El chico del metro

Salida Cris y Franco

Narra Cristina:

Creo que Jaz exageró un poco con mi atuendo. O sea, me veo bien, pero es demasiado sólo para una salida. Ni que fuera la gran cosa ¿no?

Dejo de verme en el espejo y voy donde Jaz. Otra vez con el celular. A que está hablando con Ethan.

-¿No crees que exageraste un poco?- alza la mirada y sonríe. No, esa sonrisa no.

-¡Qué hermosa!- sí, ya empezó - Déjame tomarte una foto ¿si?

Ruedo los ojos y asiento. Luego de como veinte fotos tocan el timbre...

¿Por qué tiemblan mis manos?

Jaz se adelanta y va a la puerta. Vuelvo a verme al espejo. Estoy bien.

-Hola Franco-escucho que dice y se me eriza la piel. Por Dios Cris, ¿qué te pasa?- sí, está aquí, pasa.

Voy a la sala donde están ellos y lo veo. Se ve demasiado bien.

-Hola..-me saluda y sonrío.- Bueno, pues.. ¿vamos?

Asiento con la cabeza. Demonios, ya para de sonreír.

- Chau chicos, diviértanse- habla Jaz y me guiña un ojo.

Okay, Cristina. No te pongas nerviosa, es sólo una salida. Nada más, no es la gran cosa.

Sí, sigue diciéndote eso hasta que te lo creas.

(...)

Franco estaciona el auto, o bueno, eso parece porque se detiene. No veo nada y no es porque sea de noche.

Literal, Franco me hizo ponerme una venda y no he visto nada desde que salimos de la casa de Jaz.

- ¿Ya puedo ver?

- Todavía no preciosa -gruño, sí, gruño-Lo sé, no te gusta que te diga así. Tienes que esperar un poco, ven, yo te llevo que si no te vas a caer.

Siento que se pone atrás, me toma de los hombros y me lleva a no sé dónde.

Escucho algo de gritos y sonidos de pistolas...

Espera...¿qué?¿ a dónde me ha traído?

-¿Vas a matarme?- escucho un ¿qué? por su parte- Digo que si me vas a matar. Escucho pistolas.

Oigo su risa, ¿de qué se ríe el tarado este?

-No, claro que no.- lo escucho más cerca, ¿a qué distancia está?- ¿cómo si quiera piensas eso? Sí, esos son sonidos de pistolas, pero no son de verdad.

¿Qué?¿de qué está hablando?

-Quise salir de lo cotidiano. Hacer algo diferente a lo que cualquiera haría. Antes de quitarte la venda... Cris, ¿le tienes miedo a perder?

No entiendo lo que dice, pero igual respondo.

- No, ¿ahora sí me dejas ver?

-Claro.- me quita la venda y después de como una hora, puedo ver.

Lo único que veo son unas cortinas negras y dentro se escucha toda la bulla.

-Como lo dije, no me gusta hacer lo típico de una cita...

Okay, no te aloques porque dijo esa palabra.

-... así que te traje aquí.

- Entendí eso, pero ¿en dónde estamos?

- Vamos a jugar paintball.

-¿Paintball?

- Es un juego en el que tienes que disparar...

- Sé lo que significa, sino que... No me lo esperaba.

Sonríe.

- Eso era lo que quería oír.- inconscientemente sonrío-Bueno, ven que tienes que ponerte esto o ahí sí te va a doler.

(...)

Narra Jazmín:

- ¿Conoces este lugar?- le pregunto a Ethan.

- Obvio que lo conozco. Aquí vengo con Franco desde que tenemos 10 años. Su lugar favorito.-Frunce el ceño-No trae a ninguna chica aquí.

-¿Y eso qué significa?

-Que u olvidó eso, lo cual dudo mucho, o de verdad le gusta Cristina.

No respondo. No porque no sepa qué responder, sino porque me sorprende lo que me acaba de decir.

Yo también tengo un lugar favorito y es muy extraño que lleve a alguien ahí.

-Ven, entremos antes que inicie el juego.

Asiento y entro a ese lugar. Lo único que veo son unas cortinas negras que cubren prácticamente toda la pared y detrás de esta se escuchan gritos de niños, pero uno logro reconocer.

-Demonios, ya comenzó-habla Ethan.

-Ese grito es de Cristina.

Vamos a ponernos el uniforme y recoger las pistolas cargadas.

Entramos y veo lo que de por sí mi mente ya se había imaginado.

Niños corriendo con pistolas, otros niños escondidos y todo tipo de pintura en las paredes.

El juego es en parejas así que Ethan me está cubriendo la espalda. Honestamente nunca he jugado esto y no sé cómo funciona esta pistola.

Busco con la mirada a Cristina y Franco. ¿Dónde están?

Narra Cristina:

-No puedo creer que esos niños nos hayan disparado.-bufa Franco y se sienta en la silla junto a mi.

Sonrío.

-Es sólo un juego.

- Sí, lo sé-suspira-, pero lo he jugado con Ethan desde pequeño. ¿Soy el mejor entiendes? Esos mocosos salieron de la nada.

-Ya, tranquilo. En otra oportunidad jugaremos y esta vez sí vamos a ganar, ¿okay?

-Sí, está bien; sino que quería impresionarte. Se supone que este juego es mi fuerte.- baja la cabeza.
Sonrío por tercera vez. Es el primer chico que conozco que trató de impresionarme.

Volteo a verlo, sigue con la cabeza hacia abajo.

Nunca lo había visto así. De lo poco que lo conozco siempre lo veo haciendo bromas. La mayoría para Ethan cuando lo ayudábamos.

Jamás mostró esta faceta, en la que quiere impresionar. Siempre ha sido del chico que no le importa lo que opinen de él.

-¡Tengo una idea!-levanta la cabeza y me sonríe. ¿Qué se le ocurrió?- O sea, no es la mejor, pero al menos no nos van a ganar unos mocosos.

Río por lo último que dijo.

- ¿Cuál es tu idea?

-¿Quieres ir a comer pizza? Sí, lo sé, debería ser algo mejor, pero..

- No, no. -lo interrumpo-Es una gran idea.