Al ataque, Equipo 7.

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Ya llevaban un buen tiempo caminando, y renegando. 
Aparte de un par de discusiones, entre ambas kunoichis del equipo, todo estaba muy tranquilo, demasiado para el gusto del Hatake.

-Señor Tazuna, usted es del país de la ola, ¿No?-

La Haruno preguntó con curiosidad, mirando al constructor de puentes. Este no le tomó importancia a la pregunta de la joven, solo la miro con cierta molestia mientras bebía el poco alcohol que tenía su botella.

-Si, ¿Y que con eso?- 

Era evidente que no era el mejor socializando, como cierto Uchiha, por eso se mantenía algo apartado del equipo raro que le tocó.
Miró a su Sensei, quien sólo leía con calma y aburrimiento su libro naranja, antes de preguntar suavemente:

-Kakashi-sensei ¿No tienen ninjas en ese país?-

El Hatake levantó su mirada aburrida del libro, mientras la Uzumaki se colocaba de puntillas, intentando ver que decía el libro, cuando estaba por responder su hija se adelanto.

-No, en ese país no... pero en muchos otros... hay aldeas ocultas de ninjas donde las costumbres son muy diferentes.-

Comenzó a explicar la Uzumaki con calma y tranquilidad. Kakashi inmediatamente aparto el libro fuera del alcance visual de su hija, la niña todavía tenía una inocencia que quería que conservará por ahora.
La Haruno asintió ante la explicación de su compañera de equipo, era algo sorprendente ver lo inteligente que podría ser si se lo proponía.

"Naruto... es la prueba viviente que se puede ser inteligente pero idiota al mismo tiempo"

Pensó el peli-negro, estrechando sus ojos ante la bicolor, mientras una gota de sudor bajaba por su cabeza.

Su calma fue interrumpida por un charco de agua cerca de ella. Inmediatamente se puso alerta, algo que noto su padre y su compañero.
El color de sus ojos, que si bien ya de por sí se cambiaron, ahora se tiñeron de rojo cual sangre con la pupila rasgada, sus bigotes se notaron más y sus dientes y uñas se afilaron, lista para la pelea.

Kakashi ya había sentido la presencia de dos personas antes, pero se había mantenido tranquilo, quería ver si su equipo era capas de darse cuenta sin el, punto para su cachorra.

***

Un fuerte gruñido salió de los labios de la Uzumaki, estaba asustada, pero decidida. No dejaría que el miedo se interponga entre su camino ninja.
Esos enemigos ya habían 'acabado' con su padre, su compañera estaba paralizada del miedo, el Uchiha estaba serio pero se le notaba también nervioso.

Sus enemigos ya estaban preparados para la pelea, burlándose de sus contrincantes.

-Mira hermano, ya dejan hacer ninjas a cualquier mocoso-

Y con esas palabras, atacaron.
Sakura fue el objetivo, Naruto fue el escudo. Interponiendose entre el ataque y su compañera, cubriendo su rostro con sus brazos, recibiendo el fuerte golpe en sus antebrazos, dañandolos e hiriendolos.

Aprovechando su descuido, contraataco.  Dándole una fuerte patada a su enemigo para apartarlo, punto clave, agarro las cadenas con su mano, sin importarle el dolor y las heridas que le provocaban las espinas de metal que tenían, de un fuerte tirón atrajo nuevamente a uno de los hermanos, haciendolo chocar con el otro.

Con sus kunais, atasco las cadenas entre ellas y el suelo, dejándolo inmóviles y desconcertados. Se miraron entre ellos, pensando que tal vez el otro tendría algún plan para escapar, miraron a los genins.
Sakura estaba frente al constructor, con un kunai en mano y una pose defensiva. Sasuke estaba más al frente de ellos, sonriendo arrogante. Naruto se mantenía sería y sin emociones, con una de combate y defensa.

Criada por El ninja que copiaWhere stories live. Discover now