Capítulo 25 - Pijamada

65 14 6
                                    

Paige se adentró más en su saco de dormir. Sandra estaba abrazando a su peluche.

-Yo creo que Robert es muy lindo -opinó Ruth desde su cama.

-A mí me gusta más Pierre -dijo Sandra, que llevaba puesto un pijama rosado.

Las tres chicas estaban en una pijamada en casa de Ruth. Paige y Sandra habían llevado sus propios sacos de dormir.

-¿Y a ti, quién te gusta? -le preguntó Ruth a Paige.

-Nadie -le respondió secamente la chica.

-¡Vamos! Sabemos que te gusta alguien. Somos tus mejores amigas -replicó Sandra lanzándole el peluche a su amiga.

-Si les digo, se van a burlar -farfulló Paige.

-Te juramos que no nos burlaremos -dijo solemne Sandra. Ruth la apoyó.

-Nada de lo que digas saldrá de está habitación -le aseguró Ruth.

-Está bien...-comenzó Paige -. Me gusta Matthew.

El silencio se apoderó de la habitación de Ruth. Tanto ella como Sandra no sabían qué decir. Paige se sintió avergonzada.

-¿Pero...por qué Matthew? -se atrevió a preguntar Sandra.

-¿Cómo que por qué? ¡Porque sí, porque me gusta! -respondió indignada.

-Pero a él le gusta Louise Wiegand -dijo Ruth.

-¡Ni me hables de la recepcionista! -gruñó.

Sus amigas no entendían. No entendían su amor hacia Matthew y su odio hacia Louise. Paige lo amaba desde hace mucho tiempo en secreto. Antes de que la recepcionista y él fueran novios. Paige sentía profundo rencor contra Louise. Le había quitado a la persona que amaba, ¡y más encima era mala novia! Su relación era banal, monótona. Por ese motivo Matthew se había besado con Prue el día de su tercer cumplemés con Louise.

-Pero Louise y Jason parece que andan en algo. Tengo que admitir que igual se ven tiernos juntos -opinó Sandra.

-¿Se acuerdan cuándo Jason se enfureció contigo -dijo Ruth indicando a Paige -en la fiesta de Thomas?

-¡Sí! -bramó Paige -. La verdad es que prefiero que Jason se quede con Louise. Así yo me podría quedar con Matt. He sido su amiga desde muy pequeños, pero sólo me mira con ojos de amistad.

-Sabes...-empezó Sandra - podrías hacer de una especie de cupido con Jason y Louise.

Paige lo pensó en silencio durante unos segundos, luego abrió los ojos, brillando.

-Tienes razón, amiga -dijo Paige -. Además, no sé si se dieron cuenta de que Iris está intentando separarlos.

-¿Qué? -se asombró Ruth.

-No sé por qué lo hace, pero me lo contó Zarah. Ella se sienta justo detrás de Iris y Matthew en la sala de clases y los ha escuchado hablando de cómo van a separar a Louise y Jason.

-¡Qué malvada! -opinó Sandra.

-Entonces arruinémosle los planes a esa rompe-parejas.

-De todas formas, nunca me agradó Iris. Creo que es muy pretenciosa y superficial.

Las chicas se entusiasmaron confabulando su plan para unir a Jason y Louise.


* * * * *


Margaret había invitado a Jason, Caitlyn y Ryder a su casa ese viernes por la tarde.

Ella amaba invitar a sus amigos. Preparó sándwiches de jamón y queso, un bizcocho, galletas y una torta de frambuesas. Tenía café, té, leche y chocolate para ofrecer.

Los primeros en llegar fueron Caitlyn y Ryder, que, por cierto, llegaron juntos tomados de las manos. Las juntas en casa de Margaret eran el paraíso para Ryder, un profundo amante de las galletas, bizcochos y prácticamente todo lo que contenga azúcar.

-¿Así que ahora es algo oficial lo de ustedes...? -preguntó pícaramente la chica anfitriona.

Ryder y Caitlyn se sonrojaron al mismo tiempo y ambos tartamudearon al intentar responder aquella pregunta.

-Eres malvada, Margy -bufó la rubia ruborizada-. Mejor cuéntanos sobre tu "amistad" con John Fisher -cambió el tema de conversación rápidamente Caitlyn.

-No...nada...o sea...no... -. La chica consiguió avergonzar a Margaret también. -John y yo somos sólo amigos por ahora.

-Sí amiga, te creo -dijo Caitlyn arqueando una ceja y apretando sus labios. Ryder se rio mientras mascaba un pedazo de bizcocho que había sacado de la mesa.

Los tres amigos se sentaron en la mesa redonda a comer mientras esperaban a que llegara Jason.

Caitlyn estaba comiendo más de lo normal. Todo efecto del amor.

-Estoy preocupado por Jason -comentó de pronto Ryder.

-¿Por qué?

-Por su situación con Lou. Los veo muy inestables a los dos.

-Hay que darles tiempo -opinó Margaret.

-¡Pero si todo está bien! -exclamó Caitlyn sonriendo -. Hasta Matthew se quiere disculpar con ella. Sólo es cuestión de que se confiesen los sentimientos mutuamente.

-Tampoco es que eso sea tan fácil -repicó el chico -. Yo tardé harto en atreverme a confesarte mis sentimientos, Caity.

-¿¡Caity!? -se sorprendió Margaret -. Ese es el apodo que nos prohibiste decir -acusó a su amiga.

-Yo soy especial -contestó Ryder con una gran sonrisa -. Y, volviendo al tema anterior: ¿cómo es que Matthew quiere disculparse con Louise?

-Matthew me dijo que quería disculparse -dijo Caitlyn -. Bueno, en realidad no fue Matthew, sino que Iris me pidió una idea para que Matthew se pudiera disculpar con Louise.

-Qué extraño -opinó Margaret.

-¿Y le diste alguna idea? -preguntó Ryder.

-Sí, al día siguiente le dije que era una buena posibilidad llevar a Louise a algún parque o plaza y disculparse sinceramente. Simple, ¿no? -respondió Caitlyn ligera.

Algo no le cuadraba a Margaret. Podía sentir que algo no andaba bien. Ella había observado a Iris últimamente, y notaba mucho apego hacia Jason. Además...Mathew disculpándose, es muy sospechoso.

Nota del autor:

¡Hola a todos! Sí, por fin subí nuevo capítulo. Yay. He estado muy ocupado, pero en fin, mejor tarde que nunca, ¿cierto?

He estado actualizando más mi otra novela, Ceylon Tea, que ¿Destinados?, así que pásense por ella también, que de seguro se la van a pasar bien, ¡es de humor!

¡Muchos saludos!

Martín.

¿Destinados?Where stories live. Discover now