Pared con Pared | KiVi

5. Una ronda más

Violeta y Denna se encontraban de pie, esperando para entrar al baño. La pelirroja había acompañado a su amiga en un intento por escapar de esa encerrona que, sin ser consciente, le había preparado Alex. Había pasado media hora desde que Chiara había comenzado a cantar. Media hora en la que Violeta no había hecho ni caso a la morena de la tarima.

-¿Cómo se va a pegar tres horas cantando? -preguntó Violeta pegada a la pared.

-Digo yo que hará una pausa. -dijo Denna.- Sino igual se muere.

-No, si yo lo decía porque para mí tres horas van a ser insufribles.

-Ya ha pasado media hora. -respondió Denna.- Mira el lado bueno.

-No hay lado bueno. -dijo Violeta suspirando.

-Igual si le prestaras atención a como canta se te pasaba la tontería. -respondió la rubia.

-Uno. -dijo Violeta haciendo una pausa.- No es una tontería, tengo razones de peso para odiarla. Dos. -continuó Violeta.- No puedo estar tres horas escuchándole me va a dar algo.

-Violeta. -dijo Denna.- A mí me parece que exageras.

Antes de que Violeta pudiera contestar, la puerta del baño se abrió y Denna tiró del brazo de la pelirroja, metiéndole al cubículo.

-Perdón. -dijo Denna bajándose los pantalones.- Me estaba meando viva.

-Bueno. -dijo Violeta.- Cuando tengas que soportar tres horas de ella y sus amigos dando gritos con la música altísima, me dices si estoy exagerando o no.

Denna no respondió al comentario y se levantó, mirando a su amiga.

-¿Vas a hacer pis?

-No. -respondió Violeta.

Denna hizo un gesto a su amiga para que abriera la puerta y, cuando la pelirroja lo hizo, ambas salieron del cubículo.

-¿Y para que has venido? -dijo Denna mientras abría el grifo.- ¿Para quejarte?

-Para escapar cinco minutos. -dijo con una sonrisa la pelirroja.

-Igual estás siendo demasiado extremista. -respondió Denna mirando a su amiga por el espejo.

-Oye, que eres mi amiga. -se quejó Violeta.- No la suya.

-Ya, pero cuando te pones así...

-¿Así como? -preguntó la pelirroja.

-Así. -respondió la rubia girándose y mirando a su amiga de arriba a abajo.- Un poco insoportable.

-Almudena. -dijo Violeta con la boca abierta.- Cómo te atreves.

-Perdón, sabes que te quiero mucho. -dijo Denna.- Pero necesitabas oírlo.

-No estoy insoportable. -insistió Violeta.

-Vale, entonces sal, siéntate como una persona normal y disfruta de la voz de la chica. -dijo Denna.- Puedes hacerlo, ¿no?

-Claro que puedo hacerlo. -dijo Violeta.- Soy periodista, he tenido que hablar con gente horrible.

-Pues eso. -respondió la rubia.- Y espero que te comportes con Alex.

-Ya. -respondió la pelirroja mirando al suelo.- No es su culpa, luego le pago una cerveza y se le pasa.

Denna soltó una risa y negó con la cabeza.

-Estoy lista. -dijo Denna arreglándose el pelo.

Violeta se encaminó hacia la puerta de la salida, para volver a la sala principal, cuando volvió a escuchar a su amiga hablar.