𝐁𝐀𝐂𝐊 𝐓𝐎 𝐓𝐇𝐄 𝐑𝐈𝐍𝐆 | 𝗗𝗼𝗺𝗶𝗻𝗶𝗰 𝗧𝗼𝗿𝗲𝘁𝘁𝗼

𝟎𝟏

Isabella terminaba de arreglar todo las cosas de su nuevo apartamento. Recién llegaba al departamento qué pudo comprarse con todo su esfuerzo. Aunque Brian no estaba tan de acuerdo de eso, tal vez era la costumbre de vivir con su pequeña hija.

—¿Está todo listo?— preguntó Brian.

—Si, todo está terminando— el rubio sonrió, para después abrazar a su hija—. También te quiero, papá.

—Aun no creó lo grande qué estás— Brian se separó de ella—. Estoy muy orgulloso de ti, pequeña.

—Gracias, papá— el celular de Brian sonó anunciando una llamada—. Atiende, debe ser el trabajo.

—Si, dame un momento— Brian salió del apartamento para atender la llamada.

Unos minutos después, el rubio entro al departamento.

—¿Está todo bien?— preguntó Isabella al ver la cara de preocupación de Brian.

—Isa, debo decirte algo.

—¿Qué pasa? Me estás asustando.

— Hija, a Letty la asesinaron— Isabella negó con la cabeza, mientras sentía sus lágrimas salir, Brian la abrazo, y Isabella se derrumbo en su pecho.

—No-o, puede ser...

A pesar de qué ella se había prometido alejarse de todo lo qué tenía qué ver con su grupo. Las únicas personas que al parecer no querían dejarla sola, eran Letty, y Mia. Las dos chicas siempre, cuando podían la llamaban para ser como estaba, la cuál Isabella estaba bastante contenta, y agradecida de que las dos lo hicieran.

—Letty, no puede estar muerta— sollozó Isa.

Isabella llegó al funeral de Letty. Tenía algo de nervios por qué iba ser la primera vez de ella de volver a ver la hermana de Toretto. La O'Conner se acercó hacía dónde estaba Mía, la chica la miro, y la abrazo fuertemente, Isabella pudo llorar desconsoladamente.

—Que bueno verte, Isa— Mía se separo de ella, para después las dos sentarse.

—Igualmente, Mía— Isabella miraba la foto de Letty—. No puedo creer qué este muerta.

—Ni yo tampoco, es difícil asimilarlo.

Brian llegó en ese momento mirando a su hija, junto a la chica qué aún ama. Isabella dirigió su mirada hacia donde estaba, y lo saludo con la mano.

—Dom, debería estar aquí. Letty era su mejor amiga— Mía la miró preocupada, algo dentro de ella sabía qué Isabella aún seguía amando a su hermano.

—Lo llamé, pero no sé si vendrá— murmuró Mía.

Aún Isabella tenía la esperanza de volverlo a ver, aunque sea un por un momento. Ella aún amaba a Dominic, no dejo hacerlo todo este tiempo. Quería saber cómo estaba, saber qué hizo en estos cinco años.