Tobio era aún un niño cuando experimentó su primer amor. Shoyo era tan hermoso, tan maravilloso.
Pero había un problema: ¡Shoyo era cinco años mayor y el mejor amigo de su hermana! ¡¿Como iba un niño de nueve años salir con un chico de 14, que adem...
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Aaaah disculpen q no hayan habido tantas actualizaciones jajaj, pero aplique el shoyo truco y yo tmbn adopte un perrito beibi 🥺 disculpen amores, pero voy a tratar de actualizar más seguido, probablemente ahora actualice los sabados, pq otra vez regreso a la uni de lunes a viernes.
Los amo muche amores muak.
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El azabache trataba de animar a Shoyo. El Omega se sentía realmente mal después de la visita inesperada de Miwa.
Pronto tendría una nueva cita médica. Y esta vez, Tobio iría con él. Su médico quería conocer al Alfa que estaba acelerando su sanación en el ámbito sexual.
-¿Te dan miedo los hospitales?- Preguntó el azabache al ver como sus dedos jugueteaban entre sí. -No los hospitales... L-las agujas...- Le dijo nervioso. La cita era en dos días más y el pelirrojo tenía un partido hoy. -Todo va a estar bien, Shoyo.- Trató de consolarlo, el mayor se sonrojó ante la frecuencia con la que ahora lo llamaba por su primer nombre. -S-sí, T-Tobio...- Se mordió el dedo con ansiedad. Se sentía avergonzado, todas sus parejas lo llamaban Hinata e incluso Tobio lo hacía, hasta la llegada de Miwa, él era Hinata.
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La mayor parte del partido, Hinata no hizo nada. Estaba demasiado nervioso, como si fuera a vomitar. Se sentía ansioso con la probabilidad que Miwa lo estuviera viendo, criticando sus decisiones.
Tobio trataba de no mostrarse ansioso ante la circunstancia, pero ver a Shoyo constantemente tembloroso y algo pálido realmente le preocupaba, no era si mismo, no estaba de extrovertido y enérgico. Al término del mismo (con un triunfo más para el MSBY) Tobio se llevó a Hinata al baño.
-¿Te sientes mal?- Le dijo una vez estuvieron solos en el espacio confinado. -N-no... Solo estoy n-nervioso...- El azabache pasó su mano por el cabello de Hinata, el Omega tembló ante su toque. -¿Te preocupa que Miwa esté aquí?- Atinó el Alfa, el más bajo solo asintió suavemente. -Es- es que... ¿Cómo supo dónde vivimos? ¿C-cuántos más ya deben saberlo?- El azabache no había sabido porque al Omega le causaba tanto pánico, pero asimiló que le daba miedo que se puedan meter a su casa, el único espacio dónde puede estar y sentirse seguro. -No te preocupes... Yo me quedaré contigo y no pasará nada más.- Besó su frente, mejillas, nariz y labios repetidas veces, siendo recibido por una suave risita de su parte.
Una vez el Omega estaba menos ansioso, se enjuagó la cara y ambos salieron rápida y cuidadosamente del baño, con sus manos apresadas la una con la otra.
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Estaban sentados en la clínica, Tobio tenía su mano enredada con la mano de Shoyo. Le habían sacado sangre, le habían pedido una muestra de orina, le habían hecho ultrasonidos... Tantos procedimientos para que el Omega solo recibiera un sobre con sus resultados médicos. -¿Hina-?- Empezó una enfermera. -¡S-sí!- Exclamó el pelirrojo, levantándose y levantando a Tobio de un jalón. -Acompáñeme, por favor. Su médico lo espera.- La pareja reforzó su agarre con más fuerza antes de entrar a la oficina de su médico.
-Todo va a estar bien...- Susurró Tobio. -Sí... T-todo va a estar bien...- Repitió Shoyo.
Se adentraron.
-Señor Hinata, su... Compañero, tomen asiento, por favor.- Dijo el médico, ambos nerviosos se sentaron frente al doctor. -Pues... Es un gusto conocerlo, señor...- -Kageyama, T-Tobio Kageyama.- Respondió el azabache. -Claro, señor Kageyama, ¿Cuántos años tiene?- Dijo antes de empezar a llenar un formulario frente a él. -Acabo de cumplir d-diecinueve.- El médico levantó la mirada y la dirigió a Shoyo, enarcando una ceja.
-Ya veo... ¿Es usted un Puro, como el señor Wakatoshi?- Preguntó, ya sabía la respuesta, pero era el protocolo. -N-no, soy un Dominante...- Dijo mientras el doctor terminaba de llenar su formulario y lo engrapaba a la parte de atrás de los resultados de Shoyo.
-Ah... Bien, me alegra decirles que la fertilidad del señor Hinata está incrementando de manera saludable, realmente rápido, si soy honesto.- Les extendió el documebto y ambos se apresuraron a leer los resultados, pasaban su mirada por cada palabra, hasta que lo encontraron.
Alfa dominate: 49.887 %
-Señor Hinata, su fertilidad está incrementando y ha llegado a tener la capacidad de un Omega recesivo. Claro, es diferente a como era usted naturalmente, pero es un incremento enorme, ahora le puedo decir, es mucho más probable que pueda llevar un embarazo a término. Felicidades.- Le sonrió al pelirrojo, quien ya se encontraba lagrimeando suavemente. -G-gracias...- Se limpió las lágrimas torpemente, mientras Tobio pasaba sus manos sobre sus mejillas.
-Ahora. El tema. El motivo por el cual le pedí que viniera con su pareja actual.- La pareja detuvo lo que estaban haciendo para prestarle toda su atención al doctor.
-El señor Hinata necesita las feromonas regularmente, la cantidad que usted emite diariamente le ayudan, pero es mínima la cantidad que recibe.- El Omega se empezó a sonrojar, ya sabía a que punto llegaría su doctor.
-¿Y-y entonces? ¿Q-qué más puedo hacer?- El hombre suspiró pesadamente. -Necesita pasar sus celos con usted.-
La cara de Kageyama explotó en rojo.
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