Capítulo 7

60 12 0
                                    

(PERSPECTIVA DE SATORU)

Por fin lo conseguí.

Todos estos meses, los movimientos que tuve que hacer para que se dieran las cosas, la paciencia ante la larga espera, todo, absolutamente todo valió la pena.

Y ahora, después de haberle dado la mam4da de su vida, lo llevo a mi habitación para que me f0lle sin piedad.

Hasta hace unos minutos, tuve el privilegio de probar su verga, tan grande y tan dura que apenas entró en mi boca.

No es por nada, pero me considero un experto en el arte del sexo oral. Sin embargo, sentir su miembro venoso apretarse en mi garganta, para luego desbordarse dentro de ella dejando su delicioso sabor salado en mis papilas fue, sin duda, una experiencia religiosa.

Y qué decir del rostro extasiado de Yuuji disfrutando de mi trabajo.

Pero aún faltaba lo mejor.

Es por eso que tomé de su mano y ahora me lo estoy llevando a mi habitación. El ebrio e inocente Yuuji se deja llevar como Caperucita por el lobo en el bosque.

Y obviamente yo soy el lobo.

Un lobo con unas ganas tremendas de ser follado por el dulce Yuuji.

Una vez que ingresamos a mi habitación no tardo en quitarme el resto de la ropa que me queda. Y él no deja de mirarme. Eso me encanta.

Una vez que estoy totalmente desnudo, me coloco sobre la cama, dándole la espalda y levantando el culo sin vergüenza alguna, y es que a estas alturas no la necesito.

Siento como sus manos recorren mi espalda, pasan por mi abdomen y se mueven hasta mis glúteos, los cuales empieza a amasar con suavidad.

No puedo evitar gemir ante su contacto. Sus manos están calientes y mi piel está tan fría. Necesito de su calor.

- Vamos, Yuuji. No juegues más conmigo - le digo ansioso - Prepárame y húndete en mí.

- Espera... - me dice con su voz ronca que me eriza la piel - Es la primera vez que haré esto con un hombre. Deja que me tome mi tiempo.

- ¡Oh, vamos! No resistiré tanto...

Estoy hablando en serio. Puedo sentir como mi miembro también se encuentra duro. Pero no quiero correrme sin antes tenerlo dentro mío.

Es entonces que siento como toma mi p*ne y comienza a mastvrbarme.

- Ahhh~ ... Espera Yuuji...

- Tranquilo, te devolveré el favor.

El dulce Yuuji se puso salvaje.

Su mano grande y fuerte jala a la perfección mi p0ll4, la cual disfruta del masaje.

Un poco más y me correré.

Un poco...

Solo un poco...

- ¡Ahh~!

Ahhhh, ahí está. Acabo de mojar mis sábanas. ¡Qué bien se sintió!

Trato de recuperar la respiración, cuando siento que me gira para quedar frente a frente.

Y ahora es él quien termina de quitarse la ropa.

¡Ah, qué maravillosa imagen!

Mi precioso Adonis, la perfección encarnada.

Tengo unas ganas tremendas de morder esa piel bronceada que parece estar hecha de caramelo, hundirme en esos pectorales de ensueño. Besar cada cuadrado de su abdomen perfecto.

DELIRIOWhere stories live. Discover now