Capitulo 8: Un cambio

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-necesitamos cambiar algunas cosas aquí Peter- le dije mientras buscábamos algo de comida

-¿cómo qué?

-el lugar para dormir por ejemplo, no puede ser en la tierra, hay que hacer algo, tengo dura la espalda además ¿que pasara si llueve?

-aquí no llueve- me dijo como si fuera algo obvio-pero es verdad, buscáremos maderas y armáremos pequeñas cabañas

-¿de dónde sacaran madera?

-es mi isla Jane, la conozco de orilla a orilla-me dijo muy seguro, le sonreí y él hizo lo mismo

Cuando regresamos Peter llevo a los niños más grandes y a Félix a buscar la supuesta madera y yo me quede con los más chicos preparando algo de comer, solo aplaste algunas de las frutas que habíamos conseguido, esta isla necesitaba un cambio y urgente.

A la hora regresaron con la madera bajo los brazos y sobre los hombros y algunas en una... una ¿carretilla?

-no diré nada al respecto-negué con la cabeza haciendo que Peter sonriera-coman algo y descansen un poco

-pueden buscar algo para unir las maderas ya que no hay martillos- me dijo Mike

-¿que son martillos?- pregunto Félix y todos volteamos a verlo y empezamos a reír

-que Peter te explique, vamos niños-hice seña a los niños para que vengan

Después de caminar, varias veces en círculos, conseguimos lianas largas y fuertes para sostener la madera, al regresar los chicos estaban comiendo y las maderas apiladas por tamaño

-¿cómo haremos esto?-me preguntó Mike

-primero vamos a dividir quien estará con quien en las "cabañas", no creo que alcance para todos, así que los gemelos por un lado, Joel, Mike y James por otro, Peter y Félix y yo

-alto, ¿por qué tu sola?

-porque soy mujer y ninguno de ustedes entiende lo que es ser una, así que sin quejas.... Juntes cinco tablas cortas y apílenlas del lado más angosto y las atan, hagan eso tres veces para hacer las paredes-les dije y así lo hicieron

Y así lo hicieron, apilaron 5 tablas y armaron las paredes,

-¿falta mucho?-pregunto Nick

-así es Nick pero podemos dormir y seguir mañana-le dije dándole una sonrisa que luego de me devolvió

Todos estuvieron de acuerdo y se fueron a dormir excepto yo, daba vueltas sobre la tierra pero no podía dormir, así que me levante a caminar, di varias vueltas hasta que termine en la laguna de las sirenas, me senté en una piedra a ver la paz de la laguna cuando una sirena saco su cabeza y se acercó hasta a orilla

-está de más decirte que no queremos que acabes con Pan, no cuando parece haber cambiado-me dijo en un tono serió, más una amenaza que como algo obvio

-no lo haré, no quiero, no es el mismo de antes me atrevo a decir sin haber conocido al antiguo Peter

-¿lo amas Jane?- me preguntó la sirena rubia

¿Lo amo? No sabía que decir, no estaba segura, de que me gustara si estaba segura, es un chico increíble, sus ojos, su cabello, su risa, su sonrisa, su forma de ser, como a veces alza una ceja creyéndose superior.

Me acuerdo que lo conocí en el bosque encantado y parecía que era el antiguo Peter, el malo, el tirano, el que daba todo por magia y por vivir eternamente, el que quería robar el corazón de Henry, el que quería vengarse de su hijo por lo que le había hecho y ahora es otra persona, es la primera que no se interesa en mi poder, me ayudo con mis recuerdos después de la maldición

-no lo sé, pero no le haré daño, ni dejaré que Félix lo haga

-realmente eres la esperanza de Neverland- termino y volvió a meterse al agua

Me quede un rato en la piedra mirando al cielo, las estrellas parecían estar a punto de estallar

-¿con lindas cierto?- la voz de Peter sonó detrás de mí y rápidamente me gire

-si pero parecen que fueran a explotar- dije mirando al cielo de nuevo

Él se sentó a mi lado y miro al cielo- si así parece- dijo dándome la razón- la isla es diferente ahora, la madera de esta mañana apareció cerca de aquí, cunado la visitaba en los sueños a la isla vi este lugar pero cuando vine por primera vez no se veía como en mi sueño y el día que me trajiste aquí mientras dormían vine a ver y estaba de nuevo como en mi cabeza, es algo así como un pozo de deseos ¿quieres verlo?

-me encantaría

Se levantó y extendió su mano para ayudarme a pararme, la tome y fuimos hasta el famoso pozo de los deseos de Neverland

Y tal como Peter dijo en medio de un campo que no parecía pertenecer a la isla estaba un pozo no muy profundo

-¿Cómo funciona?

-te acercas y pides el deseo que emane de tu corazón- me dijo. Mire el pozo y la verdad no tenía ningún deseo para pedir- ¿no tienes ningún deseo Jane?

-la verdad- gire a verlo, sus ojos brillaban con la luz de la luna y no dejaban de ver los míos- es que no

-yo si- dijo acercándose más a mí- un pequeño deseo que vengo guardando desde que me sacaste de la caja en Storybrooke y vi de nuevo tus ojos marrones, que al darles la luz se vuelven más claros- termino quedando tan cerca de mí que para verlo tuve que levantar la cabeza porque es más alto que yo

-¿Cuál es ese deseo Peter?- dije en un susurro

El sonrió y llevo una mano a mi cintura y la otra a mi mejilla- deseo besarte Jane- dijo y no me dio tiempo a decir que si porque ya lo había hecho

Sin pensarlo dos veces correspondí al beso y lleve mis manos a su cuello y el bajo la que tenía en mi mejilla hasta mi cintura donde posaba la otra. Sus labios se movían lentamente y sabían bien como guiar los míos, que eran bastantes inexpertos.

La verdad es que este es mi primer beso y con 17 años era algo medio patético pero de donde yo venía y de la manera en la que me criaron nunca vi a los chicos o a una relación con ellos algo de suma importancia aun así me lo imagine de muchas formas, pero en una isla donde secuestraban niños, había sirenas, no llovía y donde antes vivió un terrible villano que se volvió joven por abandonar a su hijo con tal de tener una vida perfecta y poder nunca formo parte de mi imaginación, pero ya está hecho y no hay vuelta atrás

Me beso de manera dulce, tierna para nada agresiva y desesperada, nos separamos por falta de aire, lo mire y me sonrio e hizo lo mismo, pero sobre su hombro vi a Félix parado mirando con una enorme sonrisa y recordé sus palabras

Serás su propia ruina, porque cuando se dé cuenta de que el amor es una debilidad ya no quedara nada de el en esta isla y yo seré quien la gobierne



Había Una Vez En NUNCA JAMASWhere stories live. Discover now