Kanade Shippuden

Capítulo 32: Kaguya aparece.

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El poder del equipo 7.

Todos miraron hacia Madara quien se había convertido en un rival indestructible, pero todos decidieron simplemente mantener quietos mientras este se preparaba para hacer su Jutsu especial. Que determinaría el próximo movimiento del equipo siete, Sakura observó a Kakashi quien estaba tirado en el suelo adolorido mientras se cubría el ojo por lo que se acercó a él sin pensarlo mucho y se puso de rodillas para verlo.

— ¿Qué le sucedió a su sharingan? —preguntó ella tratando de que él hablara. Solo que el dolor en el ojo izquierdo se lo impedía, haciendo que Sakura mirara a Kanade quien todavía estaba ocupada observando a Madara.

—Yo... ¿Dónde está? ¿Dónde está Obito? —balbuceo con dificultad y la pelirrosa negó con la cabeza preocupada.

—Obito me liberó para que pudiera salvar la vida de Naruto... Aunque ni yo misma me estoy entendiendo —comentó en tono de broma para tranquilizar al peliplata.

La pelirrosa se detuvo en el momento que Naruto se posicionó justo frente a Kakashi y en un rápido movimiento curó su ojos, creando uno nuevo tal y cómo salvó a Gai, dejando que el chakra del sabio de los seis caminos se reflejará en su poder. Le enseñó una sonrisa a Kakashi, al percatarse que el chakra que le habían obsequiado había funcionado a la perfección y esperó a que este abriera los ojos, lo cual hizo luego de diez segundos sin sentir dolor alguno. Miró sorprendido a Sakura, sin entender como es que el rubio pudo darle un nuevo ojo con un solo toque. A pesar de que pudo ver cómo su estudiante salvaba la vida de su amigo Gai, aún se sorprendía de la forma en la que fácilmente lo curó y alivio su dolor.

Estaba seguro de que sus estudiantes habían ganado una fuerza increíble gracias a algo extraño que les había sucedido, mientras estaban inconscientes aunque no era nada extraño que ellos fueran fuertes porque lo demostraron durante el desarrollo de su crecimiento. Los cuatro demostraron todo su crecimiento en esa guerra que era sumamente peligrosa gracias a la fuerza que Madara comenzaba a enseñar. Kakashi, miró una vez más a Sakura quien mantenía una sonrisa sincera mientras observaba a Naruto quien estaba haciendo frente a Madara.

— ¿Así es como Naruto salvo a Gai? —Haruno miró en dirección a Naruto y luego miró a su Sensei para asentir.

—Ahora que Madara es alguien poderoso, nosotros tenemos que detenerlo.

Kakashi abrió los ojos al darse cuenta que Naruto aún poseía aquellas seis esferas que el sabio de los seis caminos le obsequió, su mirada se dirigió a la azabache quien demostraba que era la misma fuerza de Sasuke, ya que comenzó a formar a su Susano gris tal y como Sasuke. La pelirrosa miró a su equipo y corrió a un lado de la azabache quien saltó tal y como Sasuke, activando el Susano perfecto en segundos, que extendió sus alas para comenzar a volar directo a Madara.

— ¡Devastación planetaria! —gritó Madara. El equipo siete se sorprendió al ver como ese hombre dividía su Susano en clones de sombra.

Los Uchiha intentaron acercarse al enemigo, pero este comenzó a lanzar diferentes ataques los cuales ambos comenzaron a esquivar. Pronto en la pelirrosa comenzó a formarse un chakra demasiado extraño que comenzó a rodear al Susano de la azabache, el chakra verde comenzó a tomar forma de una babosa verde que cubrió al escudo del Susano y pronto, el chakra del Kyubi comenzó a rodear el de Sasuke, demostrándoles a las chicas que no iban a quedarse atrás. Madara, no pudo evitar que una sonrisa maliciosa se formara en su rostro; sin embargo, para él se le hacía nada más que una estupidez que chicos menos experimentados quisieran atacarlo con toda su fuerza.