Te miro, me miras y el mundo no gira. Todo parece mentira Tu sigues, yo sigo es nuestro castigo fingir que somos amigos y cuando no haya testigos mi vida entera te daré cuando nadie ve Cuando nadie ve -Morat
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Después de relatarle todo a Alan y que este quedara satisfecho con el chisme, ambos nos levantamos y decidimos ir al baño a quitar el rastro de sangre seca que había quedado en mi cara.
Después de un rato el se tuvo que marchar porque tenía Química y yo como no pensaba entrar a clases y toparme con Clover —Porque ambos compartimos la misma clase—Decidí quedarme en el baño.
Jugué un rato con mi teléfono y me entretuve con mis pensamientos.
Dónde cierta chica rubia y de ojos verdes era la protagonista.
Aún recuerdo a la perfección el día en el que la conocí, bueno, no diría conocer como tal pero se entiende el punto.
El día en que la vi por primera vez.
Era nuevo en el colegio y recuerdo que después de haber salido de la oficina de la directora completamente derrotado, ahí estaba ella esperando su turno. Estaba hermosa como siempre, ella me dedico una sonrisa pero al ver mis heridas se le borro de golpe.
Por un momento me preocupe pero ella solo hizo lo mismo que hizo hoy .
Me ayudó y me animó a que no me rindiera y también me dijo que le tuviera paciencia a Clover pero ya ven que es imposible.
El punto es que ella siempre está ahí cuando más necesito de una persona —O cuando Alan no se aparece—lo hace sin conocerme solo viene, me ayuda y se va con una sonrisa
No si antes decirme.
El chico de los ojos azules.
Es increíble a su manera y eso me encanta.
Nunca he hecho algo para hablarle ni nada por el estilo, soy muy tímido para esas cosas. Además aunque lo intentará ella jamás se fijaría en mi.
Soy muy aburrido y serio para ella.
Y sin mencionar que Clover me mataría y en estos momentos no estoy para meterme en problemas.
Meto mi mano en mi bolsillo y tocó el collar que mi padre dejo para mí.
Lo tome está mañana de mi escritorio pensando que sería como una especie de amuleto de la suerte pero no pareció funcionar.
Por eso no creo en esas cosas.
Muerdo mi labio inferior y lo saco de mi bolsillo mientras lo detallo.
Es un bonito collar; la cadena es de un metal brillante y cómo colgante había una hermosa luna creciente brillante y hermosa.
Amaba ese collar cuando era niño, es un honor poder usarlo al fin.
Me coloco alrededor del cuello el collar y comienzo a caminar hacia la salida del baño pero una extraña sensación comenzó a invadir mi cuerpo, sentía temblores por todo mi cuerpo, sentía ganas de vomitar y unos extraños dolores comenzaron a aparecer por todo mi cuerpo, mi vista se volvía borrosa con cada paso que daba así que decidí detenerme debido al miedo.
