En un mundo invadido por seres con un hambre insaciable , Taehyung y Jungkook deberán mantenerse unidos para sobrevivir y proteger a su hijo.
🏅#2 en infectados
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•|Capítulo 11|•
Jungkook después de todo no podía dormir, quizás lo hizo, pero no fue más de media hora aunque ya había perdido la noción del tiempo, el reloj viejo que colgaba en una de las murallas ya no servía, veía a su al rededor como todos descansaban, solo uno de ellos se mantenía despierto haciendo guardia al lugar, el soldado más joven, Mingi. Que por alguna razón únicamente se le acercó para llevarle una taza de té durante la noche. Abrazó sus piernas flexionadas, sintiendo el frío calarle hasta los huesos mientras veía a la nada de ahí fuera reflejarse en el vidrio sucio del edificio viejo en donde se resguardaban.
Solo esperaba que no faltara mucho para que el sol saliera nuevamente para continuar con su viaje. Las horas sin descansar parecían eternas, seguía sentado en el mismo lugar esperando a que el sueño llegara a él, pero a quien le mentía debía de estar alerta en caso de que apareciera algún infectado y atacara a su pequeño. No permitiría que nada ni nadie le hiciera daño aunque eso le costara la vida, además de no poder quitarse de la cabeza la muerte de Eunha, fue injusto aunque inevitable y nuevamente sintió aquel dolor punzante en su pecho que lo llenaba de tristeza limpia un par de lágrimas que brotaron por sus cansados ojos y suspiro para calmarse.
-Tienes que descansar. - escucha un susurro cerca de él reconociendo aquella voz de inmediato. Se abrazó más a sus piernas y no respondió. -Jungkook, me quedaré cuidando a Dae, ve a dormir un poco.
-No tengo sueño, lo intenté pero no pude. - Le responde en voz baja y ve cuando el castaño se sienta a su lado.
-Estaremos bien, te lo prometo. - Le dice nuevamente en voz baja pasando uno de sus brazos por la espalda de su exesposo, quien no se opone y se deja abrazar, dejando caer su cabeza sobre el pecho de Taehyung. - Descansa Ggukie.- Dijo una vez más acaricia su espalda para darle un poco de ánimo y abrigo.
De pronto sus ojos comenzaron a cerrarse, al sentir el calor del cuerpo de Taehyung cerca de él, sintiendo un poco de tranquilidad en aquellos brazos donde encontraba calma.
-Gracias. - Dice finalmente para recostarse en el colchón al lado de su hijo. Taehyung los cubre con una manta y se queda cerca de ellos para cuidarles el sueño.
Cuando sus ojos volvieron a abrirse curiosamente seguía siendo de noche, se sentó en él duró colchón y observó a su al rededor, todo se veía oscuro no había ruido y aunque hacía frío no le importó en lo absoluto, vio a su lado buscando a su hijo con la mirada, sin embargo, no lo encontró, acto que lo hizo levantarse de inmediato para encontrarlo.
-¿Dae?- Susurró mientras caminaba por un pasillo oscuro. -¿Hijo?- no hubo respuesta.
Curiosamente, aquel pasillo no estaba cuando llegaron al refugio, la oscuridad ahí era inmensa, infinita , solo podía guiarse tocando la pared con sus manos y por donde entraba el frío frente a el.
