Capitulo Doce

31.4K 1.7K 205
                                    


Recorrí con mi mirada al edificio que estaba al lado mío, Drake había pedido que lo acompañará hasta la empresa de su familia y una de las primeras cosas que llamaron
mi atención fue el gran logo del edifico que anunciaba el nombre de la empresa. "The Henrie"

-Tiene un nombre corto y simple, me gusta -Opiné, cosa que pareció fascinante para Drake pues sonrió de inmediato. Entramos en el edificio para ir en dirección a su oficina, la cual estaba decorada con elegancia, ideal para Drake.

-¿Cuando me tomaste esa foto? -Pregunté sorprendida al ver que encima de su escritorio había un marco de fotografía dónde yo salía sentada en el césped que pertenecía al patio trasero de su casa.

-Cuando volviste a tu casa, revise las cámara de seguridad sabiendo ayer encontraría al menos una imagen tuya, quería sólo mirarte una vez más, entonces encontré esa y me fue inevitable no fotocopiarla más aún cuando fue grabada el primer día que fuiste a la casa conmigo.

Sonreí por sus palabras al mismo tiempo que sonido sonido del teléfono en la oficina se escuchaba. Drake contestó poniendo la llamada en alta voz.

-Señor Henrie -Dijo la secretaria desde la línea.- hay una mujer aquí afuera que necesita hablar con usted, dice ser una amiga suya.

-¿Una amiga? -Preguntó Drake con su seño fruncido luego de que la llamada finalizará-

-No sabia que tuvieras amigas -Levante una ceja.

-Yo tampoco -Confesó, poniendo su mano en mi espalda antes de que ambos saliéramos de su oficina.

La secretaria apuntó con su bolígrafo hacia unos sillón blanco, mismo que estaba siendo ocupado por una mujer pelinegra, a quién ya había visto en otra ocasión.

-¿Qué hace ella aquí? -Pregunté con mis brazos cruzado.

-¿Quién? -Preguntó él mirándome con desconcierto.

-Ella -Hice un moviendo con mi cabeza para que notará la presencia de Anastasia, quién caminaba hacia nosotros al notar nuestra presencia.

-No lo sé -Dijo entre dientes - pero déjame averiguarlo

- Buenos día -Ella saludo cuando se detuvo adelante de nosotros.

-¿Qué haces aquí? -Pregunté sin disimular mi molestia. Drake soltó un bufido al ver que yo había sido más rápida en hablar que él.

-Vengo hablar con Drake -Respondió con una sonrisa triunfante - de negocios, claro.

-No hay ningún negocio del que deba hablar y menos contigo

-Por supuesto que sí -Puso una mano sobre su cadera. -si no
quieres atenderme no lo hagas, pero entonces iré directamente dónde tu tío porque él si me escuchará.

-No -Drake apretó sus manos en un puño - harás que él te eche de aquí y encima se enfadara conmigo por dejarte entrar aquí.

-Entonces hablemos en tu oficina -Me miró por el rabillo del ojo -para tener más privacidad.

-Phoenix también puede... -Drake no termino de hablar porque ella lo interrumpió.

- Tú novia puede esperar -Rode los ojos en mi lugar - de todas formas sabrá nuestra conversación después, así que ahórrate tus reclamos y entremos de una vez -Ella fue la primera en ingresar en la oficina, moviendo sus caderas más de lo necesario.

-Phoenix... -Drake murmuró, provocando que mi atención ese posara en él.

-¿Entrarás?

-Si pero saldrá rápido, lo juro. Solo quiero ver que se trae entre manos ahora.

Mi esposo gruñón Donde viven las historias. Descúbrelo ahora