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Me encuentro de rodillas en la arena. el frío cuela por mis huesos haciéndome temblar ligeramente, aún estoy mojada. Probablemente tenga un resfriado más adelante, Alex sigue inconsciente a mi lado con las manos atadas y el hombre que enviaron a buscar está de rodillas frente a mi

-bien... Te daré una última oportunidad-habla sheol mientras sigue observando el frasco con interés entre sus manos

-si te digo lo que se, igual vas a matarme-suelto entre dientes

-tienes razón pero la diferencia entre una cosa y otra es que si me dices tu muerte será menos dolorosa

-no se nada

-¡Keisha!-le da el frasco a la morena y ella procede a dárselo al hombre quien bebe sin pensarlo dos veces, entro en pánico al ver que si lo hizo

-¡No! Debo tomar las tres de lo contrario no sirve de nada-prostesto asustada

-que importa-dice sin interés-de igual manera vas a morirte hoy

El hombre comienza a dar gritos desgarradores, sangre comienza a salir de sus ojos, boca y oídos

-¿Pero que mierda?-chilla keisha totalmente asombrada y asqueada

Sheol por otra parte solo lo mira fijamente con diversión ¿Que le puede ver de divertido a esto?

-sheol por favor ¡Para!-suplico entre lágrimas. El desespero del hombre me pone aún más asustada, mi corazón late rápidamente

-¿Que pare? Yo no sé parar luna northman si lo quieres salvar ¿Por qué no lo haces tu? A la final es tu antídoto no el mio-finaliza victorioso, quiere hacerme hablar pero la verdad es que no se nada

-¡por favor! Yo no sé...

Una explosión del hombre deja a todos llenos de sangre, viceras y partes humanas por doquier. Quedó completamente bañada en sangre, grito hasta que no queda más aire en mis pulmones seguido de una arcada que se convierte en vómito

-¿Ves keisha? Te dije que hoy sería una noche estupenda-le habla sonrriente, no le importa estar bañado en sangre y a ella tampoco seguramente están acostumbrados

-¿Nos vamos por una sangre fría?-pregunta keisha

-o+ por favor-le responde contento

Los dos entran a la casa entre risas como si nada hubiera pasado dejándome en el césped bañada en sangre y mi hermano aún inconsciente

Los dos entran a la casa entre risas como si nada hubiera pasado dejándome en el césped bañada en sangre y mi hermano aún inconsciente

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No tengo a nadie en qué confiar ahora. Si bien sheol era mi protector ahora también es mi enemigo. Suspiro agotada por el cansancio después de lo de anoche no me quedo de otra que tragarme mi orgullo, levantarme y entrar con mi hermano a la casa para limpiarnos. Por suerte Scott me vio y me ayudó cargando a Alex
No me quedo de otra que aceptar su ayuda.
Nunca me había fijado que no tengo habitación, estaba con Uriel y luego con sheol. No tengo donde dormir así que me quedé en una habitación para invitados

sheolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora