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-¿Estás seguro que lo quieres probar Lío?- Pregunto Memo a su novio quien estaba sentado en la orilla de la cama.
-Boludo, llevo meses rogandote porque me lo des, dale- Respondió Lionel viendo hacía arriba a su novio.
-Mmm, es que no se cómo te pongas- Dijo memo.
-Daaale, vos dijiste que si conseguías que tus viejos se fueran lo podía probar- Dijo Lionel tomando la orilla de la playera de Memo.
Lionel había conocido a Memo en la universidad cuando coincidieron en una conferencia, inmediatamente quedó flechado por el bonito rizado que se veía que no rompía ni un plato.
Después de esto se hicieron buenos amigos y un día se besaron ebrios en una fiesta por accidente, lo que terminó en ellos encerrados en un baño del antro y al día siguiente una incómoda plática sobre sus sentimientos por el otro.
Pronto se hicieron novios y era ahí que empezaron a conocerse mejor, Memo le confesó a Lio que disfrutaba de fumar Cannabis de vez en cuando, no muy seguido, de hecho a veces solo lo hacía cuando estaba muy estresado para relajarse.
Lionel el un principito se espantó, pues, a el sus padres siempre le habían repetido lo mal que eso estaba, que la gente se ponía agresiva, pero se dijo a si mismo que no le hacía daño si Memo lo consumía cuando el no estaba.
Algunas veces Memo le mandaba mensajes después de consumir y el se reía pues su novio se ponía muy gracioso y se reía más de lo normal, además de que también se ponía más cariñoso.
Pasaron casi dos años así, su relación crecía llena de amor, eran unos jóvenes enamorados normales, salían a citas, pasaban tiempos juntos en casa de uno o otro, conocían a su familia y amigos, iban a fiestas, cosas normales.
Pero en todo este tiempo siempre existió la duda en Lionel de como se sentiría estar bajo los efectos de la Marihuana, el veia que memo solo se reía mucho.
A pesar de sus dudas y que de hecho tenía el consumir al alcance de un favor ya que muchos compañeros suyos también lo hacían nunca se atrevió.
Lionel era un miedoso de primera, había escuchado muchas historias de gente que le daba la famosa "pálida" con la Marihuana, que no era más que mal viajarse y tener alucinaciones, es por esto que se mantenía al margen.
Memo trataba de no fumar cuando estaba con su novio pues podría incomodarlo, pero de repente Lionel estaba muy curioso con eso, así que se armó de valor y le pidió a Guillermo que algún día fumaran juntos para saber cómo se sentia.
