(ᴅᴇꜱ) ᴄᴏɴᴏᴄɪᴅᴏꜱ (pausado).

✉️ 4: ᴄᴏʀᴛɪɴᴀꜱ ᴀᴢᴜʟᴇꜱ

No había pensado que el tal "J.H.T" se encontraba estudiando en su mismo instituto; ató cabos y coincidencias al releer las palabras encerradas en las dos cartas que llevaba leídas y la curiosidad no se apartaría de él hasta que diera con el emisor y su identidad. Cerró la mochila y prefirió callar también sus descubrimientos. No se lo diría ni siquiera a su mejor amigo, quien andaba extrañado por su actitud tan ida durante los descansos.

---¿Qué estás mirando? ---le preguntó Kim Minjoon, cuando almorzaban en el comedor del instituto.

---Nada ---respondió Young, sin convencer al otro.

---¿Mirabas a alguien? ---bromeaba Kim---. ¿Alguna chica?

---No, no miraba a nadie.

---Sooha, ¿estás bien?

---Sí, ya cállate y sígueme contando lo que sea que hayas estado diciéndome antes de tus preguntas.

Minjoon soltó una risa seca, pues sabía que su amigo se traía algo entre manos y sí, dejaría de indagar, pero lo estaría observando. Mientras Sooha no le hubiera puesto ojitos a su chica, seguirían siendo mejores amigos y no habría altercados de por medio. La rivalidad estaba en su sangre y si tenía que ganarse primero el corazón de la fémina, lo haría sin pensarlo dos veces y sin importarle perder la amistad que llevaban desde que habían iniciado la preparatoria.

En silencio, durante una clase aburridísima como otras, Young pidió permiso para ir al baño y salió con otra carta escondida en el bolsillo. Entró a un baño y después de ponerle seguro a la puerta, se sentó sobre la tapa del excusado para poder leerla.

Y decía:

"He sentido que la vida se escurre y yo estoy lleno de fugas. Mi más sentido pésame a quienes jamás lograron ser felices...

Yo quiero ser feliz. ¿Será fácil para mí lograrlo?

Posdata: Mamá me compró cortinas azules para la ventana de mi cuarto. Y estoy feliz por eso...

Firma: J.H.T".

Alguien entró atropellando la puerta de otro baño a un lado de Sooha, quien lo oyó toser y devolver el estómago con preocupación. Saliendo del suyo, tocó su puerta tres veces.

---Amigo, ¿te encuentras bien? ---le preguntó.

No obtuvo respuesta, sólo el descargo de la cadena. Volvió a tocar la puerta y ésta se abrió dejando a Sooha perplejo y luego, sintió que el chico lo empujaba para poder pasar e irse a toda prisa por donde había venido.

¿Era el mismo chico del otro día? ¿Qué le ocurría?