Cariño

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Elsa

—Cariño... Por favor.

—Deja de quejarte Honeymaren.

—Ve más lento... ¡Carajo!

Suspiré pesadamente y acomodé el mechón de cabello que estaba en mi cara, Honeymaren no aguanta nada, es una llorona.

—Cielo, se que te duele pero déjame terminar.

—No lo haces con suavidad... Lo haces muy duro.

—Cielo, te estoy peinando y tienes el cabello muy enredado.

Dije mientras la miraba a través del espejo que estaba al frente de nosotras. Pues verán, estamos en el palacio y a mi hermana se le ocurrió la gran idea de hacer una guerra de almohadas en la noche de juegos. Por lo que verán, Honeymaren terminó hasta con plumas en la cabeza.

—No es mi culpa que tu hermana casi me parta el cuello con una almohada ¡Tiene mucha fuerza!

—Y me sorprende que no se lo devolvieras.

—Es tu hermana... Además, no quiero que me corten la cabeza.

Reí ante tal ocurrencia y volví a pasar el cepillo por su cabeza, Honeymaren hacía muecas de dolor sin parar, es muy dramática.

—No volveré a jugar con tu hermana.

—No seas llorona.

—¿Mi novia me está diciendo débil?

—No, solo dije que no seas llorona.

—¡Es lo mismo!

—Claro que no, cielo.

Honeymaren se cruzó de brazos y me miró ofendida, sonreí al ver el puchero que hacía inconscientemente. Me puse al frente de ella y me agaché.

—¿Me perdonas?

—No.

Dijo mientras intentaba no mirarme.

—Eres muy grosera conmigo y la verdad me ofende que me digas llorona porque no lo soy, solo quiero hacer drama porque la hermana de mi mujer casi me ma...

Honeymaren seguía hablando sin parar, así que se me ocurrió una idea para callarla. Me levanté solo un poco y la besé como pude, al instante se calló y me devolvió el beso.

—¿Mejor?

Pregunté mientras volvía a poner distancia entre ambas.

—No, pero lo estaré en un rato.

Sonrió y volvió atrapar mis labios contra los suyos, los besos subieron de nivel rápidamente así que me senté en sus piernas sin preguntar, Honey acariciaba mi cintura mientras metía su lengua en mi boca.

Y sin previó aviso, mordió mi labio al mismo tiempo en que sus manos bajaron a mi trasero, claramente gemí y ella sonrió como respuesta.

❄️🍂

Al principio lo malpensaron, yo lo sé. 🤨

Otoño invernal (one-shots) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora