El Cuerno (Primera Parte)

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(Solo quiero aclarar que Elsa y Honeymaren son personas completamente NORMALES y viven en Londres).

Elsa

Los fines de semana definitivamente son mis favoritos y les diré porqué. Mi esposa y yo no trabajamos los fines de semana así que podemos hacer mil cosas esos días sin que nadie esté interrumpiendo.

Por otro lado, el día apenas empieza, son las siete de la mañana y por obvias razones Honey sigue dormida.

Me encontraba mirando a mi esposa mientras ella dormía. Hasta que solté una pequeña risa al ver cómo babeaba la almohada, es muy tierna. Me acerqué a ella y le di un pequeño beso en la mejilla, no quería despertarla tan temprano.

Con mucho cuidado pude levantarme de la cama sin hacer ningún tipo de ruido, aunque Honey tiene el sueño pesado me sentiría muy mal si llego a despertarla accidentalmente.

Salí de la habitación y me dirigí directamente a la cocina a prepararme un café, en lo personal no tengo hambre y se qué Honey odia comer estando recién levantada, luego veremos el tema del desayunó.

Honeymaren

Sentí como empujaba una almohada hasta dejarla caer al suelo pero no le di importancia, definitivamente no soy una persona que duerme en una sola posición.

Aún tengo mucho sueño pero eso no me impide querer abrazar a mi esposa, me pareció raro no sentir sus brazos sobre mí como en cada mañana.

Sin pensarlo, estiré mi mano hasta el lugar de mi esposa para que cayera en ella y así poder pegarla a mi. Pero fue mi sorpresa al sentir como mi mano golpeó el colchón.

Con algo de pereza seguí moviendo mi mano para confirmar qué estaba sola.

Adormilada, abrí los ojos y era más que claro qué mi esposa ya estaba despierta. Busqué mi celular el cual estaba a medio metro de mi, lo tomé y miré la hora.

¿Las siete de la mañana? Carajo.

Dejé mi celular donde estaba y talle mis ojos, bostece un poco y me quedé mirando la almohada que dejé caer anteriormente.

Cómo lo notan, no soy de esas personas que tienen mucha energía al levantarse, yo solo quiero seguir durmiendo.

Después de contemplar la almohada en el suelo por unos minutos, decidí levantarme y buscar a mi esposa.

Para ser sincera, no recogí la estúpida almohada.

Fui directamente hacia la cocina, debe estar preparado café como todas las mañanas. Y no me equivoqué.

Elsa estaba de espaldas mientras terminaba de preparar su café, me acerqué con cuidado y la abracé por la espalda. Ella al sentir el tacto sin previó aviso solo dio un pequeño saltó, supongo qué la asusté.

—Buenos días, amor.

Dijo mientras dejaba lo que estaba haciendo para darse la vuelta y darme un beso.

—¿Por qué estás despierta tan temprano?

Preguntó.

—No te sentí a mi lado y me desperté.

Respondí con pereza mientras me pegaba a ella en un abrazó.

—Oh, perdón mi vida.

Sin avisarme tomó mi rostro y empezó a besarlo por todos lados, desde el mentón hasta la frente.

—Basta.

Dije riendo, ella sonrió y acomodó mi cabello, el cual se encontraba un poco desordenado.

—¿Quieres café?

—Mm no, no se me antoja hoy.

—¿Agua?

—Un poquito.

Elsa me dio el último beso y me mandó a sentarme al comedor mientras ella terminaba su café y servía mi agua, a decir verdad, no me quejé, aún estoy despertando.

—Aquí tienes amor.

Dijo mientras me daba el vaso con agua, se sentó a mi lado y sopló su café.

—¿Qué quieres hacer hoy?

Preguntó.

—¿Qué tienes en mente?

—No sé, ir de compras, al cine, comer afuera o ir al parqué, lo que tú decidas por mi está bien.

—¿Y la opción de quedarme todo el día entre las piernas de mi esposa mientras vemos películas?

Elsa soltó una carcajada al escuchar mi petición ¿qué da risa? Es lo qué yo quiero.

—Amor, el anterior fin de semana hicimos eso.

—Ajá ¿y?

—Y quiero salir, no quedarme en casa mi amor.

Elsa tomó mi mano y dio un pequeño beso en ella, sólo por ese gesto no volteé los ojos.

—Entonces ¿A dónde vamos?

—¿Al centró comercial? Un día de compras.

—Copito, a decir verdad no sé cómo no vivimos bajó de un puente, compras muchas cosas.

—Y solo por tratarme de compradora loca, no te ducharas conmigo.

Dijo mientras se levantaba y tomaba de su café.

—¡Oye, tramposa!

A decir verdad, se esfumó de mi vista casi de inmediato.

❄️🍂

¿Segunda parte para cuando? 🤭

Otoño invernal (one-shots) Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon