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"¿Estás seguro que esto resistirá?" Harry tenía los brazos en jarra y una mirada graciosa que dudaba del trabajo que habían hecho 'construyendo su casa'. Habían ocupado varias horas recolectando todo lo que necesitarían para poder tener aunque sea algo que les cubriera la cabeza. Con las hojas de palmera que encontraron en el suelo, hicieron el techo, uniéndolas y atándolas con lianas, para formar así como un abanico gigante. Luego, clavaron unas especies de palos de algún árbol al piso, atándolos también con lianas a los troncos de los árboles del costado. Por último, pusieron 'el techo' sobre los palos y lo ataron a estos, dándole así forma de algo parecido a una cantina o 'parada de autobus'.

Louis miró su trabajo (sí, suyo, porque Harry sólo le había alcanzado los elementos y se había quejado) y quedó bastante satisfecho. "Quiero pensar que sí..." Pensó un poco su respuesta y después habló. "Además no creo que necesitemos protección para una tormenta, porque desde que estamos aquí sólo ha llovido una vez y no fue más que una pequeña llovizna" Sobre la arena, bajo el techo que habían fabricado, dejaron varias hojas gigantes de color anaranjado que habían arrancado de un árbol bajo (perdón, arbolito, pero era necesario), y que usarían como 'manta'. Harry asintió, dándole la razón, y también recordando aquel día de lluvia, donde por primera vez habían intimidado.

"¡La tienes!" Louis sintió cómo Harry le golpeaba el brazo y luego lo vio correr lejos, hacia la arena.

Louis comenzó a caminar hacia él a paso lento. "¿De qué hablas?" Se hizo el desentendido.

Harry dejó de correr y lo miró perplejo. "¿Nunca has jugado a la mancha?" Louis negó con la cabeza mientras seguía acercándose lentamente hacia el chico. "No tuviste infancia, entonces" Louis rió. "Tenemos que corrernos el uno al otro y si el que tiene 'la mancha' te toca, ahora tú la tienes, y como yo te toqué-" Louis había llegado a su lado, haciéndose el que lo escuchaba atentamente, pero él ya sabía cómo jugar, sólo quería hacer trampa. Lo tocó y salió corriendo. "¡Hey, eso no vale!" Harry comenzó a perseguirlo por la arena. Louis reía y le gritaba cosas a Harry mientras se alejaba de él, pero su victoria no duró mucho ya que el rizado era más rápido y lo alcanzó a los pocos segundos. Harry tomó a Louis por la espalda y ambos cayeron al piso, quedando repletos de arena. "Y volví a triunfar" El pecho de ambos sube y baja, tratando de recuperar el aire que perdieron corriendo por la arena y jugando como dos niños. Louis está viendo hacia el cielo, mientras que Harry lo ve a él y se sienta en el lugar sólo para acercarse a Louis y dejar un suave beso sobre sus labios. "Nunca me canso de tus labios" Le susurra aún rozando su boca, haciendo que Louis no sólo muera por dentro por sus palabras sino por el toque de su piel. Louis sigue con sus ojos cerrados, queriendo que ese momento dure para siempre. Cuando logra abrirlos, se encuentra con los orbes verdes de Harry inspeccionando su rostro, cada detalle de él. Sus labios le arden, como pidiéndole más de aquella droga que eran los labios color sandía de Harry, y entonces el piloto une ambas bocas, haciendo desaparecer los centímetros que los separaban. Los dos vuelven a recostarse sobre la arena, uno al lado del otro, viendo hacia el cielo que era celeste con casi ni una nube en él, y el sol brillando sobre ellos. El clima no variaba mucho; casi siempre hacía mucho calor, y ese día no era un excepción. "¿Crees que está mal lo que estamos haciendo?"

Louis frunció el ceño, sorprendido y confundido ante esa pregunta. "¿A qué te refieres, Harry?" El nombrado largó un suspiro y se sentó en el lugar.

"A esto..." Hizo señas con las manos a todo a su alrededor. "A que en vez de estar tratando de salir de aquí, estemos tirados en la playa, besándonos y..." Harry hacía señas con sus manos, no sabiendo cómo decirlo.

Louis lo interrumpió. "Y queriéndonos" Sentía necesario decir aquello. Lo tenía atorado dentro suyo y quería saber si Harry estaba de acuerdo con aquella palabra.

Lost In Your Eyes | Larry Where stories live. Discover now