si ser pendejo fuera ilegal

18 5 6
                                    

Maikol estaba feliz, finalmente le estaban creciendo los pelos de la cabeza, esperaba con ansias volver a tener esa hermosa melena que poseía antes.

-¿Que estas haciendo? -Su hermanita menor se asomo curiosa mirando como maikol posaba al espejo.

-Mira eli, me están creciendo los pelos -Dejo de hacer lo que estaba haciendo para enseñarle a su hermana que miraba detenidamente lo que le enseñaba su hermano.

-Pero si casi no se ve -Parpadeo confundida, maikol le hizo una mueca de enojo y la niña corrió pensando que su hermano la molestaría.

Se arreglo el uniforme y bajo listo para otro día más en el infierno. Últimamente los días en la escuela se le hacían una tortura por tener que ver a su vecino interactuar con su compaera de curso que ya estaba pegada a el como chicle.

Dejo de pensar en eso y bajo para comer y luego irse no sin antes despedirse de su madre, hermana y milagrosamente del hombre que decía ser su padre que desinteresado leía el periódico ignorando la presencia del menor.

Maikol camino cerca de la casa de su vecino, deteniéndose y pensando si quizás estaba bien ir con el, más no necesito pensarlo porque justo evangelio salía de su casa, a maikol le entró vergüenza y fue peor cuando se quedaron mirando sin decir nada.

-Maikol -Saludo su vecino sonriendole, el moría por dentro pero saludo también- ¿Vamos juntos a la escuela?

Maikol quedo paralizado por unos minutos, ir o no ir. Pero ya estaba el aquí así que decidió ir junto a él.

Ninguno decía nada por no saber que hablar con él otro.

Se limitaban a caminar y mirar el camino.

-Evan yo.. -Dijo maikol deteniéndose para verlo. Su vecino se detuvo también.

-Dime -Pregunto algo confundido por la actitud contraria.

-Perdón por dejarte solo ayer -Dojo mirando al piso, evangelio no se esperaba esto pero lo siguió mirando.

-Esta bien maikol -Dijo intentando animarlo, apenas le tocó la mano. Maikol lo miro hecho tomate por la pena que le daba disculparse- Tranquilo -Evangelio lo intento calmar de alguna manera.

-Pero es que...

-No pasa nada maikol, entiendo que estabas ocupado -Dijo sonriendo a su vecino pelón.

Ambos siguieron caminando luego de la escenita que hicieron sin darse cuenta que medio mundo los estaba viendo. Ellos estaban metidos en lo suyo.

De pelos Where stories live. Discover now