_⁠_*⁠.⁠✧ CAPÍTULO 4 *⁠.⁠✧_⁠_

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Salimos a una de las terrazas del castillo. Lejos de la Sala del Trono.

- Bueno, ya que vamos a pasar un tiempo juntos. Me gustaría saber su nombre, milady - Nyx se agacha. Coge mi mano y presiona sus labios contra el dorso de esta.

- ¿Podríamos dejarnos de formalidades? - le pregunto - Gracias - dije irónicamente sin haberle dejado tiempo para contestar.

Nyx me mira a los ojos y me dice:

- Si no quieres decirme tu nombre, te llamaré princesa o mejor aún mi princesa. ¿Qué te parece?

- ¿Qué te parece si te pego en la cara y tú carita de niño mono se va al garete?

- Eres muy maleducada. ¿No te han enseñado a comportarte, princesa?

- Me han enseñado muy bien - le contesto -. Ahora cállate.

Aparté la vista de él para observar el hermoso cielo de esta corte.

El cielo nocturno se desplegaba sobre nosotros como un lienzo estrellado, con la luz plateada de la luna iluminando su camino.

Nyx se posicionó junto a mí y señaló hacia arriba, donde la Vía Láctea se extendía como un río de diamantes. Precioso.

- ¿Te gusta? - me preguntó Nyx rompiendo el silencio que había habido entre nosotros.

- Es... Es hermoso.

- Eso es porque no has visto la noche en Velaris.

- ¿Velaris? - le pregunté. No me sonaba haber escuchado ninguna ciudad llamada así. En esta corte sólo conocía la Ciudad Tallada y las montañas ilyrias, donde los machos con alas solían entrenar.

- ¿No la conoces? - negué con la cabeza -. Es una pena. Ahí se encuentra el cielo nocturno más bonito de todo Prythian.

- Y ¿Dónde está esa ciudad? - pregunté. Si aquel cielo era más bonito que este, tenía que verlo, apreciarlo.

- En esta misma corte, en el este - en el este. Si no me equivoco es el lugar más cercano a la Prisión -. Pero hay una pega - me dice - los habitantes de la Ciudad Tallada no pueden visitar la ciudad, ni siquiera Keir.

Cómo no. Sólo podían disfrutar de aquellos cielos la familia real. Siempre ellos. Nosotros teníamos que estar aquí encerrados. Tenía que estar aquí encerrada con estos seres, estos seres malvados.

Tuvo que notar mi enfado porque dijo:

- Bueno, siempre puede haber una excepción - empezó -. Mira, mañana cuando la Luna esté en lo más alto, sal a la terraza de tu habitación, espérame allí. Luego, te recogeré y te llevaré a Velaris.

Si me pillaban estaba muerta, o algo peor. Pero, por cualquier cosa que hiciera me iban a castigar, tenía que salir de aquí, de este palacio. Al menos una noche.

- Vale. Te esperaré en mi terraza.

- Pero, por una condición. Una pequeña condición.

- ¿Cuál?

- Dime tu nombre, princesa.

- No me llamo princesa.

- Entonces, dime tu nombre.

- Bien. Mi nombre es Freya. ¿Contento?

- Muy contento, princesa Freya.

Lo miré mal y él me respondió con un gran sonrisa en la que podía apreciar dos hoyuelos.

- Bueno, ya es hora de irnos - dijo - dentro de unos minutos van a empezar a echarnos de menos.

Asentí con la cabeza Tenía razón, teníamos que volver. Aunque era lo último que quería. Aunque mi deseo era quedarme aquí toda la noche, admirando el cielo nocturno. Aunque me lo estuviera pasando bien con él, pero aún así, seguía siendo un payaso.

Él me tendió su mano. La ignoré y empecé a caminar hacia la Sala del Trono. Nyx se colocó junto a mí y ambos volvimos al lugar donde se encontraba la fiesta.

Dejé de andar en mitad del pasillo.

- Espera. No podemos entrar por la puerta principal. No pueden saber que he estado contigo.

Era verdad. No podían saber que he estado con el heredero de la Corte. Aunque quisieran casarme con un alto fae importante, nunca querrían que fuera con un ilyrio, ni siquiera el hijo de los Altos Lores. Seguramente me castigarían.

Todo esto era injusto.

- Vale. Sé por dónde entrar sin que nadie sospeche mucho - se acercó a mí hasta colocarse a escasos centímetros de mí.

- Ajá.

- Te voy a teletranspotar entre la gente, ¿Vale? - asentí con la cabeza -. Yo lo haré en la otra punta de la sala. Así nadie sabrá que has pasado estos minutos tan maravillosos junto a mí.

- Tienes el ego demasiado grande.

- Cierto. Una cosa más. ¿Te has teletransportado alguna vez? - negué con la cabeza -. Vale, pues esto se sentirá un poco extraño, ¿Okey? - asentí -. Pues, allá vamos.

Me agarró de los hombros y nos desvanecimos.

Fue una sensación muy extraña. Sentí como que mi cuerpo se dividía en miles de partículas de luz para luego volver a su destino. Cuando noté el suelo bajo mis pies, pude apreciar todos los sonidos y colores distorsionadamente. Pero hubo una voz que escuché mucho más superficial que las demás, como si estuviera dentro de mi cabeza.

- Todo lo que estás sintiendo se desvanecerá en poco tiempo. Nos vemos mañana por la noche, princesa Freya.

✧✧✧

Holaaa.
Espero que os esté gustando esta historia, porque a mí me está encantando.
¿Qué os parece Freya y Nyx?
Yo de Nyx me estoy enamorando, JKAJAJAJAJA.
Espero que tengáis un día lindo.
Os quierooo. 🫶🏻🫶🏻🫶🏻

Una Corte De Sueños Y Pesadillas || ACOTAR Donde viven las historias. Descúbrelo ahora