II -Violín

78 10 0
                                    


Me encuentro en este sitio, pensando si habré hecho bien al venir aquí. Al pensar si suicidarme en este momento sería lo correcto. Me encuentro destrozado, derrotado, desgastado, roto... Tal vez como las cuerdas de este viejo violín, ese que me regalaste en aquellos tiempos, donde mis ganas de componerte melodías de cualquier tipo, eran muy grandes.

Acordes y melodías, versos en poesías, todo eso acompañaba mi día a día, en los que todo a ti te componía. No recuerdo cuándo quise ser solo para ti, no recuerdo ese momento en que quería estar siempre para ti. Pero no importa, lo que importa es que a mi lado nunca más volverás.

Golpeo una de las vigas del puente, al darme cuenta de cuán idiota fui al creerme tus mentiras. No te miento, fui feliz al creer que eran verdades. Me sentía en los cielos al descifrar cada uno de tus detalles, al ver lo que ocultabas detrás de tu maquillaje; pero me desplomé y caí al cielo, arrancaste mis alas y perdí el vuelo. Duro el impacto contra el pavimento, que se rompió, dándome paso al infierno, así como mis sueños, que yacen en el olvido, muertos.

Fantasía rota, corazón destrozado. A mí recurre siempre, la pregunta de por qué no estás a mi lado. Fueron tantos buenos momentos, en los cuales, juro, más de una vez me faltó el aliento para seguirte, para seguir tu paso, para mantenerme a tu lado. Más de una vez tropecé, más de una vez me levanté, quería mantenerme a tu lado, no podía seguir sólo, no quería quedarme en el abandono. Pero, sin darme cuenta, caí en el olvido, caí en ese pozo, sin fondo, donde mi corazón murió.

Quisiera decirte que no me dolió, pero sería mentir. Podría decirte que no compongo más música gracias a ti, pero sería dejar en el abandono a este pequeño violín. Cuyas cuerdas están desgastadas por el uso, cuyas melodías son formadas por la tristeza y la melancolía, por mis ganas de acabar con la vida y encontrar una salida.

¿Te lo he contado alguna vez? Me gusta este puente en especial. Tal vez porque es lo suficientemente alto como para no sobrevivir si uno cae, o tal vez por el diseño de su arquitectura. No lo sé. Me encanta este puente porque aquí nos dimos nuestro primer beso. Llovía, pero no nos importaba, estábamos tú y yo, en un mundo donde no corría el tiempo. Llovía y nos quedábamos sin aliento, nuestros corazones se encontraban latiendo y nuestros labios no paraban de bailar entre ellos. Pero debí saber que te apartarías; tus labios dejaron a los míos, así como tu cuerpo dejó al mío.

Muchas veces te dije que te defraudaría, que no era lo que siempre querías, que de mi lado, tú te apartarías. Era cierto, lo sabía cómo si lo hubiese vivido antes, pero no quería que ocurriera, no quería que de mi lado tú te fueras. Nunca entenderé por qué quisiste destruirme de esta cruel manera. Pero entiendo que sólo quisieras experimentar el calor en el invierno.

"—Si sales por esa puerta, no vuelvas, por favor. Si te vas, no vuelvas. No aguantaría quedar nuevamente destruido." Te dije aquella noche... Me hiciste caso y te fuiste, dejándome vacío, incompleto, sin aire y sin ganas de continuar. Pero aquí sigo, intentando sonreír, aunque por las noches siempre he de llorar.

No pensé que me afectaría tanto el tenerte en un instante y al siguiente ya no. Pero la tristeza invadió mi cuerpo, dejando solo una imagen de ti en mi cabeza. Teniéndote a ti era feliz, estando sin mí, tú eras feliz. ¿Cómo podías fingir tan bien ese amor que tanto me mostrabas? ¿Cómo es posible fingir ese sentimiento que muchas veces trae alegría?

Quiero llorar hasta sangrar, que mis lágrimas se las lleve el viento, así como mis sentimientos. Quiero odiarte toda mi vida, pero no dejo de amarte y mi corazón no te olvida. Joder, ¿qué debo hacer para que entiendas que siempre te amaré? Aunque haya dicho que nunca me enamoraría.

Eras mucho más que la luz de mis días, pero ahora sólo sacas de mí melodías tristes y vacías; melodías de dolor y de agonía. No te miento, me siento como la mierda, pero quizás nunca te des cuenta.

Mi muerte llegará, lo tengo seguro, pero quisiera morir a tu lado, aun cuando me has dejado destrozado. Quizás no sea el mejor, pero admito que fuiste mi gran amor.

Moriré pronto, lo sé, tu recuerdo me mata lentamente, sin yo poder hacer nada. El sufrimiento se apodera de mí, al ver que el espacio vacío junto a mí, al notar el vacío en mi corazón, al sentir ese nudo en la garganta, que anuncia que las lágrimas pronto llegarán.

Tristes Acordes Soñados.    |1er lugar en los Toxic Awards|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora