Draco Malfoy y un traidor suelto

Planes de último minuto

Después de algunas semanas del pequeño efecto secundario que sufrí en medio de la clase D.C.A.O he dejado de tener amigos a tener guarda espaldas que no me dejan respirar ni un segundo a solas lo único bueno que saque de ese momento fue que nadie se metiera conmigo por ser débil, pero volviendo al problema principal que es el nivel de control que están empezando a tener mis amigos sobre mí después del efecto secundario vivido, lo que está provocando que me vuelva a sentir como una marioneta inútil que intenta sobrevivir en esta vida otra vez.

Lo que nos lleva al momento que estoy viviendo ahora mismo ante el sexto intento de Daphne de quitar mi bolsa

-Draco, por favor- dijo Daphne intentando quitar la bolsa que llevaba al hombro

-No- gruñí frustrado -Estoy bien, para llevar mis cosas- dije mientras me alejaba rumbo a la siguiente clase

-Pero Draco- volvió a intentar la rubia

-Daphne- dije molesto -Si aprecias nuestra amistad dejaras de hacerme sentir un inútil

-Solo intento ayudar

-No estás ayudando, ninguno está ayudando

-Pero...

-No, cállate y escucha- dije molesto girándome a mirar a Daphne -Se cuáles son mis limitaciones, se cuándo estoy bien, no me hagan sentir como un puto inútil

-Lo siento, yo no quería- dijo con voz temblorosa dando unos pasos hacia atrás

-No querías que- dije pasando mi mano por mi pelo -No hacerme caso, te he dicho 6 veces no perdón 7 veces que no quería que llevaras mi bolsa- apreté con fuerza mis puños intentando calmar mis emociones

-Pensé que hacía algo bueno por ti

-¿Por mi?- la mire incrédulo

-Si- susurro con la mirada hacia abajo

-Necesito estar a solas- apoye una mano en mi frente -o voy a decir algo de lo que me voy arrepentir

-Draco...-dijo entrecortada pasando las manos por su cara en un intento de ocultar las lágrimas que caían por su rostro

Suspiré caminando de vuelta a ella para abrazarla con fuerza contra mi pecho -Siento mucho haberte gritado no merecías que explotará contigo- sentí sus manos agarrar con fuerza la túnica de mi espalda

-Lo siento- dijo como pudo sin apartar su cara de mi camisa -Soy una horrible amiga

-No digas eso- bese con delicadeza su cabeza antes de separarla un poco -El amigo horrible soy yo- le sonríe

-Yo también lo soy- suspiro mientras se separaba de mi -No tuve en cuenta tus sentimientos

-Los dos somos amigos de mierda- dije con una sonrisa divertida la cual provocó su risa

-Bueno...- se separó de mi con una sonrisa -Mañana nos vemos- apretó con fuerza los libros que tenía entre los brazos

-¿Cuál mañana?- dije divertido -No, no, no, ya- empezando a caminar rumbo a las escaleras que estaban a punto de cambiar

-¿¡Draco!?- dijo de forma alarmada al ver que echaba a correr hacia las escaleras que estaban a punto de cambiar

-Ya- salté con una sonrisa divertida ante la pura adrenalina de poder caer pero tocando el escalón al aterrizar -Mañana no voy aparecer por ningún lado

-Claro que no lo harás si haces esas cosas- grito Daphne alarmada ante mi acrobacia

-Yo también te quiero Daphne- grité de vuelta con una sonrisa