«CAPÍTULO DOS»

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Capítulo dos: Primer día.

Channel abrió nuevamente los ojos para mirar al techo unos segundos. Habían pasado dos días desde que habían ido a visitar a Jacob al hospital.

Alzo su mano a la altura de su rostro para mirarla. Aún podía sentir el tacto de su mano en su delicada y blanca piel.

—¿En qué piensas? —escuchó como alguien le preguntaba.

—En nada—volteó a ver a su novio—. Solo en que ya es tarde y deberíamos alistarnos para ir a la escuela.

—Son las seis de la mañana, Channel. Aún hay tiempo.

—Soy puntual—dijo la chica.

—Y yo no—sonrió arrogantemente.

Channel sonrió y viró los ojos. Aún no entendía como era que estaban juntos, eran tan opuestos pero a la vez tan iguales.

Tal vez por eso era que se gustaban ¿No dicen que "Los opuestos se atraen"?

Channel estaba dispuesta a pararse para prepararse para la escuela si no fuera porque la habían tomado de la cintura y la habían obligado a recostarse nuevamente.

—Bill...

—Relájate un poco, nena—dijo mientras empezaba a darle pequeños besos en el cuello a su novia.

Channel cerró los ojos y asintió al momento de sentir como Bill poco a poco se iba subiendo encima de ella.

—¿No te bastó lo de anoche? —dijo socarrona.

—Ya estamos desnudos ¿Para qué desaprovechar? —dijo coquetamente mientras besaba sus labios lentamente.

Channel arqueo su espalda y enrolló sus piernas en la cintura de su novio dispuesta a seguir con el juego.

Si no fuera que la puerta había empezado a sonar.

Los dos adolescentes guiaron su vista hacia ella.

—Mierda—bufó el rubio separándose de ella.

—¿Quién?

—¿Channel? Ya despierta, hija. El desayuno ya está servido, te estamos esperando.

Channel suspiró.

—¡Ya voy!

Una vez que los pasos de la madre de Channel desaparecieron, la chica se incorporó de la cama.

—Vístete, tu uniforme está en el segundo cajón de mi armario—señaló la chica.

Bill sonrió de lado. Le encantaba que su novia esté preparada para todo. Ella le compraba ropa para toda ocasión, hasta para la escuela. Después de todo él paraba todo el día con ella.

Eran inseparables. Eran la pareja de la clase. Nunca se separaban, a menos que sea por un partido de soccer o una conferencia presidencial de Channel.

Bill sacó su uniforme del armario. Lo miró un rato para después pasar la mirada a Channel.

—¿Y si faltamos?

—No podemos. Tienes partido hoy.

—¡Cierto! ¿Vendrás a verme?

—Tengo conferencia—dijo acercándose a su novio para que le abroche el bracier.

—¿Es necesario que vayas? —preguntó concentrado en el broche.

Channel volteó a mirarlo unos segundos con la ceja alzada.

—A ver, Bill—se frotó con un dedo el puente de su nariz—. ¿En qué año de escuela estamos?

Who is Dead?Where stories live. Discover now