Capitulo13

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Estuve dos horas cocinando. Todo toma su tiempo, me repetía. Para no perder la motivación de dejar a Sean con la boca abierta cuando se diera cuenta que estaba jugando con la chica equivocada, le hice un chiste muy chiquitito y cambié la sal por el azúcar. Era muy mala. En realidad no. Podría haberle puesto vinagre en el jugo o cualquier otra cosa, pero no se me había ocurrido más que cambiar dos cositas. Aunque usándolas mal, era una gran diferencia. Cuando él bajó yo seguía cocinando. No lo miré y seguí con mi labor. De pronto, sentí un aire caliente en mi cuello.

-Hola...-se escuchó en un susurro.

Tal fue el susto que solté la sartén y me quemé el brazo. El suelo quedó cubierto de salsa blanca. Y yo me frotaba el brazo muy rápido para que el ardor se fuera. Intente caminar hacia la heladera para buscar hielo, pero me resbalé con la salsa y caí de espaldas. Todo me dolía. Era muy intenso. Y Sean estaba ahí, mirando con una sonrisa en su rostro.

Vio que lo que había cocinado era pollo al champiñón. Hizo una mueca de desagrado y tiró todo a la pileta de la cocina. Hasta el pollo. No lo podía creer. Puso una olla nueva con agua y se quedó mirándola. Intenté pararme, pero me costaba con tanto dolor. Logre ponerme de pie don dificultad. Fui a la pileta del lavamanos y saqué el pollo de ahí. De alguna forma me culpaba a mi misma por tener que soportar todo eso. Por haber querido escapar, por contestarle mal a mi padre, por haberle arruinado la vida, por haber arruinado la de Sean. Tiré el pollo a la basura con los champiñones me quede ahí parada, mirando como lo que me había costado dos horas se pudría. Pero bueno. No era para tanto. Fui al freezer y saqué un hielo. Me lo coloqué suavemente en la herida del brazo y subí al cuarto donde Sean dormía. Cada vez me repugnaba mas vivir con él. Cerré con llave la puerta. Me tiré en la cama y me puse a pensar en lo que era mi vida antes de que todo eso pasara.


SASEAN.Where stories live. Discover now