El otro lado (Fanfic TVD - Delena)

Capítulo 5

Elena estaba en el Grill tomando un café con su amigo Caroline cuando Bonnie entró en el local para unirse a ellas:

-Hola, chicas –les saludó la recién llegada-. ¿De qué hablabais?

-Del nuevo novio de Elena –le dijo la rubia con una sonrisa perfecta.

-No es mi novio –intervino la aludida.

-Pero desearías que lo fuera –le picó Caroline divertida al ver el rubor de las mejillas de esta.

-¿De quién se trata? –curioseó Bonnie ilusionada al ver que su cuñada había conocido a alguien especial.

-Un chico del pueblo, Damon Salvatore –respondió la chica Gilbert.

-¿Salvatore? ¿No son los que tienen una casa de huéspedes a las afueras del pueblo?

-¿Conoces a Damon?

-No estoy segura, pero sí conozco un Salvatore. Se llama Stefan.

Elena reconoció ese nombre como el del hermano de Damon.

-Por un casual no sabrás dónde está la casa, ¿verdad?

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Esa misma tarde, aprovechando que libraba en el trabajo, la joven Gilbert se dirigió en coche a la casa Salvatore. Al llegar a la puerta se detuvo muy nerviosa, sin saber si llamar o no, hasta que finalmente tuvo la valentía de hacerlo.

La chica se quedó extrañada al ver que quien le recibió era un anciano de unos 60 años.

-Buenas tardes, ¿querías algo, joven? –le preguntó el hombre amablemente.

-Perdone, creo que me he confundido. Una amiga mía me dijo que Stefan Salvatore vivía aquí.

-Y está en lo cierto, yo soy Stefan.

-Entonces, ¿Damon es pariente suyo?

-Era mi hermano.

La joven no sabía lo que la desconcertó más, si que hablase en pasado o que el hermano de Damon fuese un anciano.

-¿Por qué preguntas por él? –quiso saber el hombre, igual de confuso que Elena.

-Quería hablar con Damon, eso es todo.

-Me temo que eso no va a ser posible, mi hermano murió hace 40 años.

Como la chica parecía estar en shock, que no se lo creía, Stefan le invitó a entrar y le mostró una foto antigua en la que un Stefan más joven abrazaba al Damon que ella conocía.

-No es posible... -murmuró Elena aún sin creerse la realidad que tenía ante sus ojos.

-Eres muy joven, ¿cómo es que sabes de mi hermano?

-Yo... tengo que irme.

Elena no iba a decirle que estaba viendo a su hermano muerto, era una locura. Una que ni ella misma comprendía.

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Intentando comprender lo que estaba sucediendo, queriendo comprobar si estaba delirando o no, Elena condujo hacia al cementerio y entró en la cripta de la vio a Damon salir cuando se conocieron, aquella que pertenecía a los Salvatore.

La puerta estaba abierta y el interior se veía poco cuidado, como si hiciese tiempo que nadie acudía a visitar a sus seres queridos, como si nadie se preocupase en cuidar el lugar. Había varios nichos en las paredes, algunos tan antiguos que casi se había borrado la inscripción. Los nichos se remontaban a la época en que los Padres Fundadores llegaron a Mystic Falls. Pero, obviamente, había uno en particular que llamó la atención de Elena, uno en el que se leía lo siguiente: