nuestro lado tendremos más oportunidades de ganar, recuerda que no sabemos qué es exactamente lo que está tramando el rey Venobich, tú has peleado con los desperdicios que ha dejado esparcidos por nuestro reino, no sabemos qué es lo que esconde tras los muros de su palacio, ni los horrores que desatara durante la guerra, así que te pido que seas razonable.

Alessandro apretó sus manos en un puño, el que hubiera dos elfos en su palacio lo llenaba de ansiedad y de temor, temía por la seguridad de Abril, pero Cassian tenía razón, una alianza con los elfos era algo muy ventajoso.

Cassian puso su mano sobre el brazo de su hermano y le dijo.

_Entiendo cómo te sientes Lessan, pero más allá de lo que queramos o no, este reino y su gente es nuestra responsabilidad, no podemos darle la espalda.

Alessandro se hizo el cabello hacia atrás despeinándolo y respondió.

_Tienes razón, pero no quiero que esos tipos vean a Abril, no quiero que ellos me la quiten.

_No lo harán Lessan, jamás permitiría que eso sucediera. Alessandro suspiro pesadamente, aunque odiaba la idea de tener a esos elfos en su palacio no podía simplemente echarlos, sobre todo porque ellos aún necesitaban más información de cómo pelear con la oscuridad.

_ ¿Dónde están?, lo mejor será que vaya y hable con ellos, quiero saber qué es exactamente lo que quieren hacer.

_Lo lleve a la pequeña cabaña que hay en la parte más alejada del palacio, así no habrá posibilidades de que encuentren con Abril.

_Has hecho bien, vamos allá.

Ambos se dirigieron a la cabaña, al llegar Cassian tocó la puerta y poco después entraron, Alessandro se quedó mirándolos fijamente durante un momento, lo que más llamo su atención era que ellos dos tenían los ojos dorados al igual que Abril.

_Hola, mi nombre es Alessandro Veriatte, mi hermano me dijo que querían hablar conmigo.

_Tu eres el que se ha enfrentado a la oscuridad.

_Así es.

_Tu hermano me dijo que los, venciste con fuego, ¿Es verdad?

_Si ellos parecían temerle al fuego, retrocedieron ante él.

_Eso es bueno.

_Esas criaturas nacidas de la oscuridad han atacado a mi gente,

¿cómo podría ser eso bueno?

_Cuando la oscuridad despierta por completo, las criaturas nacidas de la oscuridad se vuelven aún más feroces y sangrientas, son fuertes y difíciles de vencer, una sola criatura puede acabar con un pueblo entero sin ningún problema, si los que has matado retrocedían con el fuego significa que aún son débiles, su fuente de poder aún no ha despertado.

Alessandro se quedó en silencio, Dantriel se río y dijo.

_Créeme, has sido afortunado ya que has salido victorioso después de haberte enfrentado a la oscuridad.

_Cómo se les mata después de que la oscuridad despierte.

_Cuando eso suceda la magia y las armas normales serán inútiles, la única forma de matarlos es usar armas bendecidas por la magia de la luz o usando la magia de la luz, magia que solo la realeza élfica puede usar.

_Espera, ¿Armas bendecidas por la magia de la luz?

_Si, son igual de efectivas para acabar con la oscuridad, pero solo los mejores soldados pueden acercarse tanto a una criatura nacida de la oscuridad y salir con vida.

_Has hablado del despertar de la oscuridad, a que te refieres exactamente con eso.

_La fuente de poder de la oscuridad es un demonio, su despertar significa que vendrá a este mundo y acabará con todo lo conocido, por eso te ayudaré a vencer a ese hombre, a ese rey que está intentando traer la oscuridad hasta aquí.

_ ¿Y cómo piensas ser de ayuda?

_De muchas maneras, si quieres ganar esta guerra, me necesitaras.

_Tu amigo no hace mucho dijo que esta no era vuestra guerra.

_Se equivocó, esta guerra nos compete a todos.

_ ¿Se quedarán aquí?

_Solo unos días, espero que mientras este aquí me facilites información sobre ese rey que está intentando despertar la oscuridad.

_Así lo haré, también me asegurare de que no les haga falta nada, pero espero que mientras estén en mi palacio no vaguen a su antojo.

No lo haremos, no hay razón para hacer eso

_Gracias por vuestra comprensión.


CAPÍTULO 119: AUNQUE NO SEA A MI LADO


Alessandro y Cassian estaban volviendo al palacio principal, mientras lo hacían Cassian dijo.

_Hablare con el mayordomo para que les lleve comida y también pondré a algunos guardias para que los vigilen.

_Diles a los guardias que vigilen desde las sombras, no quiero que ellos los vean, solo deben intervenir si salen de la cabaña y se dirigen al palacio principal.

_Así lo hare.

_Tenías razón.

_ ¿Qué?

_Nosotros no sabemos nada sobre la oscuridad, ellos nos han dicho más de lo que nosotros podríamos haber averiguado por nuestra cuenta y sobre todo dijeron algo que nos ayudara para enfrentarnos a la oscuridad.

_Hablas de la bendición de la luz.

_Así es, Abril no tiene que estar en el campo de batalla para ayudarnos a vencer la oscuridad, solo debe bendecir nuestras armas.

_Pero para hacer eso se necesita mucho poder mágico, su magia aún sigue sellada.

_Dijo que su madre le esta enseñado a controlar su magia, pero creo que lo mejor será hacer venir a Sirius y que le enseñe a controlar su magia, no podemos esperar tanto tiempo, no sabemos en qué momento el rey Venobich empezará a moverse.

_Tienes razón, eso será lo mejor.

Al llegar a palacio principal se separaron, Cassian fue a buscar a mayordomo y a los guardias que estarían vigilando a los elfos y Alessandro volvió a comedor donde lo estaba esperando Abril para cenar.

Ellas estaban hablando y riendo, esa era la primera vez que Alessandro veía a Abril charlando tan feliz con alguien de su edad, en ese momento él se dio cuenta que en realidad ella no tenía ninguna amiga, que cuando él o Cassian no estaban ella siempre estaba sola. Abril al verlo sonrió y preguntó.

_Cassian no ha venido.

_Tiene algo que hacer, dijo que cenaría en su habitación. Maya sintió que estaba sobrando ahí, así que se levantó.

_Quizás lo mejor será que yo también me vaya.

_No tienes por qué hacerlo. Respondió Alessandro.

_Puedes cenar con nosotros, la cena será servida en un momento. Maya tenía mucha hambre así que no insistió en irse, ella volvió a sentarse, Alessandro hizo una seña con la mano para que les sirvieran la cena, a los pocos minutos las sirvientas la sirvieron. Abril seguido hablando con Maya durante el resto de la cena, al terminar de cenar Maya se retiró, Alessandro ordeno que prepararan su baño y le dijo a Abril.

_Puedes adelantarte, enseguida iré.

_Aun tienes trabajo que hacer.

_Sera algo rápido, no tardare.

_Está bien.

Abril se fue con unas cuantas sirvientas y Alessandro se fue a su oficina, saco una esfera que usaban para comunicarse con Sirius cuando era una emergencia ya que funcionaba con magia y consumía demasiado, siempre que la usaba su magia se reducía considerablemente, todo dependía de cuan larga fuera la conversación, así que fue corto y conciso.

_Sirius, ven aquí inmediatamente, Sirus sabía que debía ser urgente ya que Alessandro había usado la esfera mágica para comunicarse con él, así que uso un pergamino de tele transportación y llego en unos segundos.

_ ¿Qué pasa?

_Tengo a dos elfos en mi palacio.

_ ¿Dos elfos?

_Siguieron a Cassian, ellos quieren ayudar en la guerra.

_Eso es bueno, ¿No?

_Si y no, me preocupa que estén tan cerca de Abril, pero los necesitamos, ellos saben cómo pelear con la oscuridad.

_ ¿Y para que me ha mandado a llamar?

_Necesito que le enseñes a Abril a controlar su magia, la necesitamos para que bendiga las armas que usaremos durante la guerra.

_Para bendecir un arma se necesita una gran cantidad de magia y el saber controlarla.

_Y por eso te he mandado a llamar, Abril dijo que su magia tiene varios sellos que bloquean su magia, necesito que esos sellos se rompan.

_Hare todo lo que este en mis manos.

_Esta noche quédate en el palacio, quiero que empieces mañana mismo.

_Como ordene su majestad.

Alessandro volvió a su habitación, Abril ya había terminado de tomar su baño, ella estaba envuelta en una bata mientras una de las sirvientas peinaba su cabello.

_Ya has vuelto.

Alessandro se acercó a Abril, aquella sirvienta ya había terminado de peinar el cabello de Abril y los dejo solos. Alessandro acaricio su cabello, sus dedos fueron bajando por su cuello, deslizándose en el interior de su bata le preguntó.

_ ¿Estas cansada?

Abril se preguntó por qué Alessandro estaba haciendo esa pregunta, con las mejillas coloradas respondió.

_No, para nada.

Los labios de Alessandro se posaron en su cuello mientras sus manos bajaron sin rumbo fijo en el interior de su bata a Abril se le escapó un gemido, él le dio vuelta a la silla, tomo a Abril en brazos y la llevo hasta la cama, la deposito suavemente y arrebato sus labios, ambos se unieron en un profundo y suave beso. Su beso se fue intensificando y se volvió más violento, más ansioso, al separar sus bocas, con la respiración entrecortada le preguntó.

_ ¿Qué pasa Lessan?

_Sabes que te amo, ¿verdad?

Abril paso una mano por sus cortos cabellos castaños y respondió.

_Si lo sé, ¿me dirás porque estas tan ansioso?

_Es solo que a veces tengo mucho miedo de perderte.

_No vas a perderme.

Alessandro la abrazo sin decir una palabra, ella le devolvió el abrazo, al estar tan cerca ella podía sentir su respiración, su cálido aliento acariciando su cuello.

_Te amo Lessan, te amo, yo siempre estaré a tu lado, no vas a perderme.

Cassian se tumbó en la cama con los brazos detrás de la cabeza, mirando al techo. Estaba muy preocupado, su mente se agitaba como una maraña nerviosa pensando en lo acontecería y no podía dormir, aunque le había dicho a Alessandro que debían pensar en el reino y su gente por sobre todas las cosas, no era eso lo que él sentía, él quería proteger a Abril, solo quería que ella fuera feliz, aunque no fuera al lado suyo.

Después de dar varias vueltas en la cama Cassian salió al balcón, esa noche la luna brillaba con gran esplendor, él sé que se quedó mirándolo un momento hasta que escucho el sonido de una puerta al abrirse, él giro su cabeza y vio a Maya, ella estaba usando un ligero camisón blanco que se ondeaba con la cálida brisa nocturna.

¿Qué haces aquí?

_Hace mucho calor y me sentía sofocada, quise salir a tomar un poco de aire para refrescarme, ¿Y tú?

_Creo que lo mismo.

ESPOSA OLVIDADAWhere stories live. Discover now