Reencontrando al Playboy. [MNEUP#2]

Siento amor.

6. Siento amor.

N/A1:
Perdió por actualizar hasta hoy, ayer fue el día del padre así que no puede hacerlo. Lean con mucho amor que me desvivo haciendo este capítulo. Créanme que me odio.

Gracias por estar aquí, ya estoy de vacaciones así que actualizare a tiempo. Les quiero recordar que esta historia tendrá de 15 a 20 capítulos nomas.

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Me levanto de la cama, busco un atuendo en el armario mientras escucho las profundas respiraciones de Daniel. Me doy una rápida ducha y una vez lista busco algo que desayunar en la cocina.

—Buenos días— Daniel me abraza por detrás y me da un beso en la cabeza— ¿como amaneció mi princesa?.

Unas mariposas agresivas se manifiestan en mi estomago, sonrío y me doy la vuelta para abrazar a mi futuro esposo.

Estuve razonando en la noche y me he dado cuenta de que en verdad lo quiero, pero mi cabeza sigue algo aferrada a mi pasado. O mas bien a la adrenalina que mi vida necesita en estos momentos, ya todo es rutina y eso no me gusta, tal vez si necesite de Kian pero no en todo sentido.

—Amanecí muy bien, ¿y tu?.

Me sirvo un poco de cereal y busco la mermelada en el refrigerador al igual que a la leche. Ya que todo está servido me siento en el comedor y Daniel se sienta a un lado mío.

—De maravilla de tan solo verte a mi lado, sabiendo que eres mía.

Me sonrojo, hace bastante no lo hacia. Nos quedamos callados unos minutos en lo que yo desayuno, tomo mi celular para ver la hora y veo que tengo tres mensajes de texto.

¿Quién utiliza los mensajes de texto en estos tiempos?. Decido ignorarlos y mejor lavo mi plato. Me dirijo al baño para cepillarme los dientes y me hecho un poco de perfume.

—¿Me llevas?— Daniel asiente y busco un poco de mermelada en el refrigerador al igual que la leche. Ya que todo esta servido me siento en el comedor y Daniel se sienta a un lado mio.

Hoy no me quiero llevar yo el auto, en verdad me creo algo capaz de ir a buscar a Kian para aclarar las cosas. Y eso si que estaría mal.

Quiero hablar con él y decirle que es mejor alejarse de mi, me duele si ya que es una larga amistad pero en realidad los dos la estamos cagando. Necesita abrir los ojos y ver a la chica que tiene frente a él, Lola es un amor de persona y se merece ser amada no despreciada.

El camino es bastante silencioso, pero ese silencio agradable. Son casi las ocho de la mañana por lo tanto hay bastante tráfico, pero al cabo de unos minutos llegamos al gran edificio donde trabajo.

—Espera— Daniel me tira de la mano cuando abro la puerta—que tengas suerte el día de hoy, mi niña vendré a recogerte en cuanto salgas.

Me da un besito en la frente y yo sonrío ante su acto de ternura.

—Tu también cuídate, te aviso en cuanto salga— le doy un pico y salgo del auto.

Me doy una gran cachetada mental, se merecía de perdida un te quiero antes de que yo saliera. Odio no poder decírselo, siento que si le digo tal frase sonaría un tanto hipócrita.

Digo, el día de ayer estaba lo bastante confundida como para llegar a creer que todavía quiero algo con Kian. Y como que por arte de magia el día de hoy ya vuelva a amar a Daniel seria un tanto hipócrita. Saludo a la recepcionista en cuanto entro y me acerco a firmar mi entrada, subo por el ascensor el cual está vacío y al llegar a mi piso salgo.