Capitulo 2

13 3 0
                                    

Pero quizás no haya sido nada, solo imaginizaciones de un adolenceste hormonal, por lo que me planteo olvidarlo y lo intento, de verdad que lo hago y no si es porque me ha dejado marcado esa mirada o porque la clase de matemáticas es demasiado aburrida, el caso es que lo único que pasa por mi cabeza des la mirada de Marko y sin querer me contemplaba a mí mismo mirando a Marko y seguí así hasta que me obligaba mentalmente a mí mismo a desviar la mirada, pero al rato de desviarla otra vez me llegaba la imagen de sus preciosos ojos verdes y sin quererlo otra vez estaba mirándolo, pero él nunca miraba a mi dirección, en verdad no miraba a ninguna otra parte que no fuera su blog de dibujo por lo que no se dio cuenta que un completo desconocido, con el que solo ha mantenido el contacto por un breve momento y ni si quiera se han molestado en saludarse dignamente, le está observando de una manera casi obsesiva, cosa que agradezco mucho ya que sería algo violento que al presentarse decir "Hola me llamo Ryota, soy al chico con el cual mantuviste por muy poco tiempo contacto visual y luego se tiró toda la hora de matemáticas observándote como si de verdad estuviera completamente loco, espero que seamos buenos amigos" y mientras buscaba otras razones por las cuales no debería mirarle se acabó la hora de matemáticas.
Koji se acerca a mi pupitre a hablarme de algo, a lo que de verdad intentaba prestarle atención pero era un tema tan poco interesante a comparación de como Marko se quedaba observando su mochila antes de cogerla, ponérsela encima de sus piernas, sacar un libro, meter otro, cerrar la mochila

-¿Piensas hacerme caso en algún momento?- pregunta Koji y obligándome apartar la mirada de los movimientos de Marko dirijo la mirada a la cara enfadada de mi amigo

-Perdonaaa- digo alargando un poco las silabas- ¿Qué decías?- pregunto pero sinceramente me importa bien poco lo que me tenga que contar mi amigo, sé que eso suena un poco egoísta, pero es lo que hay.

-Nada, déjalo ¿Qué mirabas tan embobado?- me pregunta observando toda la aula como si así fuera a encontrar la respuesta a su pregunta

-No miraba nada, solo estaba cansado de tu parloteo de porque la chica de internet no va a ser un viejo, gordo y calvo- digo cruzando los dedos porque fuera de eso de lo que estuviera hablando y no de cualquier otra cosa

-Umm... vale, lo siento,-dice no muy seguro, pero lo conozco y sé que no va a seguir preguntando- ¿De qué quieres hablar?- me pregunta apoyando los codos en mi mesa y observándome

Nos ponemos a hablar de que vamos a hacer esta semana, sin mencionar ni una vez su cita del viernes, resulta que lo que queda de esta semana, que no es mucho, no vamos a poder quedar por las tardes, ya que tenemos que entrenar, yo atletismo y el natación y tenemos algunos exámenes importantes, seguimos hablando de cosas triviales, hasta que llega el profesor de lengua y empezamos la clase.

Cosa Nostra Onde as histórias ganham vida. Descobre agora