TREINTA Y NUEVE

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Noveno mes...

Harry's POV

Estoy un poco nervioso, mi vientre es gigante y ya casi se acerca el momento en que veré a mis hijos.

Estoy un poco asustado, por la operación y todo eso, pero la emoción es más grande.

Louis ya tiene todo listo, él ha estado trabajando de medio tiempo y con mucho esfuerzo y también con la ayuda de sus padres compro una casa un vecindario cerca de la casa de mi mamá.

Ella al principio no quería que la abandonara, pero luego acepto porque sabía que mis hijos merecían un hogar.

Louis se a encargado de arreglar un cuarto para los dos bebés. Esta la cuna blanca en medio, el cuarto esta decorado con dibujos de carros y flores, hay muchos juguetes que familiares y amigos nos han regalado, y la ropa muy bien acomodada en una armario que esta cerca de la ventana.

— Espero que les guste todo lo que papá Louis ha preparado para ustedes — dije tocando mi vientre.

— Claro que les va a gustar. Louis es todo un amor, y sus hijos serán igual a él — Dijo Ale saliendo de la cocina.

Ella había venido a ayudarme a colocar todo en su lugar para que la casa ya este lista y vivir como una familia junto a Louis.

— Gracias por venir Ale— le digo y ella asiente dedicándome una sonrisa.

— No hay problema Harry, cualquier cosa que necesites tú llámame — dijo se despidió con un beso en la mejilla y salió de la casa.

Yo entré a la habitación donde duermo con Louis y Ale había dejado hecha la cama y todo colocado en su lugar.

Llegue a la cocina y todo esta perfectamente puesto. Me sentía feliz de por fin tener una casa y compartirla con las personas que yo amo.

Me senté en el sofá y me puse a ver televisión.

(...)

Me dolía la espalda y sentía que mi pie derecho se había dormida, dejando esa sensación de hormigueo en el.

Louis me hablaba muy suavemente y cuando abrí los ojos me di cuenta que me había quedado dormido en el sofá.

— Hola — me dice Louis con una sonrisa que yo amo y me da un beso con el que me transmite todo el amor del mundo.

— ¿Qué tal tu día ? — le pregunto como cada día que lo veo llegar de sí trabajo.

— Algo agitado pero estoy feliz de estar ya aquí contigo.

— Vino Ale a ayudarme a tener lista nuestra casa.

— Muy bien, ya le daré las gracias. Pero ¿Que tal has estado tú? — pregunta sentándose a mi lado.

Yo apoyo mi cabeza en su hombro y comienza a acariciar mis rizos de una manera tan relajante.

— Excelente — sonrío.

— ¿No te aburres? — pregunta apoyando su cabeza en la mía.

— Casi no, la mayor parte del día me la paso durmiendo — digo y el ríe.

— Muy bien mi bello durmiente, ¿Quieres cenar?

— Claro.

Nos dirigimos a la cocina y yo me siento en el comedor esperando a que Louis termine.

— Harry aún no hemos hablado del nombre para el niño — dice sirviéndome un poco de comida.

— Bueno la verdad yo he pensado en sí le ponemos nuestros segundos nombres — le sonrió cuando se sienta a mi lado y toma mi mano para luego acariciar mis nudillos.

— Si tu quieres pero eso sí, llevaría tu segundo nombre primero — dice y yo asiento.

— Esta bien.

Luego de haber terminado de comer vemos un rato televisión y después nos dirigimos a nuestra habitación a dormir.

(...)

— Buenos días mí amor — dice Louis dándome un beso en mi frente.

Respondo a su saludo y el baja para ir hacer el desayuno. Hoy es sábado y es el único día de descanso que Louis tiene en toda la semana.

Me levantó y voy al baño a hacer mis necesidades.

Cuando ya me he puesto la ropa, bajo para ir a desayunar junto a Louis.

— Tengo pensado salir a cenar, ya sabes, ya que todavía tenemos tiempo para nosotros tenemos que aprovecharlo.

— Suena bonito, pero no me gusta salir,  las personas se me quedan viendo y eso no me agrada — digo y hago un puchero — ¿Qué te parece organizar una cena aquí?

— Mmm Ok pero como no quiero cocinar, hay que ordenar la comida — dice y ríe.

— Adoro tu risa — le digo y el me ve con un leve sonrojo en su mirada.

— Gracias — dice y me da un tierno beso.

Terminamos y luego vamos a casa de la mamá de Louis porque tenía que llevarle una medicina.

Cuando ya estamos ahí las gemelas se me acercan y ponen una mano cuidadosamente en mi vientre.

— ¿los bebés andan ahí? — pregunta Phoebe y yo asiento.

— Pero yo no siento nada — dice Daisy con una carita triste.

— Es porque ahorita deben de estar durmiendo — les sonrió y ellas forman con su boca la letra O.

— Yo quiero que cuando me case mi esposo tenga un bebé — dice y yo río.

— Ya niñas, dejen de aburrir a Harry con sus cosas — dice Jay acercándose con la sonrisa que la caracteriza.

— No me aburren, son muy graciosas — admito.

— ¿Cómo te ha ido? — pregunta sentándose a mi lado.

— Muy bien, esperando que estos chiquitines ya estén en mis brazos.

— Claro, yo también espero eso, me alegra ver ese brillo especial que han adoptado los ojos de mi hijo — me da un abrazo maternal —, gracias Harry.

— Gracias a usted por haber criado a un hombre maravilloso — le digo y ella suelta una risilla mientras asiente y se levanta.

— Louis bajara en cualquier momento, esta hablando con su padre, ¿ quieres algo?

— No. Estoy bien, gracias — le digo y ella asiente y se dirige a la cocina.

Hablar con Jay es agradable, siempre me agradece por estar con Louis, pero al contrario; yo debo estar agradecido de tener a Louis.

Porque Louis es un rayo de sol que siempre esta conmigo, dándome amor y protección. Y es eso que lo hace una persona muy especial para mí.

Hola 👊

Sé que me había tardado en actualizar pero aquí está ya.

Gracias a todas las hermosuras por leer.

Besos,

Ale ❤️

El Destino »[L.S]«  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora