Cuando Llegue Por Ti.

Capitulo IV (REESCRITO)

El solo verlo me daban náuseas, sabía que ese chico sería un problema, ya antes lo había alejado de Heylie, espero que se quede dónde está.

-Mira Hey Hey, tu amor platónico está bajando de su Mustang.

-Ya lo noté Diana, y no es mi amor platónico.

Si, claro, sé cuánto puede mojarse por ese chico rudo con su Shelby GT500 del 67 Eleonor, me tomo medio año poder separar esa amistad, evitando que se convirtiera en algo más, dos años todo estuvo perfecto, pensé que el chico había muerto y ahora, ahora está aquí de nuevo, mirando a mi chica.

-Te este mirando Heylie!

Dijo Diana con nadie más que un grito que se extendió por toda la calle del colegio.

El chico no dudó en voltear y ver a Diana con una sonrisa de vergüenza, y apenas cerró la cajuela del flamante auto se dirigío hasta donde Heylie.

-Hola Diana, veo que sigues sin ser discreta- Decía sincerado, pero habia una cosa que me hizo enfadar, el solo no dejaba de mirar a Heylie.

Ésta última hizo caso omiso a su masculinidad, Pero no pudo evitar verlo por mucho tiempo y solo apretaba sus piernas evitando el hormigueo que le producía todo su cuerpo por el mar de hormonas recorriendo lo de arriba abajo.

-Ire a la cancha de básquetbol después de clases tal vez quieran una partida.

- ¡Con gus...! Antes de que Diana pudiese terminar la frace Heylie la interrumpió.

- Yo debo llegar temprano a casa, papá se molestara si falto a la noche de juegos de mesa.

-Dijiste "Noche" el juego sera a las 3:00pm pero no están obligadas...

¿Psicología inversa? Vamos todos están llenos de cosas trilladas.

-Vamos Hey Hey, igual tu casa queda de paso a las canchas, puedes regresar caminando, además te mueres por él.

-¡Cállate Diana! ¿No lo quieres gritar?

-¿Entonces chicas? Si se animan pueden venir a mi coche cuando suene el timbre de fin de clases. Y Heylie, si gustas puedo pasar y dejarte en casa, vivo a tres casas de la tuya.

¡Maldita sea! ¿Es en serio? Solo espero que mi chica diga...

-Esta bien, un rato no vendría mal.
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Paso el horario escolar, volando, debo decir, y recuerdo que Heylie solo no podía esperar ñ hora para subir al auto de Bradley, cuando al fin llegó el momento al menos creo que Diana haría el mal tercio y así libraría en de hoy, y de nuevo me equivoqué.

-Amiga, vas a matarme pero mi prima acaba de llegar de Alemania y mamá llamo, debemos recogerla en el aeropuerto en una hora así que irás sola con Brad.

-¿Es de verdad Diana? Esto lo planeaste, fue una emboscada.

-Vamos Hey, lo necesitas nunca has tenido novio, date la oportunidad.

-Diana, confíe en ti.

-Anda, te está esperando en su coche ve, deja de ser una mojigata y atevete por un instante a cambiar la rutina.

-¡Carajo Diana! ¿Si voy por esta vez dejaras de llamarme mojigata?

-Completamente ...MOJIGATA...

-Estúpida, te odio.

-Yo más, ¡Suerte! Me cuentas los detalles.

Empecé a ponerme paranoica, no sabía qué hacer , todas las noches son mis noches con Heylie, mías , no necesito un amor juvenil, mucho menos la felicidad que trae con ella, debo pensar cómo detener todo esto.