Objetivo: Neverland

Capitulo 43: Un dulce recuerdo

Narra el capitán Jones:

Ahora ya sabíamos como salir de la isla. Solo necesitábamos encontrar a Dian y salir de aquí.

-Campanilla ¿Como llegamos a el campamento de Pan?- Dije mostrándole el mapa.

-¿Con este mapa? No llegaríais jamas.-

-¿Por que no?-

-Por que esta trucado.-

-Ya, de eso nos hemos dado cuenta.- Ha dicho Alison.

-Me refiero a que señalara a cualquier lugar menos el campamento.-

-Niño del demonio...- Susurre.

-¿De donde lo saco capitán?-

-Pan me lo dio a mi.-Dijo Fran.

-¿Enserio?- Le miro asombrada.- Yo tenia razón entonces, Pan no quiere ni loco que encontréis a Dian.-

-Pues eso no sera así ¿Como llegamos hasta él?-

-Yo se donde se esconde Pan.-

-Genial.-

-Pero de noche, es mas difícil orientarse.-

-¿Insinúas que debemos acampar aquí?-

-Que remedio. Mi cabaña esta bastante lejos como para volver de noche.-

-Bien, pues acamparemos aquí.-

Estuvimos un rato mas despiertos para saber donde se hallaba Pan. Pero al final el sueño pudo con nosotros.

Una vez bien entrada la noche, yo me desperté. No sabia por que, pero me desperté. No podía volver a coger el sueño, a si que, me quite mi chaqueta y la deje donde estaba tumbado para que no se preocuparan y me fui a andar un poco.

No quise alejarme mucho para no perderme pero también quería relajarme un poco.

-Hola capitán.- Escuche a mis espaldas.

Pensé que seria Pan y desenvaine y apunte al lugar procedente del sonido, pero mi sorpresa fue mucho mas agradable.

-¿Emma?-

-¿Te importaría dejar de apuntarme?-

-¿Eres un sueño o esta vez es real?-Dije envainando.

-No, soy real. En Neverland puede pasar cualquier cosa.-

Sonreí al ver que se acercaba y cuando estuvo lo suficientemente cerca la bese.

-Si que eres tu.- Dije cerca de su rostro.

-¿Quien crees que podría ser?-

-Un truco de Pan.-

-Si fuese un truco, ya estarías muerto.- Sonrió.

-Te he echado tanto de menos.-

-Y yo. Pero vengo para advertirte.-

-¿Advertirme sobre que?-

-Sobre Dian.-

-¿Dian? ¿Donde esta? ¿Esta bien?-

-Tranquilo Killian. Esta bien, de momento.- Suspire de alivio al oír eso.- Pan la tiene encadenada en su cabaña.-

-¿¡Que!? ¿Como ha podido hacer eso?- Grite.

-Por que el chico es malvado, y solo Dian puede ayudarle.-

-¡Me da igual si puede ayudarle o no! En cuanto tenga a Dian, nos marchamos de aquí.-

-Pan no os dejara ir si Dian no le ayuda.-

-¡Pero Emma ha secuestrado a nuestra hija!- Creo que se ha sorprendido al escuchar eso.- ¿Que pasa?-

-Has dicho nuestra hija...-

-Claro, por que lo es.-

-Nunca antes lo habías dicho -

-Emma...- La agarre de las manos.- Te juro que encontrare a nuestra Dian.-

-Confió en que lo harás.- Me beso.

-Si le llega ha hacer algo, te juro que lo pagara.-

-Killian...- Me miro triste.- No puedo decirte por que, pero no lo hagas.-

-¿Por que no puedes decirme el motivo?-

-No puedo. No le hagas nada a Robbie.-

-Pero...-

-Cuando encuentres a Dian y le salvéis a él también, lo entenderás todo. Pero no le mates, por favor.-

Pensé un poco en lo que me dijo y después le mire a los ojos.

-Si Dian aparece sana y salva, Pan no sufrirá daño alguno.-

-¿Me lo prometes?-

-Te doy mi palabra.-

Emma me sonrió y después empezó a brillar.

-¿Que te pasa?-

-Que me tengo que ir...-

-Emma... No me dejes de nuevo.-

-Tranquilo, nos veremos pronto. Los tres juntos.- Me beso.

-Te quiero, amor.- Dije sin separar nuestras frentes.

-Y yo también a ti, mi capitán.-

En cuestión se segundos, Emma ya no estaba. Lo mas raro de todo fue que me dijo que no matara a Pan. Pero no dejaré que salga bien parado si Dian llega a sufrir.

Cerca de donde estaba, hallé una planta de sueño mortal, y extraje un poco de su ponzoña y la guarde en un pequeño frasco. Si era necesario, la hoja de mi espada acabaría untada de esta ponzoña y clavada en el pecho de Pan.