34. AUDACIA

153K 13.7K 1.9K
                                    

Eres mi principio y mi fin.
Incluso cuando pierdo, estoy ganando,
Porque yo te doy todo de mí
Y tú me das todo de ti.
***


ASIER

Después de responder las preguntas que mis padres le hacen, Naira recuesta su cabeza sobre el respaldo del asiento. Cierra los ojos con una sonrisa decorando sus labios mientras sus dedos juguetean con el dije de su pulsera.

Luce tan linda así relajada que lo único que quiero hacer es besarla, pero debo reprimirme. Parece cansada, como si no hubiera dormido bien anoche, y no quiero despertarla. Además de que sería raro sacarla de su sueño y besarnos frente a mis padres. Mejor me espero. Tendremos bastante tiempo para nosotros solos durante toda esta semana. Eso me pone algo... nervioso. Y emocionado. Esto último más que nada.

Escucho a mis padres conversar en voz baja y veo a mi otro lado, donde Alba se encuentra durmiendo sobre su sillita. Sonrío enternecido.

Cuando miro hacia mi novia de nuevo me doy cuenta de que ha caído completamente dormida. Tomo su mano y entrelazo nuestros dedos sin que ella lo note, entonces recargo mi cabeza en el respaldo del asiento y cierro los ojos también, diciéndome que solo descansaré un poco.

***

—Hemos llegado.

La voz de mi mamá atraviesa mi neblina de sueño y una sacudida en mi hombro me trae de regreso por completo. Abro mis ojos y lo primero que llama mi atención es el color verde que nos rodea por fuera del coche mientras este sigue avanzando. Sin duda estamos en medio del bosque.

Sonrío y entonces mi enfoque se centra en la chica de sonrisa adormilada que se encuentra sentada a mi lado.

—Bonito, ¿eh?

Ella me mira y asiente.

—Una vista preciosa.

—Y que lo digas —susurro sin despegar mi vista de su perfil.

Ella se da cuenta y me mira por el rabillo del ojo. Me da una sonrisa tímida y luego desvía la vista de nuevo al paisaje. Algunos metros más adelante nos encontramos con unas cuantas cabañas, son bastante grandes, y justo después se puede visualizar un gran lago.

—Espero que hayas traído tu traje de baño —murmuro al tiempo que mi papá estaciona y apaga el coche.

—Vamos a ir a registrarnos. Aún es temprano así que no sé si quieran ir a pasear. Podemos encontrarnos a la hora de la comida y de ahí les ayudo a acomodar su tienda.

—Claro —respondo. Abro la puerta, tomo la mano de Nai y luego la saco del vehículo—. Nos vemos.

Comienzo a caminar aprisa adentrándome en el bosque y oigo a Nai reír detrás de mí.

—¿Estás seguro de saber a dónde vamos? —pregunta.

—Conozco este lugar mejor de lo que conozco ni casa, con eso te digo todo.

La miro por encima de mi hombro y le sonrío para tranquilizarla. En eso, una piedra salvaje aparece en mi camino causando que me tropiece, caiga y que Nai aterrice encima de mí con un grito.

—Juro que esa piedra no estaba ahí —me quejo.

La risa de Nai llena mis oídos y elevo la cabeza para encontrarla sonriendo sobre mi pecho.

—Espero que no haya acantilados por aquí. No vaya a ser que no recuerdes que uno se hallaba cerca.

Le saco la lengua ante su burla y ella vuelve a reír, por lo que le hago cosquillas. Se retuerce sobre mí gritando que me detenga y haciendo chillidos de frustración.

Amor de libro [ADL #1] -PRÓXIMAMENTE EN FÍSICO ✔Where stories live. Discover now