Capítulo 1: Otro Día Común

256 11 0
                                    

Aquí estaba, recostada muy cómodamente en mi cama después de llegar de otra agotadora misión, que me dejo más adolorida que las anteriores misiones. Estuvo muy reñido el enfrentamiento cuerpo a cuerpo que acababa de tener, pero a fin de cuentas, termine mi deber asignado logrando una merecido victoria de mi parte, no diría lo mismo de la otra persona, estoy muy segura que no querrá meterse conmigo otra vez. Este trabajo cada vez que avanza el tiempo se vuelta aún más difícil, aunque eso no afecta mi promedio de 9.5 en la Universidad. No se como lo hago pero, puedo manejar el ser una estudiante y una espía secreto al mismo tiempo.

Bueno, aunque ya tenga una profesión, algún día dejaré este trabajo y me dedicaré a lo que realmente aspiro ser en la vida; una abogada. Pero todavía no, todavía hay criminales que merecen justicia. En algún par de años me retirare.

El sueño me gana, estaba realmente agotada, y así con mi traje hecho a mi medida de color negro como la noche, me dormí muy plácidamente.

(...)

Otra buena nota como siempre. Estaba sosteniendo en mis mano mi perfecto 9.5 de mi último examen de economía, tener buenas notas me demuestra que soy capaz de todo, puede pasar cualquier circunstancia y aún así mi promedio no bajará. Tampoco es que sea la más inteligente de mi clase, hay otros jóvenes que superan el promedio que yo tengo, pero no me importa, con tal de tener mi notas muy altas, ya soy feliz. Salgo del aula con mi bolso al hombro para poder dejar este examen que es como un premio para mi en el casillero.

Ya los pasillos están inundados con todos los alumnos. Como era de esperarse ya cada uno estaba con las personas de su rango social, aquí todo funciona de esta manera, nadie se junta con quien no debe y así todo el mundo estaba en paz. Yo estoy en el rango de los "conocidos" por así decirlo, no soy popular como para que todo los estudiantes me tengan respeto y sepan exactamente quien soy, pero tampoco soy de los olvidados que todo el mundo cree invisible y se ríe a sus espaldas. Todo esto es como una torre. En lo más alto están los populares, en la parte baja se encuentran los olvidados. Yo me encontraba en medio de esos dos, no era popular pero tampoco era olvidada, era algo verdaderamente ridículo pero bueno, no hay que quejarse.

Estaba abriendo mi casillero, cuando a lo lejos observo desde el rabino de mi ojo que se estaba acercando a paso decidido hacia mi, Máx Cranston. Llegando a mi lado, se apoyo en la puerta de mi casillero haciendo que este se cerrará con brusquedad, fue entonces que desee con todas mi fuerza que mi trabajo me salvará de esta situación.

— Roxana Graves, que gustó me da verte — Dijo él.

Y ya con solo mostrando sus perfectos dientes blancos, hizo que me diera una gran jaqueca de tener que soportarlo una vez más.

— ¿Qué quieres ahora Cranston?

Cruzándome de brazo y mirando con disgusto, me dispuse a esperar con que tonta excusa me iba a salir esta vez el descerebrado de Máx Cranston.

— ¡Guau, guau!, relájate, apenas dije unas pocas palabras, y ¿ya te quieres deshacer de mi tan rápido?

Ya sabía a que iba todo esto, es exactamente lo que ha intentado lograr desde que me conoció, y no le pienso dar el privilegio de conocerme más a fondo.

— Si, ya que siempre intentas una y otra y otra vez lo mismo, ¿cuándo vas a entender que tú y yo solamente seremos unos conocidos por casualidad?

— Entenderé eso cuando aceptes que no puedes estar siempre como un alma en pena que no tiene ningún amigo, ¿por qué simplemente no quieres dar el paso de ser solamente conocidos ha ser amigos? He.

— Eso a ti no te concierne.

Y dejando con la palabra en la boca, me giré sobre mis talones y empecé a caminar alejándome lo más posible de él.

— No me rendiré ¿sabes? — grita.

— Pues goza de la amarga decepción — le respondo.

Está era la rutina diaria que tenía que aguantarme. Máx Cranston, era un conocido de mi rango social, me mantiene molestando cada vez que puede, ya qué cree que no tengo que ser una persona que mantiene sola, y el quiere hacer el sacrificio de ser mi amigo de compañía, para que me vaya abriendo con las demás personas y no sea tan antisocial. Yo lo más amigable que pude ser, rechace su propuesta, y ahora cada vez que me ve, sigue insistiendo con lo mismo con el fin de que yo termine rindiendo me y acepte, y eso es algo que jamás pasará. Pero no me malinterpreten, eso no significa que yo no quiera un amigo, simplemente quiero tener menos gente que los criminales pueden tener oportunidad de atacar si es que algún día se revela mi identidad. Es una situación complicada pero quiero que así sean las cosas. Tampoco es que no me agrade, es mas me parece lindo y se ve que es una gran persona hasta cierto punto, pero así es mi vida y así seguirá.

Mi celular vibra dentro de mi bolso informándome que me había llegado un mensaje.

~Te necesitamos, es urgente~

Att: IAS

El deber llama.

Foto de multimedia

Sacado de la página: http://german.fansshare.com/gallery/photos/18682032/odette-annable-face-odette-annable/

Autor: TRISHA641 

No Soy Normal... Soy Una EspíaWhere stories live. Discover now