Capítulo 45

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Desde que el sol comenzó a asomar sus luces de detrás de las montañas, la vida en el pueblo empezó incluso desde mucho antes; los trabajadores salían al campo a cosechar el trigo y algunas otras debían tomar el autobús para ir a la ciudad más cercana a hacer su vida diaria en la escuela o en alguna oficina. Yone mantenía los ojos abiertos tratando de mantener la compostura después de escuchar por una hora entera a K'Sante hacer flexiones, podría ser un panorama gratificante, pero después de conducir por varias horas en la noche y en la carretera solo quería dormir hasta tarde.

Los jadeos por el esfuerzo del moreno resonaban en toda la habitación y al ser un espacio un poco reducido es que el calor se encerraba tanto que sofocaba al moreno por lo que tuvo que abrir la ventana y ahora Yone tenía sueño y frío.

─¿Podrías al menos mantener la boca cerrada?

K'Sante se puso de pie y miró a Yone.

No llevaba camisa para soportar el calor y dejar su piel respirar tranquila, pero esa imagen de ver los enormes pectorales morenos del chico hizo que Yone casi comenzara a babear, el brillo de su piel resplandecía con el sol entrando por la ventana y con el viento que soplaba que hacía que su piel se erizara ahora le congelaba hasta los hueso de los nervios, tragó saliva pesadamente para despejar sus pensamientos hasta que bajó la vista y vio algo que lo dejó más helado que le viento, era K'Sante solo con su bóxer puesto.

─¿Qué estás haciendo? ─Yone se paró de pronto y puso el seguro en la puerta.

─Ejercicio.

─Me refiero a eso ─luego corrió a cerrar la ventana.

─¿Qué haces tu?

─Alguien podría verte o puede entrar la madre de Sett.

Yone estaba muy avergonzado por tener a este chico semi desnudo en la habitación y pensar que alguien entrara en la habitación y encontrarlo así.

─Tranquilo Yone, la madre de Sett se fue al campo junto con Sett, Alune y Aphelios, y Ezreal tuvo que salir a la ciudad cercana con Kayn para encontrarse con Singed.

Yone se tiró en la cama pensando en lo que le había dicho, miró su reloj en el teléfono y vio que eran pasadas las diez de la mañana y abriendo grande los ojos miró a su compañero que sonreía divertido, Yone no se había dado cuenta que había dormido más de la cuenta y que el hecho de tener a K'Sante semi desnudo ejercitándose era por que ya era bastante tarde para guardar silencio.

─De cualquier forma, no debemos tomarnos tantas libertades como ejercitarnos en ropa interior o dormir hasta tarde ─Yone bajó la mirada mirando el edredón.

─¿Alguna vez te relajas? ─K'Sante se puso una camisa.

─¿Cómo?

─Me refiero a que desde que te conozco eres así de intenso y correcto ─K'Sante se acercó a Yone ─¿te mataría relajarte un poco?

Yone sonrió un segundo antes de acercarse a K'Sante para plantarle un beso en los labios, beso que él recibió con alegría y después de una sesión de estos que duró bastante tuvieron que levantarse para ir a comer algo.


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El viento helado enfriaba la nariz y las orejas de Aphelios, pero parecía que Sett estaba feliz de tener a su chico con él recogiendo el trigo, unos metros delante estaba Alune con la madre de Sett haciendo lo mismo, ambas reían como si fueran las mejores amigas de toda la vida a pesar de la diferencia tan grande de edad y Aphelios no pudo evitar pensar que estaba viendo como Alune disfrutaba de la compañía de una madre, algo que le había hecho falta desde hace tiempo cuando ambos dejaron su hogar para buscar una mejor oportunidad en la capital.

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