CAPÍTULO 27: CARTAS...

80 1 0
                                    

*JANET (PV)*

-¿Se puede saber qué te ha pasado? -preguntan sorprendidos acercándose a mí con unas caras que parecen un poema.

-Me hice daño -

-¿Cómo? ¿Cuándo? -pregunta mi padre enfadándose más por cada segundo que pasa.

-El tercer día en Los Ángeles, estábamos patinando en una pista de hielo, al principio todo iba bien pero me caí y un chico me cayó encima y me he roto el tobillo -explico poniendo cara de pena.

-¿El tercer día? ¿Y se puede saber porqué no nos has avisado? -pregunta mi padre.

-Porque sabía que si lo hacía me obligaríais a volver y quería disfrutar de mi regalo de cumpleaños -

-¿Tú ves normal lo que has hecho? Ocultarnos algo tan grave por pensar solo en ti -me reprocha mi padre.

-No he pensado tan solo en mí, lo he hecho porque no quería preocuparos, estoy bien -

-¿Qué estás bien? No sé si te has dado cuenta pero vas en silla de ruedas y tienes un yeso que te cubre media pierna -dice cabreado.

-Bueno ya está bien, creo que ella ya está suficientemente arrepentida como para escuchar más reproches -me ayuda Jay.

-Sí, estoy de acuerdo con ella -le apoya Bobby.

-Lo importante es que haya disfrutado de su regalo de cumpleaños -interviene Niall.

-Ha pasado una semana genial con Liam y eso es lo que importa, la pierna son daños colaterales además ahora ya está en casa y no por eso hay que hacérselo pasar mal -dice Louis.

-Sí, además estoy seguro de que Liam la habrá cuidado mejor que ningún médico en este mundo -asegura Zayn.

-Puedo dar fe de que Liam me ha tratado súper bien, ha hecho cosas por mí que nadie antes había hecho -aseguro.

-Kate ¿Tú qué dices? -le pregunta mi padre a mi madre.

-Yo estoy de acuerdo con ellos, vale que ha hecho mal en ocultárnoslo pero la gente comete errores y conozco a Liam como para estar segura de que la habrá cuidado muy bien -contesta mi madre con una pequeña sonrisa. Todos miran a Liam para que hable y yo le doy la mano en señal de apoyo.

-Yo siento más que nadie lo que le ha pasado a Janet y, aunque yo no estaba de acuerdo, ella decidió quedarse en Los Ángeles para seguir disfrutando de nuestras vacaciones aunque eso significó ocultárselo a ustedes pero ¿Saben? Me alegro de que lo hiciera porque han sido los mejores días de mi vida -dice Liam con mucha tranquilidad y esa dulzura tan característica en él. Todos miran a todos y noto como unas sonrisas aparecen en los rostros de Niall, Louis, Zayn, Bobby, Jay y mi madre. Ahora solo queda mi padre.

-Está bien... -accede sonriendo -Dejemos a un lado este pequeño accidente y vamos a lo importante ¿Os lo habéis pasado bien? -

-Papa -digo sonriendo y nos damos un abrazo al que se unen todos los demás.

-Nos lo hemos pasado muy bien -contesta Liam alegre.

-Me alegro, ahora venga, fuera de aquí -dice mi madre y Liam y yo nos miramos confusos.

-¿Cómo? ¿Irnos? ¿Por qué? -pregunto extrañada.

-A vuestra nueva casa -contesta Louis.

-Creo que nos hemos perdido algo -dice Liam.

-Veréis al lado de nuestro piso, en la puerta de en frente, hay otro piso libre así que ¿Os apetece mudaros a nuestro lado? -pregunta Niall alegre. Liam y yo nos miramos sorprendidos pero sin dejar de sonreír.

-Claro -decimos a la vez.

-Pues venga -dice mi padre dándonos la llave. Liam y yo la miramos sin acabar de creérnoslo. Noto que alguien cojo mi silla y empieza a moverla hacia la puerta. Giro la cabeza rápidamente y me encuentro a Niall mirándome divertido.

-No, me niego a que me lleves porque eres capaza de tirarme -bromeo y él tan solo ríe.

-No me tientes -contesta alegre. Liam me da la mano y empezamos a caminar todos juntos hacia nuestra nueva casa. Liam y yo no nos quitamos la vista de encima mientras que Niall me da vueltas de un lado para el otro con la sillita, poniéndome de los nervios.

-Niall, como siguas así me van a entrar ganas de vomitar y no es culpa mía si cae accidentalmente en tu ropa -amenazo mirándole y él para de golpe, volviendo a empujar pero esta vez de una forma normal. En menos de veinte minutos llegamos a un bloque de apartamentos muy lujoso.

-Ya hemos llegado -anuncia Zayn divertido. Nos acercamos al portal y ahí nos paramos.

-Bueno cariño, te dejamos para que estéis más tranquilos ¿Vale? -dice mi madre.

-Los chicos se encargaran de enseñártelo bien ¿Estás en buenas manos, verdad? -dice mi padre.

-Claro que sí -contesta Louis por mí. Nos despedimos de mis padres, de Bobby y de Jay y ellos se alejan para volver a casa. Cuando ya no los vemos Niall vuelve a mover la silla y entramos. Subimos al ascensor y nos bajamos en el último piso. Salimos y empezamos a caminar por el pasillo, a la izquierda está la puerta que da a la casa de Niall, Louis y Zayn y a la derecha la puerta que da a la nuestra. Nos acercamos y se paran en la puerta.

-¿Preparados? -pregunta Louis mirándonos y los dos asentimos. Abren la puerta y Liam coge mi silla para entrar los dos juntos. Un pequeño recibidor muy bonito nos recibe para dar paso a un enorme salón con un gran plasma y sofás alrededor, a un lado de este hay una mesa bastante grande con sillas que está al lado de una cocina enorme. Vamos por un pasillo y encontramos una habitación bastante grande con una gran cama de matrimonio en el medio y un baño a la izquierda. Además también tenemos una sala pequeña donde hay un gran escritorio, es como un despacho.

-¿Te gusta? -pregunta Liam cuando volvemos al salón.

-Es perfecta -contesto sonriendo.

-Bueno tortolitos aquí ya hemos cumplido, así que os dejamos intimidad para que podáis hacer vuestras cosas -dice Zayn con una sonrisa juguetona.

-No, no seáis tontos, quedaros a cenar hombre -les intento convencer.

-Vale -accede Niall alegre.

-A ti todo lo que implique comida te va bien -bromea Liam y se lleva a Niall hasta la cocina. Mientras ellos hacen la comida y Louis preparar la mesa Zayn y yo nos quedamos hablando cerca del sofá.

-Estas cartas son para ti, te las dejo un tal Harry Styles creo -dice dándomelas.

-Ah... Gracias -contesto nerviosa.

-¿Quién es? -

-Nadie, un antiguo amigo -miento. Vamos a cenar y cuando acabamos nos tumbamos todos en el sofá para ver la televisión. Bueno sinceramente hacemos de todo menos ver la televisión, hablamos de cosas sin importancia y charlamos animadamente de muchísimas cosas. La noche va pasando y nosotros seguimos hablando y cada vez siento que mis pestañas me pesan más hasta que me quedo completamente dormida. 

She's The OneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora