FRICTION

Capítulo 2

Bueno, bueno, Frictioners... ¿Listas para conocer a las chicas? ¡Más os vale que sí, porque aquí están!

Mientras tanto, al otro lado del lago cerca de su orilla, un grupo de chicas acompañadas por el pequeño Noah, acampan en un claro del bosque.

—¡La madre que me parió! —dice Mey mientras se pelea con la esterilla arrojándola a un lateral enfadada —. ¿Quién me mandaría haber aceptado venir al culo del mundo para tener al niñito contento? —se lamenta en alto.

—Tego frío —se oye una voz infantil y Mey se gira, encontrándose a Noah completamente desnudo, dando saltitos mientras se abraza a sí mismo.

—¿¡Pero se puede saber qué haces desnudo!? —grita Mey llevándose las manos a la cabeza —. ¿Acaso tu hermana no te ha dicho cómo debes vestirte?

Él se limita a negar con la cabeza, y Mey se dirige a recoger la ropa del pequeño Noah desperdigada por la zona de acampada. Resignada ante la situación de verse como canguro por culpa de su querida amiga Alice Smeed, quien se ha tenido que marchar a una convención de tatuadores. Y dejando a su compañera de piso Alice Cooper sola durante unas semanas.

Agarra al pequeño para ponerle la ropa, primero el calzoncillo de Bob Esponja. Noah se agita intentando taparse, muerto de frío, y Mey resignada mira a su alrededor buscando ayuda.

—¡Quelo a Ali! —se queja Noah, haciendo un puchero que indica que pronto va a echarse a llorar.

—Ay no, nada de lloros —se alarma sin saber como poder llevar la situación Mey.

—Pelo Ali, y Liam... —balbucea, y vuelve a abrazarse a sí mismo —. Tego frío.

Dakota, viendo el panorama, se aproxima a ambos para intentar que el niño se tranquilice.

—Viste al niño rápido, Mey —dice Dakota acercándose donde ellos están —.Va a morir de hipotermia.

—¡Joder, que no es tan fácil! —exclama Mey —. Por algo es que no quiero tener hijos... —murmura.

Viendo que Noah empieza a tiritar de frío, Mey suspira con resignación.

—¡Ponme ropa! —le exige el pequeño a Mey, enfadado.

—Vamos, Mey, ponle ropa, pobre niño —dice Dakota mirando a Noah, quien sigue tiritando de frío.

—¡Ya voy!, y tú ya podias ayudar y no quedarte mirando como una mera espectadora. Tráeme el pantalón y los zapatos.

Dakota rueda los ojos y suspira indignada por la orden de Mey.

—Ya —dice de mala gana.

Con bastante poca paciencia termina de vestir al niño, el cual sale disparado a explorar la zona.

—¡Hey!, ¿pero a dónde vas? —grita alarmada Mey viendo como se escabulle Noah.

—¡Un pajalito! —exclama el niño, emocionado.

—¡Pero ve a buscarlo antes de que se te escape! —exclama Dakota sentada cómodamente, mientras señala en la dirección que Noah corre —. El niño se escapa y Alice te mata— cruza sus piernas mientras levanta las cejas.

Cuando quieren darse cuenta, Noah es una silueta apenas visible adentrándose en el bosque, corriendo de forma descoordinada por la emoción.

—Buff, callate y ayudame a ir a buscarlo. ¿Y se puede saber donde están el resto de las chicas? —pregunta mirando a su alrededor comprobando que no hay nadie cerca —. Con lo bien que estaría yo ahora en Londres preparandome para ir a Amika y pudiendo estar en los brazos de algún macizo. Pero no, estoy aquí en el culo del mundo corriendo entre árboles buscando a un crío en su lugar.