Willy wonka el excéntrico e inteligente chocolatero lleva una vida llena de lujos y amor familiar, pero no todo es felicidad, se siente solo, su corazón esta vació, realmente en sus adentros desea tener una compañera, tener un amor real y puro, esos...
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-¡¿Tú que estás haciendo aquí!? -le preguntó de manera agresiva la pelirroja al joven chocolatero.
-Sorpresa -le respondió Will queriendo reír.
-¡Stefani!.
La llamo Margaret quien llegó hacia donde estaban los jóvenes reunidos, los chicos viendo con algo de envidia y prejuicio al primogénito de los Wonka, mientras que las chicas lo veían embelesadas y empezaron a cuchichear entre ellas, la mujer con sobrepeso regaño a la huérfana de ojos color marrón, pero claro, moderando su voz y actuando lo más amable que podía, pues estaba siendo observada por Will.
