My Bad Boy (Editando)

Capítulo 14

"Juliette"

No me sorprende cuantas veces he llorado por él, también no me sorprende cuantas veces me ha destrozado.

Lo más impresionante de es que no aprendo la lección, debería alejarme de él de una vez por todas pero no logró hacerlo, siempre vuelvo a caer.

Pase toda la noche triste sólo mi almohada y yo pues Eric decidió dejarme sola después de que se lo pidiera. Claro que no sin antes hacerle prometer que no le diría nada a mis hermanos.

Tengo por seguro que mañana despertaría con un gran dolor de cabeza y unas ojeras horribles.

Y por supuesto que al día siguiente me levante con el peor dolor de cabeza de mi vida, después de tomarme una pastilla comencé con la rutina de siempre, realmente no quería ir a clases pues no me apetecía verlo, no podría siquiera mirarlo a la cara, me daba miedo.

Salí de mi habitación para ir a desayunar percatandome que mamá no estaba en casa  ya que todo estaba intacto por lo cual opté por comer un poco de cereal.

— Buenos días Julls — Eric besó mi mejilla mientras se sentaba a mi lado.

— Buenos días — sonreí a medias — ¿quieres un poco de cereal? — le pregunté dispuesta a servirle un poco. Lo observe detalladamente y tenía unas ojeras peores que las mías, traía puesto un pantalón deportivo negro junto a una sudadera del mismo color, su cabello despeinado y sus mejillas levemente sonrojadas.

— No gracias, no tengo hambre — me dedicó una media sonrisa.

— ¿Pasa algo? — dejé de lado mi desayuno — Te vez mal — lo observé fijamente acariciando su mejilla.

— No dormí muy bien que digamos — rió levemente — Ayer discutí con mi novia —.

— Oh Dios — lo mire apenada — no te preocupes Eric, todo se va a arreglar pronto — lo abracé fuertemente. Él y yo nos encontrábamos en un momento de depresión y no había nada mejor que apoyarnos.

— Gracias Julls te quiero —  me dijo para después besarme la frente.

Al final lo convencí de desayunar algo ya que no había comido nada en absoluto.

Quizá si no conociese a Eric de esta forma me hubiera enamorado de él, realmente es un chico de ensueño; divertido, guapo, amable, inteligente. Todo un comodín.

"Jessey"

La peor sensación de la vida es la jodida resaca, quizá haya sido mala idea ir al bar a embriagarme y mucho peor traer a Charlotte a mi apartamento.

No puedo llevar a las chicas con las que quiero enredarme a casa ya que tengo una hermana pequeña, además le tengo respeto a mi casa aunque no parezca. A la única chica que he llevado es a Juliette...

— Buenos días — besó mis labios para después acariciar mi pecho desnudo.

— Buenos días — le dedique una mueca, busque mi cajetilla de cigarros y encendí uno.

— ¿Iras a clases hoy? — preguntó mientras observaba como soltaba el humo de mi boca.

— ¿Deberia? — la miré con el ceño fruncido.

— Pues si supongo que deberíamos presumir que ya hemos regresado a ser la pareja más bonita de todas — gruñi. Detesto que haga eso pues siempre quiere ser la mejor en todo. Charlotte es hermosa lo admito, pero es un horrorosa por dentro.

— Vaya eso me da tantos ánimos — dije sarcásticamente. Me levanté poco a poco y me dirigí a la ducha. Después de unos minutos salí para encontrarme a Charlotte sumergida en su teléfono.