Cultivando solo en la Torre Part #2

Capítulo 367

El piso 40 de la Torre Negra.

Un cerdo negro entró en la granja de espadas.

Pero la granja estaba desierta. Miró atentamente el lugar donde solían alojarse las comadrejas, pero allí tampoco había nadie.

"Hmm... ¿es cierto el rumor de que Yuren les quitó el dinero a Tolt y a sus hijos y los esclavizó?".

No creía el rumor, así que vine a comprobarlo por mí mismo, pero después de ver la escena, me di cuenta de que podía ser cierto.

"Si Yuren-sama tomó 100 billones de Topcoins de Tolt, el dinero restante es...".

49.9 trillones de Topcoins.

Originalmente, Yuren era un cerdo nacido en una familia que no era sólo un poco rica, sino mucho más rica.

Desde muy joven, Yuren prometía ser un soñador "de trapos a riquezas", prestando o estafando fácilmente a otros, y las cantidades crecían más y más.

Finalmente, la cantidad de dinero que prestó y estafó superó el billón de topcoins.

Los ancianos del clan acudían todos los días a Yuto, el padre de Yuren, para quejarse de que no se debía permitir que Yuren siguiera así.

Era una suma insignificante en el contexto de la riqueza de la familia, pero era una estratagema para construir un caso para el próximo cabeza de familia.

Pero Yuto sentía que, por el bien del futuro de Yuren, no podía permitirlo.

"Hablo como jefe de la Casa Deimon. Yuren, no entres en la casa hasta que hayas recibido todo el dinero que has prestado y defraudado".

Así que, bajo el pretexto de cumplir con las exigencias de los ancianos, echó a Yuren. Por orden del señor de la casa.

La idea era que si su hijo tenía que sufrir un poco, aprendería el valor del dinero y debilitaría su temperamento.

Por supuesto, no esperaba recibir todo el billón de Topcoins.

Una vez que Yuren hubiera ganado unos 100.000 millones de Topcoins, planeaba convencer a los ancianos para que le dejaran entrar en la casa como si no hubiera ganado.

Por supuesto, Yuren no sería capaz de hacerlo solo, así que estaba preparado para enviar a alguien que le ayudara por el camino.

Pero entonces ocurrió algo que Yuto no había previsto.

La mano de Madas floreció: un talento que podía convertir tanto oro como el que comía Yuren.

Gracias a ello, Yuren se llenó de dinero y, en lugar de cobrar, fue estafado para que prestara más.

Incluso cuando quería ayudar, se volvía demasiado rápido contra ella, y su miseria hacía difícil acercarse.

Han pasado 10 años desde que echaron a Yuren de su casa.

La cantidad de dinero que Yuren tenía que reunir para volver a casa había crecido hasta los 50 billones de Topcoins, junto con el hecho de que ella era un objetivo.

Como resultado, cada vez que se oía que Yuren había prestado dinero a alguien o había sido estafada, Yuto se atormentaba lamentando su decisión.

Así que últimamente, ella intentaba mantener los rumores sobre Yuren fuera del alcance de Yuto.

Era una rastreadora contratada por la madre de Yuren, Hamie, para saber de Yuren sin que su marido lo supiera.

"Ese hogu por fin cobró... Hamie debe estar contenta".