EL JUICIO DE MINA (PARTE I)

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Dos semas, parecía que el tiempo pasaba relativamente mas rápido de lo que creían. Era la primera sesión de Seungmin, donde Jimin y Chan estaban esperando que le dieran la bandera verde y que el chico empezara a tener un mejor futuro.

La secretaria solo veía a las tres personas por sobre unas gafas, que no tenían aumento. Seungmin notaba eso, ¿Por qué usar gafas si no son para la vista?

Pero solo decidió ignorarlo, era algo estético y estaba bien. El sonido de la psicóloga saliendo con una joven y hablándole dulcemente hizo que los tres se girara.

Jimin asintió hacia los muchachos y ambos se pararon para caminar hacia la habitación.

—Hola Seungmin, espero y te sientas bien y como conmigo, tendremos algunas sesiones y después veremos como va tu avance ¿de acuerdo? —El chico asintió, cuando iban hacia la habitación la mujer detuvo a Chan. Poniendo su mano en el pecho del contrario, deteniendo su caminar. —Alto ahí fortachón, Seungmin debe tomar esta terapia solo, necesita desahogarse y si tu estas ahí no podrán soltar todo lo que necesito saber...para su tratamiento.

Seungmin miro con preocupación a Chan, pero beso su frente.

—Esta bien, te esperare aquí. ¿de acuerdo? —Seungmin asintió y se adentró, con la psicóloga resonando sus tacones detrás de él.

La mujer sonrio y le indico que se sentara y saco unas pequeñas hojas. Seungmin fruncia el ceño, el rostro se le hacía muy familiar, su cabello era de un negro muy oscuro, y sus ojos rasgados parecían no mantenerse estables, pues constantemente miraba a todos lados.

Seungmin sintió que solo era su paranoia. La mujer traía unas gafas, pero miro que no tenían aumento, Seungmin solo ignoro.

—Muy Bien Seungmin, empecemos con todo. ¿de acuerdo? Desde tu niñez hasta ahora, quiero escucharte...—La mujer sonreía. Seungmin alcanzo a ver que en la placa que estaba detrás de ella decía Dra. Lee Eun-Ji. Le fue curioso pues sería una coincidencia que la hermana fallecida de Jungkook también se llamaba así, pero tal vez solo era un nombre común y su paranoia le estaba jugando una mala pasada.

Seungmin suspiro listo para platicarle a la doctora todo lo que lo llevo a ella.

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La sesión termino a las dos horas, Jimin leía una revista de maternidad. Lo cual se le hacia un tanto extraño, puesto que el no tendría un embarazo normal y eso lo estresaba día con día.

Seungmin salió, con una sonrisa un tanto forzada. Y camino inmediatamente con Chan. El platinado vio la acción del castaño como algo normal, puesto que si loe dejaba con desconocidos mucho tiempo, el se ponía muy tenso.

—Bueno Seungmin, te vere la próxima semana. ¿de acuerdo? —Seungmin asintió y la doctora regresaría a su despacho, pero Jimin la detuvo.

—Disculpe, si es que mire. Yo estoy en cinta y quería saber si podría darme una sesión algún día de la semana y...—La mujer miro a su secretaria, Seungmin veía todas las acciones, desde la manera en que los ojos de la pelinegra le pedían ayuda a la de pelo corto.

—Si, ahorita la doctora esta saturada de sesiones, pero si tengo alguna vía libre le avisaremos. —Jimin miro confundido a las mujeres, pero asintió.

Los tres salieron del consultorio para ir a casa. Jimin estaba más irritable y antojadizo que antes así que pasaron a un lugar de comida rápida, Seungmin jugaba con sus papas y no comía en realidad.

—¿Todo bien? ¿quieres que te cambiemos a otro lado? Puedo decirle a Yoongi que te cambie y...—Seungmin tomo la mejilla de Chan para que se relajara y no dijera más.

LAS BESTIASHikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin