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PEETA POV
Entró a la habitación y rápidamente se metió bajo las colchas, por debajo de ellas tomo mi mano y me lo entrego.
-tengo miedo-dijo aferrada a mi pecho, mientras que sostenía la prueba de embarazo... positiva.
-todo saldrá bien-dije acariciando su cabeza, aunque también tenía miedo.
-Espy acaba de cumplir dos años-dijo poniéndose boca abajo apoyándose en sus codos, hizo su cabello hacia atrás preocupada-¿Cómo haremos con otro bebe? Estábamos bien...
-estaremos mejor-la interrumpí-ya lo hemos hecho antes, podremos volver a hacerlo-dio vueltas para quedar nuevamente sobre el colchón, me acerque a ella besando el costado de su cabeza-cinco es perfecto-se destapo un poco de la protección de las sabanas para mirar mi mano en su abdomen, coloco las suyas sobre ella, sonrió.
-esto es tu culpa Peeta Mellark-levante mis cejas, ella volteo su cabeza a verme-olvide tomar las pastillas por organizar tu cumpleaños, y además ya nunca usas condón- reí, enterré mi rostro en su cabello y la rodee más con mi brazo.
-tú me pediste que no lo usara, ¿no lo recuerdas?-negó con la cabeza divertida, mi mano se deslizo por debajo de su camiseta, tome de su cintura para que se pusiera de costado y así mirar sus ojos, notaba el brillo en su rostro, lo contemplaba, lo amaba-vamos a tener otro hijo-asintió-y lo amaremos como a los demás-tomo mi mano que se aferraba a su cadera y las observo mientras entrelazaba nuestros dedos...
Su brazo se enredaba en el mío ahora mismo, traía un vestido azul largo que se amoldaba armoniosamente a las curvas de su cuerpo, era la mujer más hermosa en el lugar, aunque ella pensaba que estaba demasiado gorda, en realidad solo su vientre había crecido...
Los primeros meses habían sido difíciles, extrañamente más difíciles que cuando tuvo a Espy o a Luna, náuseas casi todas las mañanas, mucho sueño, muchos antojos, su vientre creció de un día para otro y no paraba de hacerlo, y nosotros tampoco parábamos de hacerlo, mucho, más parecido a como se sentía cuando tuvo a Josep y Alex...
Ella me lo advirtió antes de que visitáramos a la doctora, al ser su cuerpo supongo que lo presentía, porque cuando oímos dos corazones latiendo, todas sus sospechas se vieron esclarecidas, tendríamos dos bebes, una niña y un niño.
-¿Cómo te sientes?-pregunto Haymitch abrazándola, Aarón había cumplido ya su sentencia, y a él le concedieron prisión domiciliaria, habíamos viajado hasta el 12 por la boda de Prim, era la primera vez que se veían en mucho tiempo, habían hablado por teléfono pero por fin tenerlo a su alcance, sabía que era lo único que la dejaría tranquila.
-bien-dijo separándose del abrazo mientras el acariciaba su vientre.
-creo que tendré que regalarles un televisor o algo por el estilo-dijo riendo y estrechando mi mano, tomo a Esperanza de mis brazos.
-papá- lo reto Katniss-no empieces, ¿Prim está arriba?-Haymitch asintió, ella se dirigió a las escaleras.
-¿te acompaño?-se giró para mirarme con una mano en su vientre, suspiro.
-Peeta, tampoco empieces-sonreí-mejor vigila que los niños no rompan nada-al mismo tiempo que lo decía, oímos como cosas caían en la cocina, ella puso una mano sobre su frente un momento y subió las escaleras...
Prim estaba radiante, vestida de blanco, acompañada por Haymitch hasta Aarón. La ceremonia fue hermosa, fue en la preciosa y no solo me recordó cuando nosotros nos casamos, sino también la boda de sus tíos, cuando éramos solo niños, la tenía a mi lado ahora también, pero podía agarrar su mano, soltó algunas lágrimas, le preste mi hombro para que pudiera llorar...
