Capítulo 11

3.9K 219 3
                                    

Me despierto cuando suena la alarma pero esta vez me encuentro sola. Hace unas semanas que Adam y yo dejamos de hablarnos, aunque fue más por mi. No quiero verle nunca más. Ahora al parecer esta "saliendo" con Erin. Todo lo que me prometió no significó nada para él...

Will es muy simpático, atractivo, amable y siempre está pendiente de mi, sin embargo no logró enamorarme de él. Le quiero pero no siento lo mismo a cuando estaba con Adam.

Todo es diferente... Aunque por una parte entiendo a Adam, Erin es una mujer madura, bastante guapa y muy inteligente. ¿Quién no querría estar con ella? Además cómo iba a gustarle yo, solo soy una cría...

Salgo del ascensor pero se me revuelve el estómago cuando Adam y Erin aparecen frente a mí al final del pasillo. Estoy a punto de darme la vuelta y marcharme a otro lugar pero saco fuerzas, o por lo menos lo intento, y decido actuar como si no pasara nada. Al parecer ellos también se dan cuenta de mi presencia. A mitad del camino nos cruzamos.

- Hasta luego Kate. -Dice amablemente Erin.

- Adiós. -Consigo decir.

Adam no ha dicho nada, estaba muy serio.

La pareja desaparece de mi campo de visión. Cuando llego delante de la puerta de mi despacho, nerviosa, saco la llave y abro temblorosa. Suspiro y me encierro.

No puedo verlos juntos, es superior a mí. Ya me sienta mal cuando coincido con Adam por los pasillos o en la cafetería, pero cuando está con Erin es mucho peor. Entonces me doy cuenta de que fui una estúpida enamorándome de él.

Levanto la mirada y me doy cuenta de que empieza a llover con bastante fuerza. Decidido que esta tarde solo habrá pelis y chocolate. Necesito mucho chocolate.

Como me prometí yo misma, alquilé la película El viaje más largo y compré dos tarrinas de helado de chocolate, también tenía dos cajas de pañuelos. A mitad de la película oigo como llaman a la puerta. Sin muchas ganas, me levanto y la abro. Me quedo paralizada al darme cuenta de quien se trata. Adam. Esta muy mojado por la lluvia, seguramente.

- ¿Qué estás haciendo aquí?

- Lo siento mucho, Kate...

Un nudo se me forma en la garganta. Tengo muchas ganas de llorar.

Dejo que pase y rápidamente le traigo toallas para que se sequé un poco. También le doy la ropa que se dejó en mi casa. Enseguida se empieza a desnudar para ponerse la ropa seca. Sé que ya le había visto desnudo unas cuantas veces pero aún así no me sentía cómoda sabiendo que él tiene novia.

Cuando está cambiado, los dos nos sentamos en el sofá. Adam me mira y enseguida pone una mano en mi mejilla y finalmente me aparta un mechón de pelo, colocándolo detrás de la oreja.

- ¿Qué quieres Adam?

Él mira hacia otro lado y veo cómo se le humedecen los ojos.

- Acabo de hablar con Erin. Hemos decidido que lo mejor para nuestras carreras es que nos vayamos a África. Así ayudaremos a quien no puede permitirse un cirujano... -Esta vez es a mí a quien se le humedecen los ojos. -Mañana por la mañana vendrá a por mí y cogeremos un avión.

Miro hacia otro lado. No puede hacerme esto. No ahora.

- Solo he venido a decírtelo. Creo que debías de ser la primera en saberlo.

- Muy amable por tu parte. -Digo en un tono sarcástico.

- Vamos, no te enfades por favor. Esto no es fácil para mí. Llevo mucho tiempo dándole vueltas a mi vida... -Dice Adam suspirando y luego vuelve a mirarme.

- ¿No vas a decirme nada?

- Yo solo quiero estar contigo. -Digo casi en un susurro. -No quiero que te alejes porque sé que se me romperá el corazón. Pero tampoco quiero obligarte a quedarte.

- He estado pensándolo mucho, Kate.

- Por eso creo que te has equivocado. Cuando tienes que pensar si estar con el amor de tu vida o no, es que no lo tienes claro. Si amaras de verdad a Erin, no habrías tardado en decidirte.

Adam no dice nada durante unos minutos.

De repente nos acercamos cada vez más hasta que nuestros labios se funden en un beso. Es muy precipitado como si en poco tiempo quisiéramos aprovechar todo el tiempo que hemos estado separados. Cuando nos separamos empiezo a llorar sin poder evitarlo. Me intento secar las lágrimas pero enseguida aparecen nuevas.

- Bueno, todo tiene su fin, ¿no Adam?

- Entonces tengamos un fin juntos.

Ocean Park HospitalWhere stories live. Discover now