8 de agosto de 2030
Egresé del baño luego de que la puerta se trancara por veinte minutos. —Vamos, Suni—llamé y mi canino me siguió a la carrera con la que voy para regresar al autobús, no obstante, no vi nada.
Fruncí el ceño y busqué con la mirada el gigante bus que nos llevará a Gloucester, más no lo vi y en su lugar, ante mis ojos un sexy hombre destacó. Malik Sallow tiene cara de pocos amigos como siempre, mientras se saborea un helado.
—¿Dónde está el maldito transporte? —cuestionó a voces.
—Creo que… nos acaba de dejar en esta estación—informé.
—Me lleva la que me trajo, de todas las personas, ¿por qué me tengo que quedar contigo? —renegó.
—Lo mismo digo—refunfuñé y nos cruzamos de brazos al mismo tiempo, para luego soltar maldiciones hacia el otro.
¿Fue una buena decisión haber hecho trampa en el sorteo o una mala decisión por la cara de odio de mi tiburoncin?
6 de agosto de 2030
—Accidente automovilístico, la pasajera iba en la parte trasera del coche, la ventana se rompió y algunos cristales quedaron incrustados en su brazo—especificó la enfermera más colorida del hospital, su cabello es de un rosa pastel que me encanta.
—Gracias Roxy, mientras me encargo de los residuos visibles, puedes buscar la máquina de rayos x, necesito hacer una radiografía para asegurarme que no haya cristales en el interior de su cuerpo.
—Enseguida regreso Dra. Slora.
—¿Cómo te llamas? —le pregunté a la jovencita que debe rondar alrededor de los 15 años.
—Aurora—respondió.
—Como la princesa—sonreí al sacar con cuidado el cristal más grande, al menos el dolor le llegó después—, es un lindo nombre. Bien, Aurora, me dirías si tienes alguna otra lesión, ¿sientes dolor en alguna otra parte del cuerpo?, ¿alguna molestia?
La adolescente se quedó pensativa y se removió, analizando su cuerpo. —No, en realidad no, solo me duele el brazo por esas cosas—su vello se erizó en cuanto vio la sangre en su piel.
Retiré los trozos visibles y desinfecté sus brazos, al terminar, levanté la mirada al no hallar aún a Roxy. —¿Me disculpas un momento? —asintió—, ya regreso, por favor, no te muevas de aquí que necesito tomarte una radiografía.
Avancé por toda la sala de urgencias y nada que la veo, posé mis ojos en Yarah, quien con rapidez está intubando a uno de los pacientes del accidente. Seguí mi camino y egresé de emergencias, donde me topé en el pasillo a Roxy, peleando firmemente con otro enfermero… ese me parece conocido, es el que siempre trabaja con Malik.
—Yo lo conseguí primero.
—El Dr. Sallow lo necesita.
—La Dra. Slora también lo requiere.
—Esa ni siquiera cuenta como doctora—abrí la boca, totalmente dolida y carraspeé.
—Solo me desmayé una vez…—ambos se percataron de mi presencia—bueno, han sido tres veces, pero, eso es porque mi cerebro se paniquea. En todo caso, eso no le da el derecho de desmeritar el trabajo que hago, esos son pequeños errores, cualquiera puede cometerlos… al menos el resto del tiempo hago de forma exitosa mi labor.
—¿Está segura de eso Dra. Slora? —me removí al sentir el aire caliente chocar contra mi piel, me giré hacia él y me crucé de brazos—, trae eso—demandó a su enfermero.
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Los pasillos tienen oídos/Operación: no te enamores de Cupido
RomanceEn el siglo XXI hay un fenómeno que está arrasando en todo el mundo, todos aquellas desafortunadas almas solitarias que desean el amor, acuden a Cupido, sin embargo, solo son atendidas aquellas historias, cuyo sentimiento pueda desbordarse por medio...