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Camila's POV

—Aún no me habéis dicho dónde vamos. —Pregunté mientras caminábamos juntas por un sendero de albero, entre árboles altos que bordeaban el lago.

—Hay un partido de béisbol. Va a ir todo el mundo, es divertido. —Dijo Ally apretándome el brazo del que me llevaba agarrada.

—Vaya. —Dije sorprendida, abriendo los ojos para mirar a la mayor. —No me esperaba eso en este pueblo.

—¿El qué? —Normani se dio la vuelta con el ceño fruncido mientras llegábamos al campo de béisbol.

—Que hubiese tanta vida. —Se echó a reír encogiéndose de hombros.

—Intentamos hacer cosas todos juntos para no aburrirnos, y al final, lo pasamos realmente bien.

Atravesamos los árboles hasta llegar a un llano de albero, arena amarilla, con algunas gradas algo viejas alrededor, con una valla que separaba las gradas del campo. Eran bancas de metal sin más, había algunas sillas blancas sucias, pero nadie se sentaba en ellas.

Cuando vi a Lauren con aquella camisa de béisbol blanca con detalles rojos y azules, juré que si algún día me acostaba con ella le pediría que se dejase esa camisa puesta. La tenía medio abierta, con esa camiseta de tirantes blanca debajo, unos pantalones azules ajustados y el pelo recogido.

Lauren giró la cabeza un momento mientras bebía agua y me miró a mí, esbozando sonrisa de medio lado. Comenzó a caminar hacia nosotras con una bolsa pequeña de deporte en la mano, hasta que llegó a nuestra altura.

—Hey, chicas. —Las miró a ellas y luego a mí. —No pensaba que vendríais.

—Bueno, hemos pensado que un poco de béisbol no está mal para pasar la mañana. —Sus ojos no se separaban de los míos, y alargó su mano para quitarme algo de la pestaña. Cerré los ojos y lo retiró con cuidado, echándolo luego a un lado.

—¿Y a quién vais a apoyar? —Miró hacia atrás para echarle un vistazo al otro equipo, y luego volvió a nosotras. —¿A los del pueblo de al lado o a nosotros?

—A ti. —Respondimos todas a la vez. Nos miramos entre nosotras casi confundidas por la sincronización, pero es que Lauren imponía tanto que no podía responderle otra cosa que no fuese eso. Ella soltó una suave risa, humedeciéndose el labio.

—Está bien. —Se quedó mirándome a mí, y las chicas comenzaron a separarse.

—Camila, vamos a coger sitio. —Asentí cuando se iban, y me quedé asolas con Lauren. Sonreí arrugando la nariz.

—¿Puedes guardarme esto? —Levantó la bolsa de deporte y frunciendo el ceño. —Todos llevan a sus novias pero... —Soltamos una risa a la vez. —No pesa mucho, sólo lleva una botella de agua, una toalla y mi móvil.

—Claro, dame. —Tomé su bolsa y me la colgué al hombro, mordisqueándome el labio inferior.

—Gracias. —Estiró su mano y me acarició la mejilla, dejando un suave pellizco. —Te veo luego, Mila.

Mila. Salió corriendo hacia el campo, y yo me quedé unos segundos intentando reaccionar o algo. Al final me fui a las gradas, al lado de las chicas.

—¿Qué te ha dicho? —Preguntó Dinah, haciendo que las otras tres se girasen hacia mí.

—Que si podía guardarle la bolsa, y que me ve luego. —Puse la bolsa a mis pies, y todas me miraron con una sonrisita.

—Al final tú y Lauren... —Normani alzó su ceja con una sonrisa pícara.

la chica del maíz; camrenWhere stories live. Discover now