Black Cat | KookMin || BOOK 2#

Fifteen. Verdadera cercanía

A pesar de su edad corta en términos de la sociedad en general, Jimin ha tenido muchas relaciones sexuales. Ha sido en un periodo casi muy reducido de tiempo, por desgracia. Sin embargo, puede decir que es la primera vez que alguien lo busca de forma tan desesperada y ansiosa. La verdad, llegado a este punto, Jimin no es capaz de distinguir que pasa, que siente, que le dicen.

Es un mareo anómalo y encantador al mismo tiempo.

Además de alucinante, que supera sus expectativas de todas las formas posibles.

Jungkook por su parte no tiene capacidad cerebral en lo absoluto. No solo no sabe pensar, apenas sabe cómo moverse, más preocupado por atrapar a Jimin debajo suyo y que así, el personaje de voluminosos ojos verdes que ha estado mirando todo este encuentro, se mantenga ahí donde está, que no sienta las ganas ni pueda huir de él.

Jimin gime entre dientes, sus ojos llorosos y labios entreabiertos, humedecidos de los besos que se han dado; pequeña marcas que se lucen en su cuello, clavícula y pecho. Jimin lo toma del rostro y el acaricia las mejillas.

—No me voy a ir sí me pides que me quede. —notifica Jimin en un susurro y Jungkook empieza a llora de repente, para sorpresa del Altered.

Esto está siendo más sentimental que erótico. Tenía otras expectativas, pero de nuevo: no lo molesta, por el contrario, lo hace feliz esta reacción tan fuerte de parte de Jungkook. Quiere decir que realmente lo tiene bien sujeto.

Que hay una dependencia, por más superficial que sea.

Usa su fuerza para ponerlo a él contra la cama, apoya la manos en el pecho ancho y abultado de Jungkook. Da una sonrisa juguetona, acariciándolo al mismo tiempo que deja salir lentamente sus garras. Rasguña poco a poco la carne tan tierna con algunas cicatrices de tantos atentados vividos a este punto. Sus pezones están duros, su piel erizada, los músculos tensos que se relajan a cada minuto.

Moviendo su cadera poco a poco, subiendo y bajando encima de la virilidad gruesa y larga que se abre paso tan fácilmente en su carne. Incluso con lo que dolió inicialmente, estuvo tan bien. Jimin ansioso se recibir todo lo que Jungkook tiene por darle y ahora mismo, mimándolo a través del placer que puede entregar. Jungkook jadea y gime, sus manos callosas que toman los muslos esponjosos y fuertes.

—Estás tan triste y perdido—chuchea Jimin con la cara roja y el calor rebosando en él. Toma una de las manos de Jungkook para ponerla en su mejilla—. Como si no tuvieras a nadie más, pero me tienes a mi... que siempre regreso a ti ¿Lo notaste? -pregunta entrecortado, ansioso y en movimiento—. Siempre... siempre... regreso por ti—Jungkook aprieta los diente y baja la mirada, a donde su pene se pierde por entrar en Jimin. Toma la virilidad del Altered, masturbándolo y volviendo a ver arriba. La forma en que cierra los ojos y se inclina un poco hacia abajo, disfrutando de las atenciones, sintiéndolo y apretándolo entro suyo—. Me gusta muchos sentirte cariño. —ronronea, frotando su mejilla en la palma de Jungkook.

Que solo lo mira y lo mira.

Se deja tomar, porque eso significa que Jimin está aquí y desea quedarse.

Jimin lo besa en la mano, inclina la lame y la usa para ahogar los escandalosos gemidos de su orgasmo, acompañado por los embistes que Jungkook logra dar, a punto de llegar al clímax por igual. Viéndolo en su gran variedad de expresiones, como su busto tan elegante y andrógino da ligeros tumbos por la fuerza de los saltos.

Jimin lo hace tomarlo de un seno, que lo apriete, que juegue como se le antoje, sacando la lengua al gemir y sus ojos brillando de placer. Apretando todo su cuerpo al igual que Jungkook cuando el orgasmo se libera. El semen de Jimin ensucia el abdomen de Jungkook y el de Jungkook, llena el interior de Jimin.