Final ( Parte I)

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Hoy era el día.
Sam estuvo esperando todo el mes para esto, estaba nervioso, muy nervioso, pero ya no podía echarse atrás, llegó a la cárcel, estaba completamente sucia, con las paredes medio rotas y con un tono amarillo que probablemente hace mucho era blanco, y había moho en las esquinas de la pared...
- Hola, que quieres?
Sam se quedó mirando al señor que le había hablado, suponía que era una especie de guarda, pero parecía un oso...
- Ehhh yo... Querría hacer una visita...
- A quien?
-A una chica llamada Lisa
- ¿La pija?- dijo el tío con una sonrisa burlona
- ¿perdón?- cómo se atrevía a hablar de Lisa de esa forma...
- Nada, nada en unos minutos la podrá ver
- Vale- se sorprendió de la poca seguridad que había, no le habían pedido ni el DNI...
Pasaron unos diez minutos, de repente llegaron unos policías, y le llevaron a una sala, ahí estaba Lisa, pero detrás de una cristal
- ¡Lisa!- gritó Sam con mucha alegría, pero ella ni se inmutó, parecía que no le había oído
- ¿Que coño la habéis hecho?
- Nada- dijo un policía mientras se reía- para poder hablar con ella tienes que coger el teléfono que hay en tu pared, luego ella coge el suyo, y así podéis hablar...
- Vale, gracias- Dijo Sam muy avergonzado
Llegó al sitio, ahí estaba, detrás de ella había otra gente que también estaba hablando con sus seres queridos, pero a Sam le llamó la atención un grupo de chicas que les estaban mirando fijamente, daban miedo...
Sam cogió el teléfono, y Lisa le copió
- Hola... -dijo Lisa con un hilo de voz- ¿Que estas haciendo aquí?
- Hola cariño...- No sabía como contarle todo, esto se lo temía- Veras... Digamos... Que me han cambiado la condena...
- ¿Que, te han soltado?- dijo Lisa con un tono de alegría y a la vez de indignación( lo se, es un tono muy raro, pero ella lo hizo)
- No- dijo Sam riéndose para romper el hielo, no funcionó- Me han dejado trabajar para ellos en vez de estar en la cárcel...
- ¿Trabajas para ellos?.... ¿No desconfían de ti?
- No... Bueno... Antes sí, pero ahora ya soy como una mas....
- Sam eso es....- No acabó la oración porque una chica del grupo de atrás se acercó a ella, la dijo algo en el oído, y se fue con una sonrisa, a Lisa se le escapó una lágrima, pero en seguida se la secó- fantástico....
- ¿qué te ha dicho?
- Nada Sam...- dijo Lisa que cada vez lloraba más
- No me voy a ir hasta que me lo digas
-....-
- ¿Lisa?
-.... Vale, de acuerdo, pero disimula
- ¿Que?
- Que disimules- dijo lisa susurrando
-¿ Por qué?
- Porque si se dan cuenta de que te he dicho algo... Me matarán
- ¿¡Que!?
- Si jajaj como te lo digo, aquí hay bufet libre en la cafetería...
- ¿que coño haces?
- disimular pedazo de....- Le miró a los ojos, estaba asustado y muy confundido, no se merecía esto- Tu disimula ¿vale? Haz como si te estoy contando algo divertido mientras que yo te cuento lo que pasa...
-Vale- dijo con una sonrisa
- Ufff a ver como empiezo... - Hizo un pequeña pausa- Al llegar, había una chica de la que me hice muy amiga, ella parecía ser la jefa, es decir, todas la guardaban respeto y...
Sam se empezó a reír.
Como una foca.
Definitivamente no sabía disimular...
-Vale, Sam, te dije que te rieras, no que fingieras un ataque- dijo Lisa mientras reía, siempre la hacía reír, no importaba ni el lugar ni la situación.
- Vale, vale, perdón, sigue contando...
- Haber por donde me he quedado... Vale, todas la guardaban respeto y nunca nadie se metía con ella y como yo era su amiga, también me aprovechaba de las chicas esas, pero un día, mi amiga se fue, y desde ese momento las otras me han hecho la vida imposible...
- Vaya, y.... ¿Que te ha dicho la chica esta?
-Que me prepare esta noche...
-¿Que? Que te van a hacer?
- Probablemente pegarme hasta dejarme inconsciente, hoy lo han intentado hacer- dijo mientras sigilosamente le enseñaba un cardenal en el brazo- pero justo me han dicho que tenía visita y...- Sam la había salvado inconscientemente
- Pero... ¿Aquí no hay policías o que?
- Si, pero hoy están muy liados porque mañana un día muy importante, o no se que... En fin, el caso es que solo se ha quedado un policía, y está en la planta de abajo...
De repente sonó la alarma que tenía Sam en el tobillo, eso significa que se tenía que ir corriendo...
- Mierda...
- ¿Te tienes que ir?
- Me temo que...- No pudo acabar la frase
- No por favor, no te vayas, me van a hacer mucho daño, y cuando tu estas conmigo me das seguridad...- dijoLisa mientras lloraba
- Eh mírame, no va a pasar nada, ¿vale? voy a ir a por ti hoy mismo y te voy a sacar de aquí
- ¿Cómo lo vas a hacer?
- ya verás, ahora me tengo que ir, dentro de poco te veo, te amo
- y yo a ti...- Sam se iba a ir, pero Lisa le dijo que esperara
- ¿que pasa?
- Si no logras venir a por mi, no te sientas culpable, no me voy a enfadar ¿vale?
- Voy a salvarte- y en ese mismo instante, Sam colgó y se fue de ahí, no quería que Lisa le viese llorar, llorar porque ella lo estaba pasando horriblemente mal mientras a él le habían dejado salir de la cárcel.
Iba a salvarla, era muy difícil, pero no imposible.

Son Cosas del DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora