tenías que ser tú › bospa.

29

Giovanna salió furiosa de la habitación de Bosco, se quedó oculta detrás de la entrada, y se puso a espiarlo.

Vió como Bosco escribía rápido en su celular, parecía estar hablando con alguien.

En un momento, sonrió como tonto.

Escuchó un audio y Giovanna supo quien era.

—Ese imbécil —pensó apretando ambos puños.

Pedro Pablo.

¡Lo odiaba!

—Es todo tu maldita culpa, pobretón, por tu culpa Bosco está molesto conmigo y no me pela.

—Ya no la soporto, te lo juro —escuchó decir a Bosco.

Furiosa, decidió no seguir ahí, salió corriendo y se perdió en el pasillo.

—No, esto no se va quedar así. ¡No se va quedar así! —chilló recargándose en una de las paredes— Tú vas a ser mío, Bos. ¡Mío!

...

—¡No, no, yo abro! —Bosco le dijo a la empleada que solo asintió y se fue de ahí.

Bosco abrió la puerta principal y se encontró con Pedro Pablo.

Otra vez llorando...

No dijo ninguna palabra, se lanzó a sus brazos y Bosco correspondió al instante, acariciando su cabello.

Mientras Giovanna los miraba seria desde las escaleras.

—Bueno, vamos ya —Gala apareció y se encontró con su mejor amiga a mitad de las escaleras.

Ambas se acercaron a los chicos y Gala preguntó a Pepa sí se quedaría para la cena familiar.

...

Pedro Pablo entró al comedor detrás de Bosco y su mirada se fijó en la mesa, ahí ya estaban sentados Elvira, Esteban, Eder, Gala... y Giovanna.

—Adelante, siéntense —señaló Esteban.

Bosco se sentó y Pedro Pablo lo siguió, quedó justo en frente de la señora Elvira, que lo estaba mirando con una cara de...

Desvío la mirada, incómodo.

Paz apareció y empezó a servir la comida, cuando paró junto a su sobrino, le dió un codazo haciéndolo sonreír.

—Gracias Paz.

La mujer asintió y se fue sin mirar más a Esteban.

Así, todos empezaron a comer.

Todo estaba en silencio...

Nadie hablab...

Elvira comenzó a hablar.

A incomodar, más bien.

La mujer comenzó a decirle a Bosco que haría muy bonita pareja con Giovanna, esta sonreía y no le apartaba la mirada al menor.

Pedro Pablo bajó la cuchara y se disculpó con todos, se levantó de la mesa, dió unos cuantos pasos y Giovanna le puso el pie, haciendo que tropezara y cayera al suelo.

—Ups —susurró, intentando ocultar su sonrisa burlona— ¡Ay! ¿Estás bien?

Se levantó rápidamente para "ayudarlo" Bosco la hizo a un lado y él fue quien ayudó a Pedro Pablo a ponerse de pie.

—¿Estás bien?

—Sí, sí, lo estoy.

—Que torpe —murmuró Elvira bebiendo de su copa.

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Giovanna 🖕🏽 te odiamos.