Limpiando tus lágrimas

Capitulo 100

La pareja se dirigió a la sala del trono con la esperanza de encontrar al señor del palacio. No los llamó esa mañana, lo que resultó extrañamente sospechoso y todos los sirvientes se mostraron evasivos con sus respuestas. Mientras caminaban por los pasillos, los dos observaron el entorno. Había una buena cantidad de gente, pero todos se mantuvieron en guardia ante estos extraños. Susurraban entre sí y desviaban la mirada. Shen Yuan pudo distinguir algunas palabras aquí y allá: "Son los cultivadores".

“¿Y qué pasa con los últimos?”

"No los he visto."

“El Señor los acogió.”

“¿Y aquí están los nuevos?”

“¿Por cuántos pasaremos?”

“Son jóvenes, no durarán mucho”.

“Igual que los demás.”

“Ojalá no se vuelvan locos como los anteriores”.

¿Los anteriores? A-Yuan asomó sus sentidos de súper cultivador. ¿Se volvieron locos? ¿Es por eso que el señor los encerró? ¿Por qué perdieron la cabeza? Las preguntas se acumulaban. Esto se estaba poniendo interesante.

Binghe y Shen Yuan finalmente llegaron a la sala del trono y se encontraron con un grupo de nobles. Todos hablaban en voz baja y miraban a su alrededor. Uno en el centro estaba vestido como el asesor principal; parecía irritado por algo. Apretaba los dientes y hablaba con voz grave.

Sus ojos se posaron en los chicos y de inmediato hizo un gesto para que todos los demás miembros del círculo se callaran. Todos miraron a los cultivadores pero no dijeron nada, parecían muy vacilantes y cautelosos a su alrededor.

Los dos grupos se miraron fijamente y se formó una extraña tensión, por lo que Shen Yuan decidió romper el hielo primero. Los saludó con una reverencia, Binghe hizo lo mismo y dijo: “Saludos, consejeros y nobles, somos cultivadores de Cang Qiong y estamos aquí para ayudar a su ciudad. Hemos venido a reunirnos con su señor principal aquí esta hermosa mañana según lo programado. ¿Estará cerca?”

El asesor miró a los muchachos de arriba abajo y luego hizo una mueca. Se aclaró la garganta y dijo: “El señor está lamentablemente predispuesto en este momento”.

“¿Predispuesto? ¿Qué pasó?”

—A mí también me gustaría saberlo —se quejó el asesor, con algo claramente pesando en su mente.

—Es importante que hablemos con él —intentó decir A-Yuan, pero el asesor simplemente se burló.

—Buena suerte con eso —resopló—. Llevo meses intentando convencer a mi señor, pero qué olvidadizo es con mis palabras... —Sus ojos se volvieron fríos e irritados—. De hecho, ustedes dos ni siquiera deberían estar aquí. Si son tan generosos como para verme como un profesional, deberían seguir mi consejo y abandonar esta ciudad.

"¿Disculpe?"

“¿No has oído lo que les ha pasado a muchos, si no a todos, nuestros cultivadores?”, preguntó. “¿Si alguno sigue con vida? Están muertos. Se los han comido. O han desaparecido. Qué divertido. Así que es demasiado peligroso que te quedes. Deberías irte de inmediato”.

“…Tu gente está muriendo.”

—Y tú también lo harás si te quedas —murmuró—. Es más probable que mueras tú que la gente común. ¿No ves que el asesino tiene como objetivo a gente fuerte y poderosa? ¡Y gana de alguna manera! Probablemente también con trucos desagradables. Yo, por mi parte, no sé por qué mi señor sigue arriesgando a gente como tú, pero, por favor, márchate ahora.